El nuevo desafío de Jennifer Dahlgren: de sufrir bullying a entrevistar presidentes

La chica que sufría por el bullying se tutea ahora con presidentes. Si Jennifer Dahlgren se resignó a soportar durante muchos años que le dijeran "machona" por jugar al fútbol o "ropero" por la voluminosa anatomía propia de una campeona de lanzamiento de martillo, el tiempo y el deporte terminaron enseñándole que no tenía por qué tolerar que se burlaran de ella. Y tanto aprendió, tanta confianza ganó en estos años, que este viernes será la encargada de que el presidente Mauricio Macri y Thomas Bach , el alemán que dirige el COI, conviertan en atractivo el inicio del foro Olimpismo en Acción, que se celebrará hasta el sábado en el Centro de Exposiciones de Buenos Aires. Tendrá el desafío de que, a partir de sus preguntas, los presidentes cuenten algo interesante.

"¡La verdad que no sé cómo llegué a esto!", dice con modestia excesiva la deportista durante una entrevista con LA NACION. La verdad, siguiendo a Dahlgren, es que ella sabe bien por qué mañana tendrá mano a mano a Macri y a Bach para moderar un evento ante unas 1600 personas de todo el planeta. Llegó a eso dando tres pasos. El primero, apostando por el deporte para sacudirse los demonios que la consumían ante las agresiones que recibía. El segundo, dándose cuenta de que, además de lanzadora de martillo, era una persona que podía contar historias universales. Que podía escribir. Y el tercero, al decidirse a hablar, hablar y hablar en público. Primero en colegios, luego en una charla Ted en Mar del Plata, el año pasado como "agente del cambio" en un evento organizado por "The Economist", y el viernes, ante la máxima autoridad del deporte y el hombre a cargo de los destinos de su país.

Dahlgren, de 32 años, se enteró hace solo un mes de que la querían junto a Macri y Bach. "Me sorprendió, pero dije enseguida que sí, ¡es una oportunidad increíble!".

El COI (Comité Olímpico Internacional) puso su vista en Dahlgren este año, durante una de las muchas visitas preparatorias para los Juegos de la juventud que se inauguran el sábado. La organización, con Leandro Larrosa al frente, le había regalado a los visitantes del COI varios ejemplares de "El martillo volador y otros cuentos", el primer libro de la lanzadora, que se publicará antes de fin de año "El capitán del banco".

"Nos gusta tu perfil, cómo trabajás con el deporte y la educación, tu libro y tu nivel de inglés", le dijo el COI cuando la convocó.

Toda una paradoja: Dahlgren, que se fue a vivir con su familia a Estados Unidos cuando tenía dos años y volvió a los 13, sufrió precisamente por el hecho de hablar inglés. "Hablaba un castellano muy raro, me había olvidado casi todo". Ahora, vueltas de la vida, ese inglés impecable que perfeccionó en la Universidad de Georgia le sirve de pasaporte para moderar un foro de carácter internacional.

"Hace cinco años ni loca hubiera pensado que haría algo así, plantarme en un escenario ante una multitud y con dos presidentes... ¡No, jamás! Siempre fui una piba bastante insegura con su cuerpo, con su potencial, etcétera. Fui ganando valentía y coraje. Y aunque esto del viernes esté fuera de mi zona de confort, son cosas a las que me voy animando".

Bach se juntó con ella esta semana para preparar el panel de mañana. "Vamos a hablar de cómo ve el olimpismo hoy, cuál es su relevancia en el mundo. Y a Macri le preguntaré como aplicar esos mismos valores a nivel nacional".

Tres veces campeona sudamericana y cuatro veces deportista olímpica, Dahlgren se sigue entrenando y tiene la vista puesta en Tokio 2020, pero lo de exponerse en público –y no precisamente en el deporte- le gusta cada vez más. "Una cosa es competir y otra hablar. Dos años atrás, en la charla Ted en Mar del Plata, descubrí que hablar me ayuda a procesar cosas de mi persona, a hacer catarsis. Y fue increíble ver como los demás se conectan con lo que uno cuenta".

¿Influye esa liberación en público en su rendimiento deportivo? Dahlgren cree que sí. "Este año fui campeona iberoamericana, estoy 23 del mundo y gané ese torneo en el intento final con una marca de 70,98 centímetros, mi mejor tiro en seis años". Dahlgren sufrió mucho por la sucesión de lanzamientos nulos en los Juegos Olímpicos. "A partir de Londres 2012 se me hizo un karma. Intentaba no hacer nulos… y los hacía. Me afectaban mucho las críticas de la gente, el qué dirán. Ahora se vienen mis últimos Juegos, y quiero que sean los mejores. Contar mi historia me devolvió mi poder". Que se preparen Macri y Bach.

No se piensa por ahora en una candidatura olímpica

El presidente del Comité Olímpico Argentino, Gerardo Werthein, descarta por el momento una eventual candidatura del país para unos Juegos Olímpicos absolutos. "Por el momento, no veo ni está en los planes presentarse a unos Juegos Olímpicos absolutos", remarcó Werthein sobre una eventual candidatura argentina para organizar los Juegos de 2032. El dirigente aseguró que igualmente falta mucho tiempo para definir una posible candidatura, ya que los Juegos de 2024 ya están asignados en París y los de 2028 se harán en Los Ángeles.

"La próxima elección para los Juegos de 2032 será en 2025, por lo que faltan siete años para eso. Falta mucho tiempo para que sea el momento. Tenemos tiempo para pensar", resaltó Werthein. "Para encarar un proyecto de esa envergadura, además de estar preparados técnicamente, hay que estar suficientemente sólidos en el aspecto económico. Hay que trabajar mucho y esperar que se den las condiciones", expresó el jefe del olimpismo argentino. "Tiene que existir, y de hecho está pasando, una reestructuración de cómo se deben organizar unos Juegos Olímpicos, para que los costos puedan bajar y puedan ser más accesibles para el resto del mundo".