

Encontrá resultados de fútbol en vivo, los próximos partidos, las tablas de posiciones, y todas las estadísticas de los principales torneos del mundo.
Estambul, Tokio y Madrid. No se deben decir en otro orden para no favorecer a ninguna las ciudades candidatas, según el sorteo que hizo el Comité Olímpico Internacional (COI). Madrid se presentará por tercera vez consecutiva (perdió las últimas dos, ante Londres y Río de Janeiro) y España ya organizó los Juegos de Barcelona 92. Japón también tiene amplia experiencia (un Juego de verano, Tokio 64, y dos de invierno, Sapporo 72 y Nagano 98). Para Estambul, estos podrían ser los primeros Juegos de su historia. Mañana, en la 125° sesión que se lleva a cabo en Buenos Aires, se conocerá el ganador de los Juegos 2020.

En diálogo con canchallena.com , Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español (COE), evitó hablar de las otras candidatas, y destacó que Madrid "tiene el 80% de la infraestructura construida". Por disposición COI, no puede hablar de sus rivales. Sin embargo, otra frase de Blanco se puede leer entrelíneas: "Nosotros no hablamos de sueños, sino de realidades. No hablamos de maquetas. No tiramos el dinero, ni hacemos castillos en el aire". La inversión de los madrileños será de 1900 de dólares. Contrasta con Estambul, que estima unos 20.000 millones y debe construir gran parte de su infraestructura.
Sin embargo, de algo que puede ser una desventaja, el CEO de la candidatura de Estambul, Hasan Arat, subraya el "legado" y el empuje económico que le pueda dar un JJOO a una nación que apuesta entrar al top 10 de las economías del mundo: "Desde 2005, la economía turca es la que crece más rápido en Europa (5,7% anual). Es la tercera economía en crecimiento del mundo. Desde la crisis de 2008, más de 4.000.000 de personas tuvieron nuevos trabajos, y es la primera en empleo del continente europeo", sostiene. Además, Arat entiende que ya hubo otros juegos en España y Japón, que dejaron una importante herencia, y que es hora de que sea el turno de Turquía: "Nosotros somos un país nuevo. Hay 40.000.000 de jóvenes menores de 25 años. La integración de ellos con el deporte tendrá un efecto muy positivo en sus vidas. Creemos que los JJOO tienen que tener nuevas construcciones, con nuevas arquitecturas. Al finalizar los JJOO dejaremos nuevos espacios verdes a nuestro pueblo", añadió.

Tsunekazu Takeda, máximo responsable de la candidatura de Tokio, explicó, en conferencia de prensa, por qué su ciudad sería la más acertada elección: "Con la garantía de la organización y los fondos, nuestro foco estará en esos 'extras' que ayudan a promover el olimpismo alrededor del mundo", expresó. Tokio se considera la candidatura "más segura" en lo económico, y destaca que Japón es la tercera potencia mundial, con una tasa de desempleo baja (3,7%).
En cuanto a los puntos más débiles, España vive una crisis que afecta fuertemente a la población. Su tasa de desempleo es del 25%. Y del 19% en Madrid. El porcentaje es particularmente alto entre los más jóvenes. Blanco argumenta que "el 90% de los menores de 35 años" apoya el proyecto, y sostiene que un Juego Olímpico sería una importante tracción para la economía local. "El retorno será superior a la inversión. Son más puestos de trabajo", aseguró el presidente del COE.
Por su parte, Arat dijo que la crisis de Siria y una posible intervención militar de Estados Unidos, no afecta la candidatura de Estambul: "Quiero que el pueblo de Siria esté en paz. Está muy lejos de Estambul, a 1300 kilómetros. Tan lejos como lo está Italia. Lo que quiero con todo mi corazón es que los equipos de Siria estén en Estambul 2020", expresó.

El talón de Aquiles de Tokio es Fukuyima, la ciudad donde, tras el tsunami de 2011, hubo una fuga radioactiva. Está a 250 kilómetros de la capital nipona. "No estamos preocupados por Fukuyima. El nivel de radiación de Tokio es el mismo que el de Londres, Nueva York y París", insiste Takeda, presidente del Comité Organizador de Tokio 2020.
A las 17.30 de mañana, cuando Jacques Rogge abra el sobre en el segundo piso del hotel Hilton, ya no serán necesarias las defensas de los proyectos y las palabras estarán de más. Excepto las de festejo.



