¿El peor saque de la historia del tenis profesional? Frances Tiafoe y un mal impacto que hasta provocó las risas de sus colegas

El Devonshire Park Lawn Tennis Club es el escenario del torneo de Eastbourne, en la costa sur de Inglaterra. En el calendario actual es, junto con Mallorca, una de las últimas estaciones tenísticas antes de la acción en Wimbledon, el tercer Grand Slam de la temporada, que este año levantará el telón el lunes próximo. Allí, sobre el césped británico, en las últimas horas se produjo un saque que..., sin dudas, puede aspirar a convertirse en uno de los peores de la historia profesional.

El autor de semejante servicio fue uno de los mejores del mundo, el estadounidense Frances Tiafoe, de 24 años y 28° del ranking. El hecho curioso se produjo durante el duelo de la primera ronda del ATP 250 de Eastbourne, ante Alexander Bublik (39°), más precisamente en el tercer game del tercer set, con el kazajo arriba en el score por 2-0. Tras ceder su servicio en el primer game, Tiafoe siguió con dudas en el saque y protagonizó uno de los peores segundos servicios que se recuerden en el tour: desde el lado par envió la pelota más de diez metros desviada hacia el sector opuesto. Es más: el tiro del norteamericano casi impacta en un alcanzapelotas, que sólo atinó a bajar su cabeza.

Tras el muy saque que terminó convirtiéndose en doble falta (y provocando la sorpresa del público allí presente), Tiafoe se quedó unos segundos mirando en dirección a la pelota perdida, como sin comprender lo que había hecho. Evidentemente ya estaba sin confianza ni intenciones de tratar de seguir luchando por el partido. Ese tercer set, finalmente, terminó muy rápido, con un 6-0 en favor de Bublik, quien terminó imponiéndose por 5-7, 7-6 (7-4) y 6-0, en 1h50m, para avanzar a los octavos de final del certamen (su próximo rival será el australiano John Millman).

Tras el partido, la acción de Tiafoe no pasó inadvertida. Incluso, algunos colegas del jugador nacido en Hyattsville, estado de Maryland, se lo tomaron con una sonrisa. Por ejemplo el neerlandés Botic van de Zandschulp, actual 26° del mundo, que se subió a una publicación en Twitter del video de Tiafoe y compartió uno propio (y muy malo) ante el italiano Matteo Berrettini, hace unos días, en las semifinales perdidas en el torneo de Queen’s.

“No estoy seguro de cuál es peor. El de @FTiafoe o el mío”, escribió van de Zandschulp en la red social, en tono humorístico. El estadounidense, por el momento, no le respondió. La actual no es una buena temporada para Tiafoe: jugó sólo una final de ATP (en Estoril; cayó con el argentino Sebastián Báez) y tiene un récord de 12 victorias y 13 derrotas.

Tiafoe, uno de los jugadores más queridos en el circuito, conoce lo que es el sacrificio. Siempre valora lo que sus padres hicieron por él y por su hermano gemelo, Franklin. Frances Tiafoe Sr. y Alphina Kamara pisaron EE.UU. en 1996, provenientes de Sierra Leona, tratando de hallar las oportunidades que no había en esa porción africana.

Antes de que Tiafoe se transformara en un prodigio de las raquetas (en 2013, con 15 años, fue el más joven en ganar el Orange Bowl, en menores de 18; más rápido, inclusive, que Roger Federer, John McEnroe o Bjorn Borg), sus padres, sin descansar, hicieron malabares para progresar. En 1999, con hijos de un año, Tiafoe Sr. se apuntó como jornalero en la construcción del Junior Tennis Champions Center, en College Park, una ciudad del Condado de Prince George, en el estado de Maryland. Como el dinero no le alcanzaba, decidió trabajar en doble turno, dedicándose a la limpieza del complejo durante el día y el cuidando las canchas de tenis por las noches. Deudas, embargos, obstáculos para pagar el alquiler fueron parte del escenario de los Tiafoe durante años. Hoy, además de ser un excelente tenista, Frances Tiafoe es un tenista comprometido con la igualdad y la lucha contra el racismo.

Argentinos en Eastbourne

Al margen de la acción curiosa que involucró a Tiafoe, el torneo sigue en marcha y el cuadro individual presentó a dos jugadores argentinos, aunque sólo uno de ellos sigue en pie. Diego Schwartzman (15° del mundo y cuarto preclasificado del certamen) salió adelantado y, este miércoles, en la segunda ronda, se medirá con el británico Jack Draper (108°).

Francisco Cerúndolo (42°; el mejor ranking de su carrera) hoy debutó en la primera rueda y perdió frente al estadounidense Tommy Paul (35°) por 4-6, 7-6 (7-2) y 6-4, en 2h38m.

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