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Retador con pergaminos
El Fiat Palio Adventure es una lograda opción en el competitivo segmento de los modelos diseñados para los usuarios que disfrutan con los viajes y la naturaleza
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LA NACIONGabriel Tomich
En el boxeo, los campeones deben revalidar su título frente a todos los rivales que surgen.
El Fiat Palio Adventure llega cumpliendo este último rol para presentarle batalla nada menos que al Ford EcoSport, un modelo de singular éxito en nuestro país.
Pero los retadores no llegan porque sí a enfrentar al campeón. Deben tener pergaminos legítimos. Es el caso de este Palio Adventure, que en su país de origen, Brasil, compite sin complejos con el producto de Ford que, además, se lanzó cuando este Fiat ya estaba consolidado en el mercado de aquel país.
La denominación Adventure no se restringe sólo a este modelo. Por el contrario, es un concepto de personalización (deportiva y aventurera) que Fiat aplica en otros de sus productos, como la pickup urbana Strada (de próximo lanzamiento en la Argentina) y el monovolumen Dobló, por citar algunos.
Alma aventurera
En lo práctica, el concepto Adventure se traduce en una estética, bien lograda, con un claro denominador común: fenders plásticos, estribos, barras portaequipajes y más músculo para corporizar la idea de vehículo todoterreno listo para la aventura.
Claro está, la base mecánica de la rural Palio Weekend se mantiene intacta, pero el Adventure dispone de un reglaje de suspensiones más robusto y firme, que le otorga un despeje mayor (muy notorio en la parte posterior del modelo) y la de acometer un camino de tierra poceado o algún arenal sin temor de quedarse colgado.
Por supuesto que no es un vehículo off-road, pero la prueba por caminos vecinales de tierra, con profundos huellones y lomos de burro, la pasó con holgura, sin dejar el fondo del vehículo de recuerdo en alguno de los obstáculos.
El comportamiento dinámico en el asfalto rutero tampoco desentona, pero en las curvas no lo favorece demasiado la mayor altura del vehículo (presenta un rolido algo superior que el de un vehículo más bajo) y tampoco el neumático que calza (Pirelli Citynet All Weather 175/80 R14). Este, por sus características de tacos entrecruzados y talón alto, es una clásica cubierta para usar en el invierno europeo, época en que el asfalto se mezcla con algo de nieve y barro. Claro está, el diseño contribuye a la estética off-road del modelo y lo ayuda mucho en los caminos de tierra.
Este reglaje intermedio de las suspensiones, además, se manifiesta apropiado para las calles de la ciudad, en las que proporciona un agradable confort de marcha.
Herencia vigente
La mecánica, como se dijo, no varió. El Palio Adventure mantiene el propulsor de 1.8 litro heredado de la ex sociedad de Fiat con General Motors, que entrega una potencia máxima de 105 CV.
Se trata de un motor con buena elasticidad y niveles de aceleración acordes con la cilindrada y potencia de que dispone. Está bien acompañado por una caja de cambios relacionada para que el propulsor trepe rápido de vueltas al acelerar y no caiga en exceso al ejecutar los cambios.
El consumo, tanto en ciudad como en ruta, está en los rangos esperados de las características del motor, lo que permite alcanzar una importante autonomía en ambos tipos de circulación.
A alto régimen es un tanto ruidoso (debería incrementarse algo más la insonorización del habitáculo), pero tiene un agradable ronquido racing al acelerar con los cambios bajos.
Relación con beneficios
Una de los mejores atributos de este Palio Adventure es la habitabilidad. Como es clásico en las rurales, el espacio es más generoso que en un sedan; pero, además, el Adventure es un tanto más largo de distancia entre ejes y longitud total que la plataforma Weekend básica.
El resultado es un interior cómodo y con un baúl muy amplio (varía desde los 460 hasta los 1540 litros de capacidad).
La posición de manejo es fácil de regular y confortable para trayectos largos (quizá el leitmotiv de este Fiat). Los comandos están bien ubicados y tiene una buena batería lumínica para transitar de noche (incluye faros antiniebla delanteros). Para acompañar el viaje dispone de un completo equipo de audio con reproductor MP3 y un buen sonido.
La insonorización podría ser mejor, porque se filtran ruidos del motor y otros de origen aerodinámico al circular por la ruta.
El equipamiento incluye elementos ya difundidos, como aire acondicionado, ventanillas y espejos eléctricos, y airbag frontales, entre otros. Pero agrega algunos más sofisticados: control de estacionamiento, computadora de a bordo con múltiple información (sistema My Car de Fiat) y apertura centralizada automática de las puertas, en primer plano.
A un precio que se estima entre los 33.000 y 34.000 pesos, con lo que conforma una óptima relación costo-beneficio, este Palio Adventure, lanzado la última semana en Mar del Plata, parece ser un retador con serias aspiraciones a la corona.
Por Gabriel Tomich
