Soja: cómo tener rindes estables con un clima adverso

En medio de la sequía, Don Mario brindó diversas recomendaciones para el manejo de los cultivos de soja en el ciclo 2022/2023.

Según Diego Regnicoli, gerente de Desarrollo de la región centro norte de la marca, las recomendaciones de manejo son “el pilar fundamental para hacer frente al fenómeno” climático.

En este contexto, en un informe de la empresa se aconsejó hacer un “diagnóstico preciso de la situación del lote”, determinar agua útil en el perfil para establecer la cantidad de milímetros con los que se arranca al inicio y, de esta manera, definir la estrategia de siembra.

“Para ambientes con frecuente influencia de napa, determinar la profundidad será la clave para conocer si aporta lo necesario al cultivo”, señaló el reporte.

“Independientemente de la región, si no se acumula una cantidad razonable de milímetros de lluvia al momento de la fecha de siembra óptima, se recomienda atrasarla a la espera de mejores recargas de perfil como punto determinante. Por otro lado, el hecho de retrasar la fecha de siembra permite ubicar el período crítico en momentos de menores demandas atmosféricas de agua”, dijo.

En este marco, “otra estrategia consiste en evitar la siembra de variedades de grupos de madurez muy precoces para la zona o diversificar en distintos grupos de madurez (GM)”.

Para ambientes con frecuente influencia de napa, determinar la profundidad será la clave para conocer si aporta lo necesario al cultivo

“Si bien los GM más cortos son más eficientes en el uso del agua, los GM más largos por su amplitud reproductiva permitirían captar mejor las lluvias si se revierte el panorama climático hacia mediados/fines del verano”, explicó el informe.

“Es importante destacar que en años con escasas e irregulares precipitaciones pueden darse fallas en la incorporación de herbicidas preemergentes con el consiguiente problema de la emergencia de malezas una vez establecido el cultivo de soja. Es en este punto donde la nueva tecnología Enlist E3 pasa a ser una alternativa importante para combatir esos lotes con malezas problemáticas permitiendo hacer aplicaciones de posemergencia con herbicidas como 2,4 D sal colina y glufosinato de amonio sin afectar al cultivo”, se indicó en el reporte.

Planificación

Agregó que también “es necesario planificar muy bien la logística de siembra, ya que en años con escasas precipitaciones suelen ser cortos los pulsos de siembra”.

En la empresa remarcaron que conocer qué características definen los ambientes “es fundamental para incrementar la eficiencia del uso de insumos, como la performance de la variedad a implantar”.

Finalmente, Regnicoli señaló: “El aspecto climático es, sin dudas, el factor que determina los diferentes ambientes potenciales dentro de cada zona y lote en particular. Hacer un correcto diagnóstico de estos para luego poder determinar cuál es el mejor GM, variedad, densidad, fecha de siembra y manejo nutricional entre otros. Este diagnóstico permitirá aumentar los pisos de rendimiento y mantener una cierta estabilidad en los rindes, índice fundamental con el actual escenario climático que estamos atravesando”.

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