Paulo Díaz en River: cómo vivió su debut el jugador que tanto pidió Marcelo Gallardo
Botines azules y blancos. Camiseta afuera del pantalón. Muñequera blanca en su brazo derecho. Medias que pasaron de altas a bajas con el correr del juego. Y un nivel futbolístico que fue de mayor a menor. En el día de su cumpleaños número 25, Paulo Díaz transitó sus primeros 90 minutos de juego en River dentro de un contexto negativo que no le permitió mostrar un nivel auspicioso, más allá de que demostró dos de las características que el técnico Marcelo Gallardo observó en él: fuerte personalidad y gran juego aéreo.
La derrota 1-0 sobre Talleres en el Monumental no solo fue la primera derrota del Millonario en el semestre, sino que también fue el partido de peores rendimientos de este tramo, tanto colectivos como individuales. Apático, impreciso, poco lúcido y sin la dinámica habitual, el equipo del Muñeco fue superado por su rival y mostró falencias en la creación de juego y en la marca en campo propio que no venían sucediendo. Así, los primeros flashes positivos que mostró Díaz se fueron desluciendo con el correr del juego.
Según las estadísticas de Opta, los números demuestran que fue el jugador más sólido de una línea defensiva con un desconocido Javier Pinola (se fue expulsado en un muy mal partido) y dos flojas actuaciones de los laterales Elías López y Fabricio Angileri. Así, el central chileno fue el jugador con más toques de pelota (94), más pases (66, con 71,2% de efectividad), más disputas de balón totales (19), más duelos ganados (78,9%) y más duelos aéreos totales (10, con el 90% ganados). También fue lider en entradas (4), despejes (4) e intercepciones (4), además de tener nueve recuperaciones, dos remates bloqueados y 20 pérdidas de pelota.
#TNTSports | Paulo Díaz debutó con la camiseta de River: "Tenemos que dar vuelta la página y mejorar."#River [R] #Tallerespic.twitter.com/bLcDdPCHLi&— TNT Sports LA (@TNTSportsLA) August 25, 2019
Pero, al mismo tiempo, tuvo deficiencias en la marca mano a mano, se lo vio más lento de lo habitual, sufrió por momentos el retroceso y le costó durante todo el partido poder frenar el desequilibrio de un desfachatado Nahuel Bustos, autor del gol. Posiblemente, con el correr de los partidos irá mejorando su ritmo físico y futbolístico, ya que su último partido oficial había sido el 6 de julio pasado en la derrota 2-1 de Chile con la Argentina en el duelo por el tercer puesto de la Copa América Brasil 2019.
"Cuando venís sin ritmo de partidos es muy difícil. Y él viene sin competencia. Después de la Copa América estuvo parado, volvió a entrenar y no tuvo competencia. Pero mostró buenas cosas, como personalidad y templanza para disputar la pelota. Si bien le falta, es un buen refuerzo que nosotros hemos traído", reflexionó Gallardo en conferencia.
Siendo primer marcador central de una defensa alternativa, Díaz tuvo la ocasión de gol más clara de River a los 21 minutos de juego. En un tiro libre de Cristian Ferreira, conectó un gran cabezazo de palomita que despejó de buena manera el arquero Guido Herrera. Por otro lado, en el complemento, vio la amarilla a los 10 minutos por una dura e innecesaria entrada desde atrás a Bustos y luego, siete minutos más tarde, quedó en la foto del gol de Talleres: chocó a Franco Armani al intentar frenar la carrera del propio Bustos, quien ya había dejado a Pinola en el camino a pura velocidad.
Paulo Díaz es el séptimo chileno en jugar en River, después de Ascanio Cortéz (1939-1940), Eladio Rojas (1962-1965), Marcelo Salas (1996-1998 y 2003-2005), Alejandro Escalona (2001-2002), Cristian Álvarez (2005-2007) y Alexis Sánchez (2007-2008).
"A nivel equipo no estuvimos finos, se notó en el pasar del partido. Hay que seguir mejorando y dar vuelta la página. Yo me sentí bien, pero cuando un equipo no juega partidos constantemente se nota un poco. No debería pasar, porque entrenamos todos juntos, pero el partido te da otro roce y se notó. Faltó movilidad de todos, tuvimos muy poca para crear espacios y generar situaciones de gol", comentó el chileno nacido en Santa Cruz, ciudad de la Provincia de Colchagua, en diálogo con Fox Sports. "Debutar acá con la camiseta de River es algo que de chico uno sueña. Y se me dio. Fue un traspaso difícil y estamos acá", agregó en TNT Sports.
Vaya si fue difícil la negociación. Todo comenzó en enero, con el primer intento fallido de traerlo a préstamo desde Al-Ahli de Arabia Saudita, y se reflotó entre junio y julio, con casi dos meses de negociaciones y varias ofertas rechazadas hasta poder concretar el único pedido que realizó DT para el semestre, a sabiendas de las dificultades de la situación económica. Así, ante la fuerte presión del futbolista (no regresó nunca a Arabia Saudita tras la Copa América y se quedó entrenando en Chile) el club terminó acordando 3,75 millones de dólares por el 70% de su pase y el ex jugador de San Lorenzo firmó el 1° de agosto su contrato por tres temporadas y una cláusula de rescisión de 20 millones.
Para esa fecha, River ya había jugado sus cuatro primeros partidos del semestre y hasta había logrado la clasificación a cuartos de final de la Copa Libertadores ante Cruzeiro. Por eso, Gallardo decidió que el defensor se ocupe de trabajar trabajos físicos de acondicionamiento durante sus primeras dos semanas para ir insertándose de a poco en la exigente dinámica laboral de River. Así, el jueves pasado fue al banco ante Cerro Porteño y hoy, en un irregular debut con la camiseta millonaria, solo pudo mostrar destellos del nivel que puede ofrecer.