Bolsa de Comercio de Buenos Aires. Un aniversario a la distancia y con ayuda a hospitales

"Cuando en 1871 Buenos Aires sufrió la epidemia de fiebre amarilla, la Bolsa de Comercio donó los hospitales de campaña a la ciudad porque no había lugar suficiente para atender a todos los afectados. Y hoy, que estamos cumpliendo 166 años, también estamos donando insumos y obras a tres hospitales para que estén en mejores condiciones frente a la pandemia del coronavirus", cuenta Adelmo Gabbi, presidente justamente de una institución que fuera fundada el 10 de julio de 1854 y que acompañara durante todo este tiempo el desarrollo del país.

Por el aislamiento preventivo, social y obligatorio dictaminado para frenar la propagación del Covid-19, este año la tradicional celebración del aniversario de la fundación de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires no podrá tener lugar. Sin embargo, la asociación civil refuerza su compromiso con el país a través de una importante obra solidaria: los hospitales Dr. Cosme Argerich, Fernández y de Clínicas recibirán aproximadamente un millón y medio de pesos cada uno en insumos solicitados por ellos mismos para mejorar su capacidad de respuesta a la enfermedad.

Adelmo Gabbi recordó algunas curiosidades históricas de una institución que, a lo largo de más de un siglo y medio, ha contribuido en la formación de inversores y la difusión del mercado de capitales, ganándose por su transparencia e idoneidad un reconocimiento que sobrepasa las fronteras de la Argentina.

La Bolsa está cumpliendo 166 años. ¿Cómo fue el momento de su fundación?

Por su experiencia en Europa, Belgrano le había dicho a Rivadavia que no podía haber un país sin un banco, un correo y una bolsa. Rivadavia enseguida firmó un decreto creándola, pero esa bolsa nunca llegó a funcionar porque al poco tiempo las operaciones bursátiles fueron prohibidas en el mundo. Así que hubo que esperar hasta 1854 para que finalmente se fundara la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, como una iniciativa de un grupo de ganaderos y comerciantes, en su mayoría. Es la institución más antigua del país con su propio nombre.

¿Cómo fueron aquellos primeros años?

La Bolsa reunía a los presidentes de la República. De hecho, Pellegrini firmó el convenio de pago de la deuda externa de su momento en la Bolsa. Cuando Juárez Celman renuncia en 1890 por la crisis que se desata al anunciar que no podía pagar la deuda, Pellegrini dijo que si no conseguía la plata de las familias más importantes, no asumía. Entonces fue caminando desde la Casa Rosada hasta donde hoy está el Banco Nación, que ahí estaba la Bolsa, para pedirle a Uriburu, que era vicepresidente de la Bolsa, una de las instalaciones para poder reunirse con esa gente. Uriburu le ofreció poner la plata y que luego la Nación se la fuera devolviendo. Y eso se firmó en la Bolsa.

¿Cúál ha sido entonces el rol de la Bolsa en el desarrollo del país?

La realidad es que fue la financiadora del país en lo privado y en lo público. Todos los negocios pasaron por ahí: no hay negocio importante en la vida institucional del país de los últimos 166 años que no haya pasado por la Bolsa. Todas las sociedades tienen algún instrumento en la Bolsa, las más importantes pero también las Pymes. Es una institución grande, la más poderosa económicamente que tiene el país. Y siempre se gobernó bien: nunca hubo un caso de corrupción. Y espero que no lo haya nunca.

Todos los negocios pasaron por ahí: no hay negocio importante en la vida institucional del país de los últimos 166 años que no haya pasado por la Bolsa.

A lo largo de su historia, la Bolsa de Comercio de Buenos Aires ganó prestigio por su transparencia e idoneidad en la implementación de los mecanismos normativos y de control de cotizantes, la constante generación de respuestas a través de la creación de nuevos productos, y de la divulgación oportuna de información para la toma de decisiones de inversión, lo cual la sigue colocando en una posición funcional para el mercado argentino. En la actualidad, a partir de la nueva ley de mercado de capitales, el rol de la Bolsa se materializa en su colaboración con Bolsas y Mercados Argentinos S.A. (que surge a partir de los cambios en la ley) y con la Comisión Nacional de Valores en el control de las emisoras de valores negociables.