Ya lleva dos días la toma en los colegios Carlos Pellegrini y el Nacional de Buenos Aires
La medida rige desde el lunes a la anoche y es para repudiar el veto de ley de financiamiento; hoy definen si siguen o levantan
5 minutos de lectura'
Horas antes de la Marcha Federal Universitaria, convocada frente al Congreso en rechazo al veto presidencial de la Ley de Financiamiento Universitario y de la Ley de Emergencia Sanitaria Pediátrica, la ciudad de Buenos Aires ya mostraba el movimiento estudiantil en acción. Colegios preuniversitarios y facultades de la UBA se organizaban para confluir en la movilización, con la expectativa de que la Cámara de Diputados revierta la decisión del Ejecutivo.
En ese clima, dos de los colegios preuniversitarios más emblemáticos de la UBA se encuentran tomados. Ayer a la mañana el Colegio Nacional Buenos Aires inició la medida de fuerza y, por la tarde, se sumó la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini, que comunicó la decisión a través de las redes sociales de su centro de estudiantes. En ambos casos, las tomas se definieron en asambleas y se sostienen con el apoyo de docentes, exalumnos y alumnos que pernoctaron en los edificios.
En el Nacional Buenos Aires, un cartel sobre las rejas del frente advierte en letras grandes: “Colegio tomado”. Detrás, en el hall de entrada, los estudiantes realizaban ayer una asamblea para organizar la continuidad de la medida y definir la participación en la marcha. León Rodríguez Vieito, presidente del centro de estudiantes, contó a LA NACION que la decisión se tomó el lunes “a través de asambleas multitudinarias con todos los chicos participando, con resoluciones casi unánimes para tomar el colegio”.
Según relató, ya pasaron dos noches en el establecimiento “muy tranquilas, con muchos compañeros viniendo a bancar la toma, preocupados por su educación, con muchas personas adentro sosteniendo esta medida de lucha”. El dirigente recordó que el martes participaron de la marcha por el aniversario de la Noche de los Lápices y que hoy volverán a movilizarse. Para eso, explicó, organizaron un esquema de seguridad con la ayuda de exalumnos: “Nos organizamos con compañeros egresados que se quedan cuidando el colegio mientras todos los chicos vamos a la marcha. No dejamos a nadie adentro más que a estos exalumnos que nos están dando una mano con la seguridad en los momentos de la movilización”.
Respecto de la jornada que se avecina, Rodríguez Vieito señaló: “Creo que es una de las marchas más importantes del último tiempo para el movimiento estudiantil. Lo que se está viendo ya en las aulas, en los pasillos, es cómo los chicos vuelven a hablar de la defensa de la educación, vuelven a criticar al Gobierno, que es algo que no pasaba desde el año pasado con el primer conflicto universitario. Se espera una marcha muy movida donde vamos a exigir a los diputados que rechacen esta ley. Esa es la exigencia que vamos a mantener hoy”.
Banderas con consignas
Horas más tarde, el Pellegrini también se sumó a la medida. La fachada del colegio exhibía largas banderas blancas con consignas de UTE que colgaban desde los balcones: “Sin salarios dignos no hay educación de calidad”. Debajo, un cartel de colores confirmaba la decisión: “Escuela tomada”.
Delfina Carbajal, presidenta del CECaP, explicó a este medio que las discusiones se dieron en asambleas realizadas el lunes, en coincidencia con la fecha histórica del 16 de septiembre, cuando cada año el movimiento secundario marcha en recuerdo de la Noche de los Lápices. “Aprovechamos esas asambleas para debatir qué hacíamos con el veto, porque somos un colegio preuniversitario y nos afecta directamente la decisión contra la ley de financiamiento universitario. En ese marco resolvimos que había que tomar medidas fuertes. Tanto en el Nacional como acá se llegó a la conclusión de que era necesario tomar las escuelas, porque no podemos seguir dejando que nos pasen por arriba, que el Gobierno de Milei crea que puede vetar todo y que la gente no va a hacer nada”, señaló.
Carbajal explicó que la toma no comenzó el mismo lunes porque el colegio decidió priorizar la marcha secundaria del 16 de septiembre. “Por eso no tomamos ese día, sino ayer a la vuelta de la marcha, para tener nuestra propia medida de fuerza pero también convocar a la movilización que para los pibes es muy esperada todos los años. Ahora seguimos en toma y en un rato tenemos una asamblea para definir cómo seguimos. La idea es ir a la marcha de hoy. Vamos a dejar un par de personas adentro y a la vuelta, según el resultado de Diputados, veremos qué hacemos con la medida y también qué resuelven otras universidades y colegios que están en la misma situación, como el Nacional y Sociales que estuvieron en vigilia anoche”, explicó.
La secretaria general del centro, Laura Zukerfeld, agregó: “Lo que buscamos con esta medida de lucha es interpelar a todos los estudiantes y que entiendan que este veto es un freno directo a nuestra educación y a nuestro futuro, y que por eso tenemos que salir a las calles, organizarnos y defender la educación pública. Esperamos por parte de los diputados que nos defiendan, que se planten contra Milei, contra el ajuste de la derecha y que protejan a los estudiantes, que somos quienes soñamos con un país mejor. Sin educación pública, gratuita y de calidad, no vamos a poder construir un futuro distinto”.
Ambas dirigentes coincidieron en que la expectativa de hoy es una convocatoria masiva que muestre el rechazo al veto y presione a los legisladores. Mientras tanto, en las puertas del Pellegrini colgaban nuevas pancartas pintadas a mano, con frases que recordaban la consigna central de la jornada: “Nuestro futuro no se veta”.
1Caso Cecilia Strzyzowski: ya tiene fecha la lectura de la sentencia con la condena por homicidio del clan Sena
2Autismo: las razones detrás del llamativo aumento de casos y la advertencia de expertos
3“La tragedia educativa”: cuáles son los principales problemas de los estudiantes y docentes argentinos
4Quién es Enrique Shaw, el empresario que será beatificado por el papa León XIV





