Para llegar al déficit cero, suben por decreto las tasas a las importaciones

La recaudación en los primeros meses de 2019 crece por debajo de la inflación y no alcanza las proyecciones iniciales del Gobierno. La situación fue advertida hasta por los técnicos del FMI, que en su última revisión señalaron que la Argentina debe incrementar su recaudación. En ese contexto, el Ministerio de Hacienda a cargo de Nicolás Dujovne dispuso hoy por decreto el aumento de las tasas que deben pagar las importaciones que ingresen al país.

Se trata de los gravámenes contemplados por el Código Aduanero, que alcanza a las mercaderías destinadas para consumo y a las "destinaciones suspensivas de importación temporaria". Por un decreto de 1998, estaba fijado en el 0,5%. A partir de hoy, esa alícuota se elevó al 2,5% y duraría, en principio, hasta el 31 de diciembre próximo.

Fuentes cercanas a Dujovne reconocieron que la medida tiene la expresa intencionalidad de mejorar la recaudación, uno de los puntos sobre los cuales advirtió el FMI en su reciente revisión sobre las cuentas de la economía argentina.

La disposición se conoció hoy, a través del decreto 332/2019 publicado en el Boletín Oficial . Allí se informa que la tasa de estadística se elevó del 0,5% a 2,5% y comprende a todas las importaciones que tienen como destino final su utilización local.

En la práctica, afectará a casi todas las compras al exterior. La excepción son las importaciones temporarias, es decir, bienes, componentes o piezas que ingresan al país y se utilizan en otras mercaderías que finalmente tienen como destino final la exportación.

Más allá de quintuplicar el valor de la alícuota, el decreto firmado por Mauricio Macri , Marcos Peña y Dujovne introduce un tope nominal sobre el cual la tasa no podrá superar un determinado monto, según el valor de las mercaderías importadas. Con este mecanismo, se aligera el peso de esta tasa.

Para las operaciones menores a US$10.000 el monto no podrá superar los US$150; mientras que las importaciones entre US$10.000 y US$100.000 tendrán un monto máximo de US$2500.

En tanto, las operaciones de entre US$100.000 y US$1.000.000 deberán pagar US$25.000, mientras que las transacciones de entre US$1.000.000 y los US$5.000.000 tendrán un tope de US$125.000. Por último, para las operaciones superiores a los US$5 millones se fijó un monto máximo de US$125.000.

"Esto responde a una medida de control de ingresos y tiene un fin recaudatorio, que tiene que ver con la balanza de pagos y el balance fiscal. Esta decisión está convalidada por el FMI, que está haciendo el rastreo de cómo viene la recaudación y cómo van los números de todos los sectores donde se consiguen ingresos", plantea el tributarista Iván Sasovsky.

En 2018, según los números del Indec, la Argentina registró importaciones por US$65.441 millones, con una caída del 2% frente a 2017 (US$66.930 millones). De ese total, un 31% fueron bienes intermedios, mientras que hubo 18% de importación bienes de capital y 18% de piezas y accesorios para bienes de capital. Los bienes de consumo, en tanto, representaron 13%.

En el primer trimestre de 2019, en tanto, las importaciones totalizan US$12.171 millones, monto que muestra un desplome del 27,9% frente a igual período de 2018, producto de la recesión económica y la suba del tipo de cambio.

Una historia con modificaciones

En su artículo 762, el Código Aduanero establece el cobro 'ad valorem' de tasa de estadística para las importaciones o exportaciones. En 1989, la Ley 23.664 fijó esa tasa en el 3% pero un decreto del 9 de enero de 1998 se redujo ese monto al 0,5%, valor vigente hasta hoy.

"A diferencia de un impuesto, que sí tiene que identificar el objeto imponible al cual se carga, esta alícuota es una tasa, que por su naturaleza requiere una contraprestación, un servicio que justifique su pago, y en este caso es el servicio que brinda el Estado por ingresar las importaciones en la Aduana", explica Sasovsky.

En los fundamentos del decreto que eleva la alícuota al 2,5%, el Gobierno sostiene que "han pasado más de 20 años desde la reducción de la alícuota de la tasa de estadística y del establecimiento de su tope, mediante los decretos mencionados", y añade que hubo "cambios tecnológicos, organizacionales y geopolíticos" que modifican el desarrollo de las tareas estadísticas sobre las importaciones.

"Las operaciones de comercio exterior requieren de actividades específicas del Estado nacional, las cuales comprenden registraciones, cómputos, sistematizaciones, fiscalizaciones, habilitaciones y certificaciones, entre otras tareas", sostiene el decreto.

A su vez, la normativa que eleva la alícuota que deben pagar las importaciones establece que los montos que se cobraban en la Argentina eran menores a los vigentes en otros países de la región. "Países como Uruguay aplican a sus importaciones tasas con alícuotas superiores a las establecidas", sostiene el texto, y agrega que "el Congreso de ese país estableció la cuantía de la tasa consular aplicable a sus importaciones en un 3% intrazona y 5% extrazona".

Según explicaron fuentes del Ministerio de Hacienda, a su vez, la tasa era del 0,5%, pero el Estado subsidiaba el resto del costo que no era cubierto por la tasa. Ahora, en cambio, se decidió retirar el subsidio de forma temporal hasta el 31 de diciembre de 2019 por las necesidades recaudatorias.