Encuentran las bolas de golf que un astronauta jugó en la Luna hace a 50 años
En 1961, Alan Shepard fue el primer estadounidense en viajar al espacio, pero una enfermedad en el oído hizo que su carrera espacial se detuviese 10 años. Recién en 1971 integró la misión Apolo 14 y se convirtió en el quinto hombre en pisar la Luna. Y el primero en jugar golf sobre el satélite terrestre.
El 6 de febrero de 1971 Alan B. Shepard no solo caminó sobre la superficie de la Luna, sino que se dio el gusto de probar un tiros de golf. Con el visto bueno de las autoridades de la NASA, el astronauta sacó del bolsillo dos pelotas y las golpeó con una herramienta de excavación.
Consultado sobre su tiro, Shepard sostuvo que la superficie lunar era como un gran búnker de arena (obstáculo propio de los canchas de golf que frena la bola). Pese a las dificultades del terreno, el golfista espacial alardeaba que sus bolas habían avanzado “kilómetros y kilómetros”.
Hoy, 50 años más tarde, los avances tecnológicos parecen demostrar que su tiro no fue tan largo. Si bien la expresión de Shepard era una exageración, ya que ni los profesionales de golf suelen alcanzar las 450 yardas aéreas, durante años se estimó que su golpe podría haber sido de 200 yardas (182 metros). Esta estimación se realizó tomando en cuenta las restricciones del movimiento que tenía el astronauta-golfista con su propio traje.
Pero lamentablemente, hace unos días -con motivo del 50 aniversario de la misión- se dieron a conocer imágenes recientemente restauradas, que demuestran que su swing no fue tan bueno como se creía.
Andy Saunders, especialista británico en imágenes, hizo su aporte preciso para traer luz a aquel hito deportivo en medio de la misión lunar. Mientras trabaja en el libro Apollo Remastered, el experto localizó ambas bolas en la superficie de la Luna.
At the end of Apollo 14's 2nd moonwalk, Shepard used the head of a 6-iron attached to the handle of a sample-collection tool to hit 2 golf balls.
— NASA History Office (@NASAhistory) February 5, 2021
Imaging specialist @AndySaunders_1 has used mission photos to find the location and distance traveled by each ball! (See below) pic.twitter.com/Ry4rLRhtz7
Mediante distintas técnicas de mejora digital y el apilamiento de secuencias de video, Saunders reveló la distancia exacta de cada una de las bolas respecto del sitio de alunizaje. Mientras que la primera cayó a una distancia de 24 yardas (22 metros), la segunda pelota lo hizo a 40 yardas (36 metros).