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MAR DEL PLATA.- A los 36 años, Carlos Fernando Navarro Montoya habla sin tabúes. Mantiene la misma cabellera que en sus comienzos, aunque las entradas van ganando espacio. Se siente fortalecido después del muy buen torneo que hizo desde el arco de Chacarita, pero va por más y hasta sorprende con varias definiciones en un mano a mano con LA NACION.
–¿Atajás distinto que cuando debutaste en la primera de Boca, en 1988?
–No, la esencia de cómo yo me siento, pienso y juego el fútbol es la misma. Un arquero debe estar preparado para que, más allá de su línea futbolística, se adapte a cualquier circunstancia.
–¿Son mayores ahora las obligaciones de los arqueros?
–Cambiaron las reglas y gracias a eso nos perfeccionamos; ahora hay que saber jugar con los pies y eso nos ayudó a ser mejores. También hay quienes se preocupan más por patear penales y tiros libres que atajar. Esto sirve mientras no se haga para transformarse en un arquero de moda o para tener un protagonismo más importante. Es válido cuando el arquero le entrega un plus al equipo y él es superior al resto de los ejecutores que hay en el plantel.
–¿Hay de los otros?
–Sí, muchas veces los arqueros se confunden y en lugar de practicar atajadas patean tiros libres y penales en los entrenamientos.
–¿En algún momento te sentiste disminuido porque la prensa elogió más a arqueros como Chilavert, que utilizaban esos recursos?
–No, para nada. Yo digo que un arquero, como los jugadores, se debe medir por su trayectoria. Una cosa es un arquero que tiene cuatro o cinco años buenos o tiene la suerte de coincidir con un muy buen proceso. Y otra cosa es un arquero como yo que lleva 20 años en los primeros planos y siendo considerado como uno de los mejores del mundo.
–¿Cuál es tu desafío?
–Mantener esa vigencia. El 8 de abril de 2004 cumpliré 20 años en primera y siempre se nombró a Navarro Montoya entre los mejores arqueros.
–¿Cómo estás en el ranking?
–Estoy entre los cuatro mejores arqueros de la historia del fútbol argentino. Viene Amadeo Carrizo, el Loco Gatti, el Pato Fillol y después vengo yo.
–¿Y Chilavert?
–Ya dije: Amadeo, Gatti, Fillol y yo...
– ¿Con qué arqueros argentinos de hoy te sentís identificado?
–Con Leo Franco y Olave.
– ¿Y Saja?
–También me gusta, pero creo que en los últimos tiempos se está confundiendo. Está más preocupado por patear tiros libres que por ser el arquero que fue en sus comienzos. Un arquero técnico, un arquero que anticipaba, que era muy atento y jugaba rápido para achicar... Ahora lo veo cometiendo errores técnicos muy graves. Saja tiene condiciones y lo pongo junto con Franco y Olave, pero ojalá que sepa corregir a tiempo el camino.
–¿Lo hablaste con él?
–No, no soy quién... Saja tiene condiciones, sucede que ahora está en un proceso de maduración. Es importante que no se confunda y no lo hagan confundir.
–¿Lo ves a Saja en la Copa 2006?
–Lo veo como a Franco, a Olave, que son los que me gustan. Pero también digo que Cavallero, Burgos, Islas, Comizzo y Passet tienen nivel de selección.
–Hay varios arqueros que superan los 30 años y siguen vigentes...
–Está Vivaldo, Comizzo, Passet, Islas. La edad no es un impedimento. El documento es un papel nada más.
–¿Te reprochás algo en estos casi 20 años de carrera?
–Reprocharse cuando ya sucedieron las cosas es muy fácil. Lo que sí tengo claro es que siempre fui honesto y transparente. Ni siquiera cuando me equivoqué actué de mala fe. Mi mayor alegría es el reconocimiento de la gente, algo difícil de conseguir tras atajar tanto tiempo en un club tan grande como Boca.
–¿Cómo se reemplaza a los jugadores que fueron ídolos en los clubes?
–Los jugadores son únicos. No estoy de acuerdo con los que piensan que si se va uno, llega otro y lo suplanta.
–Comizzo dijo que ya está pensando en el retiro, ¿y vos?
–Si él lo dijo es porque ya lo siente, pero él es un grande que está haciendo historia en River. Si él lo decide así, felicitaciones. Yo por ahora disfruto, no pienso en el retiro y me veo atajando muchos años más.
–¿Cuáles son los objetivos de Chacarita para este año?
–Nosotros fuimos el equipo revelación, conseguimos 30 puntos y terminamos cuartos en el torneo. Es un punto de referencia ineludible para superarnos. Si tenemos madurez, lo vamos a lograr.
–No va a ser fácil.
–No, porque Chacarita se ganó el respeto y ahora todos nos ven como un rival complicado.
–¿Te ves como DT?
–Me gusta, sobre todo para poder ser útil en el vestuario. No lo tengo claro, pero creo que voy a seguir ligado al fútbol.
–Decís que los jugadores son únicos. ¿Navarro Montoya también?
–Sí, por mi personalidad, mi estilo, mi manera de jugar. Soy un referente de la historia del fútbol argentino y, ya lo dije, estoy entre los cuatro mejores arqueros.



