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Gustavo Costas y Humberto Maschio ya no son los directores técnicos de Racing. La presión de las circunstancias hizo innecesario esperar más. A las 18.35 de ayer, en la sala de presidencia del club, en la sede de Avellaneda, la decaída voz del propio Costas anunciaba una decisión que había germinado desde el momento en que se consumó la dura derrota ante Lanús, anteayer: "Hemos decidido con el Bocha (Maschio) dar un paso al costado, por la situación que está pasando Racing. Pensamos que es lo mejor para todos y le deseamos al que venga que saque al equipo adelante. Les agradecemos a todos". Sólo eso. El rostro desencajado y triste del ahora ex entrenador de la Academia denotaba el deseo de irse rápidamente de allí.
Se cerró así un ciclo que conoció más tragos amargos que alegrías, enmarcado en la situación institucional más crítica que conoce la entidad y que comenzó el 16 de diciembre de 1998 con la designación de la pareja técnica por parte del juez de la quiebra, Enrique Gorostegui.
En esa misma mesa en la que Costas, Maschio y el secretario técnico Agustín Cejas daban a conocer la novedad había finalizado poco antes la reunión decisiva, que duró unos 75 minutos, en esa oficina del segundo piso de la sede de la avenida Mitre al 800, y de la que también participó la síndico Liliana Ripoll.
Durante la tarde ya se sumaban datos sugestivos. Pese a que la síndico dijo que el encuentro ya estaba previsto desde la semana última, todo indicaba que se iba a definir la situación de los entrenadores. Con rostro sombrío, Costas fue el último en llegar, a las 16.15.
Desgastada por los malos resultados, por la pobre respuesta anímica del equipo en los últimos partidos y por la falta de consenso entre quienes dirigen los destinos del club, era difícil que la pareja técnica pudiera sostenerse.
Ni el juez ni la sindicatura, no obstante, iban a pedirle la renuncia a Costas. "Fue una decisión absolutamente mía. Llamé esta tarde (por ayer) a Ripoll y se lo comuniqué. Aquí mandan los resultados", dijo el DT, mientras salía raudamente del club. Más allá de un agradecimiento y el elogio a las cualidades personales de los técnicos salientes, la síndico evitó consideraciones. Ni Costas ni Maschio tenían contrato con la entidad. La situación de quiebra imponía esa condición. No obstante, la sindicatura accedió al pedido de Costas para que Maschio permanezca en otra función en el departamento de fútbol.
Ahora, lejos de aclararse todo, persisten los interrogantes. Sí está claro que Fernando Quiroz, que se había sumado recientemente al cuerpo técnico -ad honórem-, tampoco seguirá, al igual que Miguel Wirzt.
"Gustavo lo hizo pensando en Racing. No encontró respuestas desde lo futbolístico ni desde lo anímico. Me parece correcto lo que hizo. En el club hay un problema de fondo, que es económico, pero futbolísticamente las cosas se podrían hacer de otra manera; falta conocimiento y voluntad", opinó Teté. Pero habrá que ver quién se hace cargo del plantel y qué sucede con el resto del cuerpo técnico.
Después de que habló Costas, lo hizo Cejas. "Ellos (por los técnicos) entendieron que era el momento. Es una actitud muy digna. Estos son tiempos muy difíciles, estamos todos bastante nerviosos", dijo. El secretario técnico es el eje de lo que puede ocurrir de aquí en más.
Costas anunció que no irá a la práctica de hoy, por la mañana, en el estadio. Sí lo hará Quiroz, que se despedirá y les comunicará a los jugadores la decisión. Cejas, ahora la única autoridad deportiva visible para el plantel, se presentará acompañado por Alberto Jorge, director técnico de la reserva y coordinador del fútbol amateur, que se hará cargo interinamente del equipo.
Sin embargo, lo que parece sencillo puede ser una fuente de nuevos conflictos. La decisión de Costas no abarcó a quienes lo acompañaban en el cuerpo técnico (el preparador físico Carlos Dibos, el médico Carlos Ayos, el kinesiólogo Luis García y el masajista Mario Soza).
Es una incógnita si Cejas buscará renovar completamente el staff con gente cercana a él, lo cual podría generar más rispideces. El propio Jorge es un profesional cercano a Cejas, y es sabido que la relación de los futbolistas con el secretario técnico no es la mejor.
Más allá de cómo se resolverá el futuro inmediato es toda una aventura. Como es habitual en estos casos, ya comenzaron a sonar nombres: uno es el de Roberto Perfumo, candidato que siempre fue de la simpatía de Cejas. Otro, el de Osvaldo Sosa, que recientemente se alejó de la conducción de Argentinos Juniors. El tiempo y las insondables razones de Racing lo dirán.
Con la salida de Gustavo Costas y Humberto Maschio de la conducción técnica de Racing, el club de Avellaneda sufrió 71 cambios de entrenadores desde que conquistó el último torneo local, en 1966. Desde aquella coronación hasta estos días, Juan José Pezzuti fue el entrenador que más tiempo se mantuvo en el puesto, ya que permaneció durante cuatro años y cuatro meses.
Varios directores técnicos intentaron suerte en más de una oportunidad. Entre ellos sobresale Alfio Basile, que dirigió al equipo en cuatro ocasiones.


