Koenigsegg Jesko Absolut, el dominio del aire para ser veloz
El hypercar sueco promete alta velocidad (alrededor de los 500 km/h) tanto por la potencia mecánica como por su meticulosa aerodinámica
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Según la propia marca sueca, este Jesko Absolut, que se presentó hace dos días (aunque ya lo había mostrado en el virtual Ginebra 2020), es el auto de producción más veloz que ha hecho hasta hoy la firma fundada y dirigida por Christian von Koenigsegg. Es más, aseguran que será el “vehículo de calle” más rápido del mundo.
Más allá de la mecánica, el gran secreto de este hypercar es que hasta el mínimo detalle de la carrocería fue diseñado y construido para reducir la resistencia al avance producida por el aire (drag) y disminuir las turbulencias que se generan en las superficies. El propósito de este trabajo aerodinámico es proporcionar estabilidad a alta velocidad. No en vano, tiene un coeficiente Cx de solo 0, 278 y un área frontal de 1,88 m2. Además, carece de grandes spoilers y las dos aletas posteriores, que reemplazan a un clásico alerón trasero, están inspiradas en el caza de combate F-15.
Estas aletas hacen más “limpio” el flujo de aire sobre el corte trasero de la carrocería, lo que contribuye a estabilizar a este Jesko Absolut a alta velocidad, a la par que también reduce la resistencia aerodinámica de un alerón tradicional. En general, la carrocería completa de este Koenigsegg parece el fuselaje de un avión de combate. A lo que hay que sumarle chasis y carrocería de fibra de carbono, para contar con un peso de solo 1320 kg.
A diferencia de su “hermano pistero”, el Jesko (a secas), el Absolut no solo tiene un estilo más fluido y sinuoso, también ofrece una conducción más amigable y hasta espacio para equipaje (un compartimiento de 100 L adelante y otro de 50 L atrás). Eso sí, cuenta con la misma poderosa mecánica: el Koenigsegg V8 5.0 L biturbo con cigüeñal a 180°, doble árbol de levas a la cabeza (DOHC), lubricación por carter seco y una baja compresión de 8,6:1. Entrega una potencia con nafta normal de 1280 HP a 7800 rpm (1,7 bar de presión de los turbos) y un torque de 1000 Nm entre 2700 y 6170 rpm, mientras que con combustible E85 (85% de etanol y 15% de nafta), la potencia crece a 1600 HP (la presión de los turbos sube a 2,2 bar) y el par a 1500 Nm a 5100 rpm. La transmisión se basa en la caja de velocidades Light Speed Transmission (LST) automática de 9 marchas multidisco (en baño de aceite), comandada por el sistema UPOD (Ultimate Power on Demand), que fue diseñada y fabricada por Koenigsegg.
Si los suecos tienen razón, este Koenigsegg Jesko Absolut supera los 483 km/h de velocidad máxima. Para comprobarlo, habría que desembolsar módicos US$2,8 millones.
LA NACION