Cómo se tuvieron que readaptar los hoteles de la ciudad para recibir nuevamente a los turistas

Durante algún tiempo, y por razones de fuerza mayor, varios hoteles porteños se reconvirtieron. De manos de una administración provisoria pública, fueron el albergue para personas que tenían síntomas leves de coronavirus o que debían permanecer aislados tras ser repatriados. Ahora, y con una curva de contagios que está en claro descenso en la ciudad desde hace dos meses, de a poco la vida citadina recupera su rutina. Los primeros turistas ya empezaron a arribar y la mayoría de los hoteles que se habían transformado volvieron a su origen, para lo cual debieron readaptarse y cumplir con el debido protocolo.

Al menos por ahora, los desayunos solo se sirven en las habitaciones. En tanto, los pasajeros, salvo aquellos que estén impedidos por algún motivo, deben trasladar sus maletas a sus dormitorios por cuenta propia; lo mismo con el vehículo dentro del estacionamiento, ya que momentáneamente está suspendido el servicio de valet parking.

"Es importante que ante el arribo de cada visitante se cumpla con la limpieza de tres pasos: los turistas deben pararse sobre la bandeja desinfectante colocada en la entrada, luego se coloca alcohol en gel en sus manos y finalmente se le toma la temperatura", explicó a LA NACIÓN, Juan Manuel Cabanillas, gerente general operativo de la cadena Ker Hoteles que, además, contrató el servicio de una empresa para certificar la desinfección a nivel internacional.

Cabanillas indicó que se instalaron mamparas en la recepción, un tótem de higiene en el ingreso y se colocó cartelería dentro de cada hotel en el que se indican las medidas de seguridad e higiene. La comida y utensilios llegarán a manos de cada visitante cerrados al vacío. "Cada establecimiento tiene destinadas entre tres y cuatro habitaciones de un mismo piso en caso de que un empleado reporte síntomas de coronavirus durante su jornada laboral. De esa manera, quedará aislado hasta tanto la obra social indique el procedimiento a seguir", especificó el empresario.

Hoteles reabiertos para turistas

Desde mediados de agosto, los hospedajes de la ciudad estaban limitados a recibir personas que llegaban por un motivo de fuerza mayor, como cuestiones médicas o laborales. Pero, desde el viernes, los hoteles en la ciudad pueden volver a recibir turistas de forma segura. Los primeros visitantes autorizados, que pueden ser argentinos o extranjeros, viven en países limítrofes.

Como parte del Plan Integral y Gradual que puso en marcha la Ciudad para flexibilizar el aislamiento social, preventivo y obligatorio se puso énfasis en la reactivación del turismo. Para ello, se aprobó el protocolo de apertura de los hoteles porteños para fines turísticos.

"Es una gran alegría que después de varios meses los hoteles de la ciudad puedan volver a recibir turistas. En esta nueva etapa, nos proponemos una apertura gradual del turismo que garantice la seguridad de los visitantes y de los residentes", afirmó el presidente del Ente de Turismo del gobierno porteño, Gonzalo Robredo. La semana pasada, la Ciudad obtuvo el sello de destino seguro del Consejo Mundial del Viaje y el Turismo, que garantiza que cumple con todos los protocolos sanitarios y de seguridad para recibir visitantes.

"Es importante agradecer el esfuerzo y la ayuda que nos dio el sector con nuestra estrategia de aislamiento en hoteles. Este protocolo es parte de un trabajo conjunto que contempla un plan integral de reactivación. Eso nos permite empezar a poner en marcha de manera gradual y segura la llegada de turistas con mucha prudencia y cuidado, sin dejar de lado todo el esfuerzo que hicimos", aseguró Fernando Straface, secretario general y de Relaciones Internacionales de la Ciudad.

Según pudo saber LA NACIÓN, de los 50 hoteles que se habían contratado para pacientes leves de Covid-19 como parte de una red extrahospitalaria, solo 14 continúan con esa actividad.

Cómo es el protocolo para la apertura de hoteles con fines turísticos:

• No está permitido el uso de amenities.
• Los pasajeros deben acarrear su equipaje y estacionar su vehículo, excepto que estén imposibilitados de hacerlo.
• En todos los casos en los que no sea posible mantener la distancia interpersonal mínima, se debe haber barreras transparentes.
• Los ascensores pueden ser utilizados de manera individual u ocupado hasta un 30% de su superficie.
• Los desayunos se sirven en la habitación o bajo la modalidad take away.
• Se recomienda el uso de medios de pago digitales.
• Tanto los turistas como los trabajadores deben utilizar tapabocas.
• Se deben realizar todos los trámites posibles de manera virtual (inscripciones, check in / out).
• Efectuar llamados telefónicos de control de síntomas relacionados con COVID-19 de manera previa al ingreso o participación de actividades turísticas.