CUBA disfruta de su flamante reinado a puro try

La novela de este joven equipo de CUBA, que ha marcado un punto de inflexión en las últimas cinco décadas de su prolífica historia, se escribe cada sábado, en cada partido y con distintos matices: Universitario parece disfrutar sorbo por sorbo el suceso de haberse convertido en el nuevo monarca del rugby argentino. Ayer tuvo que batallar 50 minutos ante el corajudo Pueyrredón; el trabajo de desgaste del rival y la jerarquía del campeón hicieron el resto: fue un inapelable 47-3.

Si bien el calendario conduce inevitablemente al letargo invernal, el nuevo equipo sensación vive su primavera rugbística. Sus dos gigantescos logros -el torneo de la URBA de 2013 y el Nacional de Clubes de ocho días atrás- se ven acompañados de un rugby por momentos exquisito, de alto vuelo, pero también fundamentado en la obtención y determinación de un pack de alta talla. Ayer la figura fue Lucas Maguire, que hizo todo perfecto, pero los ocho funcionan como un engranaje letal, con la vieja y efectiva fórmula del line-maul-try.

Con backs súper rápidos, aprovecha cada metro cuadrado y termina sobrando siempre por algún resquicio. Si la tarde no viene bien con los envíos a los postes de su apertura, Bautista Güemes, entonces aparece Juan Cruz González para rectificar el rumbo, como ocurrió en la tarde de Villa de Mayo.

Si los huecos no aparecen, entonces sale un delicioso reverse-pass de Maguire que desconcierta y la jugada termina en try del propio Güemes. Siempre hay rueda de auxilio, una inspiración individual o la jerarquía colectiva. No sólo es un equipo. Hay concentración, cabeza, solidaridad y muchos líderes.

Maguire explica el nuevo desafío: " Ya no tenemos la presión de los 43 años sin títulos ni de perder los partidos clave. Eso ya lo conseguimos ganando dos finales. Ahora lo que hay que entender es que debemos hacernos cargo de la responsabilidad de haber llegado a este lugar de privilegio. La idea es no relajarse y mantener la concentración".

Con la responsabilidad de defender lo conseguido, CUBA empezó a disfrutar de la defensa del cetro bonaerense y lo festejó con una catarata de tries.