Una fiesta a todo lujo en el patio del Palacio Real

MADRID.- Luego de recorrer las calles de Madrid a bordo de un Rolls Royce blindado, el príncipe Felipe y Letizia Ortiz, ya convertidos en marido y mujer, se dirigirán al Palacio Real, donde los estarán esperando sus 1600 invitados para celebrar la fiesta de casamiento.

El almuerzo se realizará en el Patio del Príncipe, de 2500 metros cuadrados, adornado con 36 tapices flamencos de los siglos XVI y XVII. El patio se ha convertido en un gran comedor, con una enorme carpa, con iluminación que producirá un efecto de luz de día y con aire acondicionado. Las mesas principales se encontrarán en el salón central y las secundarias, en una galería superior

A medida que los invitados vayan llegando al Palacio, se servirá una docena de aperitivos típicos de varias comunidades autónomas españolas, acompañados por vinos. Habrá pantallas de televisión en el interior de los salones, donde se podrá ver lo que ocurra en las calles de Madrid durante el recorrido de los novios.

Cuando Letizia y Felipe lleguen al Palacio, posarán para la foto con los miembros de la familia real y la familia Ortiz Rocasolano. Enseguida comenzará el banquete, aproximadamente a las 14.30 de España (las 9.30 de la Argentina).

Los 1600 invitados se sentarán en mesas redondas de ocho o diez lugares. La vajilla, los cubiertos y la cristalería serán alquilados, salvo en la mesa principal, donde se utilizarán piezas del patrimonio nacional. La mesa principal estará adornada con las trece piezas que integran el llamado "Dessert de Estuco", guirnaldas de hojas y flores de 1790.

El menú nupcial estará elaborado sobre la base de pescados, mariscos, aves y frutos secos. "Como primer plato habrá tartaletas hojaldradas con verduras y frutos de mar, de segundo plato un ave con frutos secos y después una gran torta nupcial", de 150 kilos y dos metros, según explicó ayer a Radio Rivadavia Carmelo Pérez, encargado del almuerzo de la boda.

Por Agencias ANSA, EFE y AFP

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