Angelici sacó del juego a Arruabarrena y ya trabaja en su deseo: Barros Schelotto

Era una cuestión de tiempo. El ciclo de Rodolfo Arruabarrena se terminó. Una comunicación del presidente, Daniel Angelici, resultó suficiente para determinar la salida. El entrenador no estaba demasiado convencido de dejar su puesto, sentía que le quedaban fuerzas para torcer el rumbo. Lo concreto es que desde la conducción del club no había más crédito para ofrecerle. Y no había más tiempo, porque Racing vuelve asomar en el horizonte, ahora por la Copa Libertadores, y River acecha por el torneo local.

Esa es la superficie, pero la cuestión siempre fue mucho más profunda. Porque para comprender todo hay que recordar que el Vasco llegó a ser DT de Boca porque no había más alternativas y él respondió con dos títulos (torneo local y Copa Argentina) Y que se quedó por el influjo de esas conquistas, aunque lo real es que nunca fue el entrenador que le quitaba el sueño a Angelici y tampoco es el entrenador que cautiva a Carlos Tevez. Ése no es un detalle menor.

La situación estaba resuelta antes de perder con la Academia anoche. El proceso estalló cuando Boca cayó con San Lorenzo por 4-0, por la Copa Argentina. En ese momento el presidente de Boca entendió que no había más tiempo. Y si bien muchos aseguraban que Angelici no pensaba en cortar la gestión de Arruabarrena y que quienes no querían más al técnico eran sus pares de comisión directiva, lo real es que el mandamás xeneize demoró esta situación porque no tenía técnicos de su gusto disponibles. Es real que entonces Angelici vio al DT con energías para continuar y por eso determinó que era saludable dejarlo. Ahora también fue el propio presidente de Boca el que tomó la determinación de terminar esta novela que tenía un final anunciado.

El entrenador tenía deseos de continuar, aunque ya no hubo negociación posible. A las 8 de la mañana de hoy se comunicaron y Angelici le pidió al DT reunirse cara a cara, pero eso jamás sucedió. Por la tarde, el encuentro fue entre el Vasco y su representante, Eduardo Gamarnik, quien le llevó a Arruabarrena la noticia de que se le había rescindido el contrato. Lo habían echado, en palabras más ajustadas a la realidad. El desenlace de esta historia parece que ha dejado algunas heridas, porque Arruabarrena mañana daría una conferencia de prensa, pero pretende evitar hacerlo junto al presidente.

La situación estaba resuelta antes de perder con la Academia anoche. El proceso estalló cuando Boca cayó con San Lorenzo por 4-0, por la Copa Argentina

No hay demasiado tiempo para planificar, porque tanto la Academia como River están demasiado cerca. Y hay un nombre que parece estar en primera fila: Guillermo Barros Schelotto. El deseo del mandamás xeneizes desde que desembarcó como presidente allá por diciembre de 2011 fue tener a los Mellizos en el banco de los suplentes. Aunque será bueno saber cómo reaccionará Guillermo ante esta salida del Vasco, con quien tiene una excelente relación. Al menos, el guiño de Tevez para la llegada de los Mellizos ya fue comunicado.

Y hay un nombre que parece estar en primera fila: Guillermo Barros Schelotto

Para la máxima figura del club, en realidad, solo hay un nombre que cambia la ecuación: Marcelo Bielsa. Y allí es que comienza a tallar en esta historia un discípulo del Loco: Jorge Sampaoli. En los últimos días estuvo en la Ribera recorriendo las instalaciones del club y algunas versiones aseguran que algunos dirigentes lo habrían sondeado para conocer si ve como posible una experiencia en Boca. Sin embargo, las declaraciones de Sampaoli sobre su deseo de dirigir a River le quitan cotización dentro del universo xeneize.

No hay demasiado tiempo y los xeneizes necesitan un entrenador. Si bien algunos aseguran que Rolando Schiavi podría ser el DT interno ante Racing, otra fuente cercana al presidente de Boca entiende que quizá mañana por la tarde ya pueda anunciarse a Guillermo Barros Scholotto como nuevo entrenador de Boca.

Angelici podrá, finalmente, tomar su primera determinación genuina como presidente del club.

dm/ae