Choques entre policías y petroleros
Hubo heridos leves tras enfrentarse a tiros efectivos y manifestantes; agredieron al intendente de Caleta Olivia; preocupación del gobierno
RIO GALLEGOS.- Se torna cada vez más violento el paro petrolero en Santa Cruz, con enfrentamientos entre policías y huelguistas que causaron heridas de bala a una integrante de las fuerzas de seguridad. Al mismo tiempo, el intendente de Caleta Olivia, Fernando Cotillo, fue víctima de una golpiza por parte de manifestantes en plena calle de esa localidad de Santa Cruz.
La gravedad de los hechos motivaron que la presidenta Cristina Kirchner se comunicara por teléfono con Cotillo, compañero de fórmula del actual gobernador Daniel Peralta por el Frente para la Victoria (FPV) para las elecciones de octubre. "Cristina habló conmigo hoy [por ayer], ésta es su provincia y esta situación excedió los límites y le genera preocupación. Los conflictos se deben resolver por la vía de la racionalidad, no parando la producción con la excusa de que el gremio está intervenido. Aún sufrimos las pérdidas económicas del paro anterior", expresó el jefe comunal en conferencia de prensa.
Los petroleros reclaman que la Federación de Petróleo, Gas y Biocombustibles, junto con el Ministerio de Trabajo de Nación, les garantice la finalización de la intervención del sindicato, iniciada el 26 de abril.
Como se informó, el cuerpo de delegados solicita que se les garantice el llamado a elecciones para la conformación de la junta electoral y de esta forma volver a elegir su conducción.
La intervención tuvo un primer vencimiento en junio, pero la Federación decidió prolongarla 30 días más, fecha cumplida el jueves de la semana pasada. Se había asegurado a los trabajadores que transcurridos los plazos, recuperarían el gremio. Al no suceder eso, la decisión del cuerpo de 120 delegados fue ir a un paro por tiempo indeterminado.
Hechos de violencia
Ayer a la madrugada Caleta Olivia fue escenario de hechos de violencia. Después de que un grupo de 600 petroleros decidió tomar la planta deshidratadora ubicada en Cañadón Seco, a 15 kilómetros de Caleta Olivia, lo cual llevó a que empezara a detenerse la producción, efectivos de la Guardia de Infantería procedieron al desalojo.
Como resultado de la represión, hubo un enfrentamiento en la ruta 12 entre policías y trabajadores que portaban armas de fuego. "Hubo corridas, disparos y gases lacrimógenos; cuando nos sacaron de la planta fuimos a la ruta y ahí hubo un segundo desalojo", expresó a La Nacion el delegado local David Quiroga
Como resultado del enfrentamiento, una integrante de la fuerza de seguridad recibió un disparo de un arma calibre 22 que traspasó el escudo de protección y le provocó heridas que no revisten gravedad, mientras que algunos trabajadores resultaron con lesiones leves.
"Denunciamos el proceder mafioso de los petroleros, estaban armados y esto podría haber causado una muerte. Este paro tiene motivaciones políticas", expresó Amadeo Figueroa, secretario de Gobierno de Caleta Olivia.
Aún se desconoce de dónde provino la orden de desalojo. Sin embargo, el gobernador Peralta indicó que dio órdenes directas para mantener las rutas despejadas. "Una ruta cortada es cortar la producción y no lo vamos a permitir", señaló el mandatario.
El clima de tensión se incrementó después de que un grupo de petroleros ubicados en el centro de Caleta Olivia agredieron en la vía pública al intendente Cotillo. Las autoridades del municipio denunciaron que el jefe comunal fue apuntado con un arma de fuego durante un intercambio de palabras con petroleros que después lo golpearon.
Tras sufrir una gran hemorragia, Cotillo fue atendido en el Hospital Zonal Pedro Tardivo, donde se le aplicaron siete puntos de sutura en un corte en la cabeza.
Según se informó, el jefe comunal se constituirá en parte querellante en la causa radicada en el Juzgado de Primera Instancia de la ciudad. La Justicia ya está interviniendo, identificó a los responsables, pero aún no ha podido dar con el paradero de ninguno.
El gobernador Peralta hizo un llamado para que los trabajadores retomen las actividades y depongan las medidas de fuerza: "Deteniendo la producción, pierde la economía de la provincia. El reclamo deben realizarlo hacia la Federación, pero nunca interrumpiendo la producción", afirmó.
Por estas horas, en las localidades de Las Heras, Pico Truncado y Caleta Olivia el acatamiento es dispar y las medidas se cumplen al costado de rutas de acceso a yacimientos petroleros, impidiendo que los equipos suban a trabajar.
En la Cuenca Austral continúa la toma de la planta ubicada en el predio de Punta Loyola. En cada uno de los principales pozos hidrocarburíferos hay personal de Gendarmería cuidando las instalaciones.
En tanto, el gobierno provincial continúa solicitando que la Federación de Petróleo, Gas y Biocombustibles intervenga con celeridad para resolver la situación del sindicato, que en Santa Cruz cuenta con 9300 afiliados.
Regalías
Esta semana se comenzará a cuantificar si disminuyeron los ingresos de regalías a las arcas provinciales después de 72 horas de paro
En ese sentido, Santa Cruz previó para este año ingresos por $ 1084 millones en concepto de regalías, de las cuales ya se perdieron 300 millones por el paro de abril.
Cabe recordar que la última medida de fuerza provocó una crisis financiera, de la cual la provincia aún no logra reponerse.
El propio vicepresidente ejecutivo de YPF, Sebastián Eskenazi, calificó el conflicto desatado en abril como el peor de la historia de la empresa, que por la paralización de producción de crudo también afectó el abastecimiento de combustible al resto del país.