La celebración del baile
Kool & The Gang nos visita por primera vez
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Hoy en El Divino Buenos Ayres y mañana en el estadio Obras, la banda liderada por J. T. Taylor revive el espíritu de la música disco. Infierno disco en Buenos Aires. Fiebre de pelucas, plataformas, ropa brillante y recuerdos. De la mano de Kool & the Gang, anfitriones del retro. A veinte años de Fiebre de sábado por la noche, los autores de Celebration toman la palabra e incentivan a una nueva generación.
Protagonista excluyente del vuelco que dio la banda en 1979, el cantante J. T. Taylor regresó hace tres años a Kool & the Gang. Su carrera solista sigue a salvo, pero con Robert Kool Bell (bajo) y compañía quedaban cuentas por saldar.
"Mi vuelta a la banda puede resumirse en unas pocas razones", nos confía el cantante desde Nueva Jersey, a poco de emprender su primera visita a la Argentina. "Empecé a recibir faxes, e-mails y todo tipo de comunicaciones de los fans. Querían que volviera al grupo y que rehiciéramos nuestra música." Pero la razón mayor pasaba por el sabor amargo de lo inconcluso.
No todo es disco en el universo de Kool & the Gang y J. T. Taylor lo deja en claro. "No somos una banda de boliche. La palabra disco es relativamente nueva, pero la palabra baile nunca se termina. Nosotros apuntamos a esta última."
Del funk al soul, la agrupación que en 1995 dio a conocer State of affairs amplía el panorama. "Si mirás hacia atrás en el tiempo, a comienzos de los años 70, la banda tocaba música de jazz. Cuando yo llegué, en 1979, transformamos la música y ahora, en los años 90, recreamos mucho de lo que hicimos en la década del 80. No estamos sólo tocando disco. Si así lo hiciéramos sería demasiado aburrido."
Como en los años 70
Promete J. T. Taylor: "Vamos a bailar, vamos a ser sexys, vamos a desplegar mucha energía. Además, voy a intentar cantar Celebration en castellano".
Mañana, Obras se convertirá en una típica disco de los años 70, con una ambientación acorde, 20 esferas espejadas en el techo y un DJ que pasará música antes de que la banda suba a escena. Pero esta noche, la banda acortará la espera en El Divino.
Tanto la banda de Jason Kay como el amplio espectro de los sonidos groove (acid jazz, nuevo funky soul de los años 90), se apoderaron de la música negra de los años 70, la redefinieron y ahora no dejan de tributar a sus protagonistas. "Nosotros tenemos bastante que aprender de todos ellos -señala J. T. Taylor-. Si tuviera 20 años seguramente estaría haciendo lo mismo que ellos. Me gusta encontrar un balance en los distintos tipos de música porque siempre hay algo que aprender."
Pero la actualidad de J. T. Taylor no se limita a Kool & the Gang. Cuando dejó la banda, desquitó el vicio con la actuación y ahora planea retomarla. "Tuve el gusto de trabajar con Celia Cruz y Antonio Banderas en Los reyes del mambo -recuerda-. Tito Puente con su orquesta me hizo ganar más y más aprecio por la música latina." Su carrera solista tampoco puede esperar. "Mi primer trabajo se va a editar el mes próximo, por medio de mi sello." Pero ahora su historia pasa por Kool & the Gang. Fiebre de jueves y viernes por la noche, en Buenos Aires y sin Travolta. n Sebastián Espósito Kool & the Gang. Hoy, a la 1, en Divino Buenos Ayres, Grierson 225, Dique 4, Puerto Madero. $ 30 los varones con dos consumiciones y $ 15 las chicas con una consumición. Mañana, a las 22, en el estadio Obras, Libertador 7395. Popular, $ 20; piso, $ 30; y platea, $ 50.
Bateas disco
Entre la electrónica y el rock de los años 90, la música disco guarda su lugar en las disquerías porteñas. En los locales de Musimundo, el dance de los años 70 ofrece su amplio abanico. Con algo de paciencia, en el megastore que posee esta cadena en Corrientes y Callao se puede conseguir todo aquello que muchos quieren volver a escuchar. En la batea de música de películas se encuentra el icono de esta música, Fiebre de sábado por la noche, con los Bee Gees en su versión más bailable.
En medio del acid jazz y el hip hop, en la misma batea, la música disco emerge a borbotones. Mandan los compilados. En Night fever (dos CD a $ 28) confluyen, en el primer compacto, Earth, Wind & Fire, Kool & The Gang, Chic, Barry White y Evelyn King, mientras que en el segundo aparecen The Trammps, Sly & The Family Stone y Village People.
De la treintena de compilados se destacan The Best disco, album in the world ever ($ 40), dos CD con hits a cargo de Donna Summer, Diana Ross, Chic, Labelle, Barry White, Village People y Gloria Gaynor, entre otros.
De los clásicos, la oferta pasa por Earth, Wind & Fire, con All´n all ($ 22) y The need of love ($ 12), Donna Summer (The best of..., a $ 16), Gloria Gaynor (The collection, a $ 12), y Chic (The best of..., a $ 13,90).
Con respecto a Tower Records, la música negra ocupa en la disquería de Santa Fe 1883 un lugar de privilegio. Mucho soul, funk, la selecta discografía del sello Motown y, por supuesto, música disco.
Earth, Wind & Fire encabeza la movida. Spirit, Let´s groove y That´s the way of the world -todos a $ 15-, son sólo una parte de su extensa trayectoria. Ausentes los Kool & the Gang y los Chic, la tabla de clásicos continúa con los Bee Gees y su Childrens of the world, que incluye el archibailable You should be dancing, a $ 17.
En materia de compilados, ideales para programar los inolvidables asaltos, se destaca Disco hits ($ 12), con temas de KC and The Sunshine Band y Peter Brown.
Vía Internet, la disquería virtual Faro Buenos Aires (www.farobue.com.ar) ofrece dos compactos de Kool & The Gang. Se trata de Unite y Greatest hits, ambos a $ 17,15.
Foxy Ladies: chicas con estilo
Angeles de Charly con peluca. Esa es la imagen que representa a las Foxy Ladies. Victoria y Valeria González Ahumada y Marisa Mere componen una performance disco pura, al mejor estilo de los años 70.
"Tenemos un show de covers que habitualmente presentamos en New Milenium, Bs. As. News y otras disco", comenta Victoria.
Clásicos de la música disco y un especial énfasis en el vestuario diseñado por ellas, son las claves de sus shows. "Mucho brillo, pelucas y coreografías que invitan al baile." Además de su performance de covers, cantan con Miguel Zavaleta y acaban de editar su primer compacto, Uma foxy, en el que la música disco y el soul tienen lugar, pero también el pop. Todos los temas les pertenecen, pero el paso de cantar covers en inglés a componer en castellano no fue nada sencillo. "Hay que buscar las palabras como te suenan -señala Victoria-, el sonido de ellas y relativizar el significado."
De la música disco, lo que más le atrae a Victoria son las bandas. "Son terribles, sobre todo Chic que fue la primera que me mató. En realidad siempre quise ser negra, pero me quedé a mitad de camino, soy morocha." Y también reconoce que el revival se está yendo lentamente. "Cuando comenzamos, hace tres años, me puse la peluca afro y así fui a bailar. Todos me miraban hasta que después empezaron a copiarme."






