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Hay muchas hipótesis acerca de por qué a San Salvador de Jujuy se le dice cariñosamente La tacita de plata: porque los ríos Xibi Xibi y Grande, que la rodean, surcan el valle como cintas que brillan; o porque es pequeña y se alza en medio de cerros, o por su antigua riqueza en plata. Lo cierto es que cambió varias veces de nombre: fue fundada en 1561 como Ciudad de Nieva; en 1575 pasó a ser San Francisco de Alava; recién tomó su nombre actual en 1593. Bastante después, durante las guerras por la independencia, fue escenario de las batallas entre el Ejército del Norte y las fuerzas españolas. Por eso, el nombre de Belgrano bautiza la avenida principal y la plaza central de la ciudad, inicio de cualquier paseo.
La bandera de Belgrano y la bala de Lavalle
Frente a la plaza está la Casa de Gobierno, custodiada por cuatro estatuas de la tucumana Lola Mora que representan La Paz, La Justicia, La Libertad y El Progreso. Parece un castillo francés del siglo XVII, pero construido alrededor de un patio interno, al estilo español. En la planta alta, el Salón de la Bandera exhibe la primera bandera nacional, donada por Belgrano al Cabildo en 1813, a modo de agradecimiento al pueblo que lo acompañó en el famoso éxodo de 1812.
Justo enfrente, el Cabildo mantiene sus paredes de adobe de un metro de grosor y su galería de 19 arcos. Desde el balcón, Belgrano mostró al pueblo la bandera recién creada. Ahora es el MuseoHistórico Policial, con antiguos uniformes de policías y bomberos.
A un lado de la plaza se encuentra la inmensa Catedral, reconstruida en estilo neoclásico tras el terremoto de 1843. Su tesoro es el púlpito, tallado en madera de ñandubay y cedro y laminado en oro por manos indígenas en las misiones jesuíticas del siglo XVII.
El circuito histórico se completa con el Museo Histórico Provincial, más conocido como Museo Lavalle, que carga con un mito: la puerta a través de cuya cerradura habría pasado la bala que mató a Juan Lavalle, el 9 de octubre de 1841. También pueden verse cartas de Manuel Belgrano, estandartes de guerra, vestidos y la campana del antiguo Cabildo. En la misma calle Lavalle se encuentra el Museo Arqueológico.
Textiles y arcillas
Vale la pena detenerse a ver los productos de la laboriosidad jujeña. La feria de artesanos principal está en la Av. Urquiza, al lado de la estación del Ferrocarril; se encuentran excelentes tejidos en telar y a mano, trabajos en alpaca y plata, cerámicas y el las piezas de los reconocidos hermanos Mendoza ?Mario y Miguel?, que hacen figuras de arcilla pintada.
Para tener una visión panorámica de la ciudad, conviene llegar hasta alguno de los miradores que la rodean; por ejemplo, el del Paseo Botánicoy Etnobotánico de la Viña, a cinco minutos del centro pero cruzando un par de puentes, en el exclusivo barrio Bajo La Viña.
Museo Histórico Provincial
Lavalle 256
T: (0388) 422-1355
De lunes a viernes de 8 a 20, sábados y domingos de 8 a 12 y de 16 a 20
Museo Arqueológico Provincial
Lavalle 434
T: (0388) 422-1315
De lunes a viernes de 8 a 21, sábados de 9 a 13 y de 15 a 19, domingos de 9 a 13
Noroeste Virtual
San Martín 155
T: (0388) 423-7565
turismo@noroestevirtual.com.ar
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