El video en el que Tata Brown recuerda su proeza en México '86: el gol a Alemania en la final y jugar con el brazo roto

Son horas difíciles para José Luis "Tata" Brown. A los 62 años, el exjugador de la selección argentina y campeón del mundo en México 1986 se encuentra internado en el Instituto Médico Argentino de Rehabilitación (IMAR) de La Plata debido a los trastornos de movilidad que le produjo una enfermedad neurodegenerativa, según informaron hoy en el primer parte médico oficial sobre su salud.

Con el mundo del fútbol argentino conmocionado e inundando las redes sociales de mensajes para enviarle fuerzas y desearle una pronta recuperación, se viralizó un video en el que Tata Brown cuenta en primera persona su proeza en el último Mundial que conquistó la Argentina: en la final ante Alemania en México '86 marcó el primer gol para la victoria 3-2 y además debió jugar lesionado la mayor parte del partido por una luxación en su hombro derecho.

"Antes del Mundial me rompí los meniscos y el ligamento cruzado. Se me inflamaba la rodilla, se me juntaba líquido, me sacaban líquido con sangre... en esas condiciones llegué. Pero hubo un problema de salud con Passarella y me encontré con que desde el primer partido tenía que jugar de titular. Era una posibilidad que la había soñado de por vida, imaginate", cuenta Brown en el video de ESPN, y luego relata su gol.

"A mí se me metió Diego adelante, y Burru que le pega bien fuerte con comba. Cuando empiezo a tomar carrera, lo miro a Schumacher y digo: 'no llega'. Yo voy corriendo, lo empujo a Diego, lo tiro, y le meto el frentazo. Ahí ya no miraba más la pelota, salí a festejar el gol", recuerda el exfutbolista de Estudiantes, Racing y Boca. Luego, mientras suceden las imágenes de aquel glorioso 29 de junio en el Estadio Azteca, el Tata cuenta por qué eligió seguir jugando pese a sufrir la luxación de su hombro derecho.

"Este viene (un jugador alemán), me choca y me pega acá en la articulación (señala su hombro derecho). Tenía toda esta zona, los bíceps, la articulación... un dolor insoportable. Entonces, yo lo miro al doctor y le digo: 'doctor, ni se le ocurra sacarme'. Me mordí la camiseta, puse el dedo adentro y seguí jugando", señala Brown, y cierra: "Pasé por un millón de cosas difíciles... ¿y qué? ¿Iba a dejar de jugar una final del mundo por un golpe en el hombro? ¡Ni loco! Vos no te das una idea del orgullo que yo siento de haber hecho un gol en la final del mundo para mi país".

Ayer, Diego Maradona recordó aquel momento en su cuenta de Instagram y le mandó un mensaje de apoyo a su excompañero: "Sin José Luis Brown no hubiéramos ganado nunca la Copa del Mundo México 86".