Prevén que a partir de julio Japón comprará carne de la Patagonia argentina
El Ministerio de Agroindustria adelantó que, aunque no hay fechas precisas, a mediados de año comenzaría "efectivamente" el ingreso de carne ovina y vacuna patagónica a Japón y de ese mercado a la Argentina. El ministro Luis Miguel Etchevehere está en Japón en una misión de la que participa también el sector privado.
El anuncio sobrevino tras una reunión de Etchevehere con su par japonés, Ken Saíto. El funcionario nacional destacó "la relación bilateral privilegiada y estratégica entre Japón y Argentina, tanto en materia de comercio e inversiones como de cooperación, teniendo presente la complementariedad existente entre ambas economías y estructuras productivas y la necesidad de profundizar el vínculo comercial para el beneficio de ambas naciones".
Voceros del Ministerio confirmaron a LA NACION que, si bien no se habló de fechas concretas, a mediados de año comenzaría la apertura del mercado japonés a carnes argentinas. Es una apertura "simultánea" de carne bovina y ovina desde la Patagonia, y, recíprocamente, carne bovina japonesa.
En la reunión acordaron que ambas partes avanzarán con el proceso para el momento de la celebración de la reunión ministerial G-20 de Agricultura a fines de julio en Buenos Aires.
Desde el Ministerio aclararon que la carne bovina y ovina de la Patagonia estará físicamente disponible para su compra y venta en el mercado japonés a partir de julio próximo, lo mismo que la carne japonesa.
En tanto, Etchevehere señaló la necesidad de continuar en el corto plazo con la apertura del mercado japonés para la carne fresca del resto del país (zona libre de fiebre aftosa con vacunación), ya que se "contará con el valioso antecedente de la carne patagónica para una gestión más ágil".
"Existe voluntad política para que la Argentina y Japón potencien su relación comercial", afirmó, y agregó que entiende que hay un espacio para "profundizar y diversificar" los intercambios. "Esperamos poder avanzar pronto con acciones de apertura de mercado y de promoción comercial, en beneficio mutuo", añadió.
En la agenda también se incluyó el interés de concluir con la apertura del mercado para arándanos, al igual que con uvas y cerezas. En materia de pesca, se recordó el "Memorando de Entendimiento sobre Desarrollo de la Tecnología de Producción Masiva de Semillas de Besugo y Lenguado" del año 2000 a través del cual se construyó la Estación Experimental de Maricultura.
En este contexto, se planteó el interés de generar vínculos científico-técnicos y comerciales para la capacitación y transferencia de conocimiento y de realización de proyectos productivos para el desarrollo de acuicultura de agua dulce y de acuicultura en aguas marítima.
El año pasado Japón registró importaciones de carne bovina fresca o refrigerada deshuesada por US$1900 millones y más de US$1100 millones en carne congelada deshuesada.
Ante una consulta de LA NACION, Miguel Schiariti, presidente de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra), opinó: "La apertura de Japón para la carne es un paso adelante en el largo camino que tiene dicho país para la apertura de su mercado. De los 10 pasos que tiene ese recorrido, este es el cuarto, por lo que falta todavía para que las exportaciones a ese mercado tengan relevancia dentro de las exportaciones argentinas. Sin ninguna duda, es un paso adelante en la apertura definitiva de ese mercado para las carnes de alto valor de nuestro país". En la Patagonia, hay pocos frigoríficos para carne vacuna, según recordó el presidente de Ciccra.
Mario Ravettino, presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes (ABC), consideró el anuncio de Agroindustria "un avance muy importante" para la apertura de nuevos mercados. Carlos Riusech, CEO del Frigorífico Gorina, subrayó "la decisión política" también para abrir mercados.
Por su parte, Daniel Pelegrina, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), señaló: "Todo lo que tenga que ver con la apertura de mercados es importante; tener relaciones con Japón es una señal para otros mercados, porque ese país pide calidad e inocuidad".
Con la colaboración de Fernando Bertello