La ópera "Norma" llega al teatro Avenida
Bel canto: esta noche se estrenará, en versión de concierto, la obra de Bellini, con un elenco que encabeza Adelaida Negri.
En el teatro Avenida, hoy y el miércoles, a las 20.30, se llevarán a cabo dos funciones de la ópera "Norma", de Vincenzo Bellini, en forma de concierto.
La soprano Adelaida Negri, dando una nueva muestra de su pasión por el arte lírico, afrontará el personaje protagónico, uno de los más arduos del repertorio belcantista italiano, en una iniciativa de la Casa de la Opera de Buenos Aires, por ella fundada el año pasado.
A la soprano argentina la acompaña un elenco integrado por el tenor Oscar Imhoff, las mezzosoprano María Luján Mirabelli y Virginia Correa Dupuy y el bajo Nino Meneghetti, en los principales papeles.
La dirección musical estará a cargo de Mario Majnaric, con la Orquesta Sinfónica de la Policía Federal y el Coro Metropolitano, preparado por Angélica Caruso. Al presentarla en forma de concierto aumenta la necesidad de dar una interpretación mucho más pulida y esmerada desde el punto de vista expresivo y que apunte básicamente a enaltecer los aspectos estrictamente musicales.
El romanticismo abrió la época de las grandes divas modernas, como Giulia Grisi, Isabel Colbran, Guidita Pasta y María Malibran, entre otras del siglo XIX, que culminó con la legendaria Adelina Patti, un ruiseñor que alcanzó a registrar su voz en los primitivos sistemas de grabación.
Y en ese tiempo, los compositores escribieron obras adaptadas al tipo de voz de cada una (también para los varones, con sobreagudos ideales para Giovanni Battista Rubini), y fue Italia, que logró ocupar, a través de la ópera, un lugar de privilegio.
Primero fue el antecedente de Domenico Cimarosa; luego, la producción de Gioacchino Rossini, y en las primeras décadas del siglo llegaron Gaetano Donizetti y Vincenzo Bellini (1801-1827), ejemplos de lo que se conoce como "bel canto" y, en el caso del compositor de "Norma", creador de gran vena melódica.
Bellini prescinde del recitativo seco, su orquesta es menos colorida que la de Rossini, pero es de enorme inspiración (Chopin fue uno de sus grandes admiradores) y resulta un maestro de talento dramático cuando aborda libretos endebles.
En "Norma", quizá su obra más perfecta, utiliza a una soprano dramática con agilidad (a la manera de la Vitelia mozartiana), pero con el agregado de hacerla vivir una variedad de situaciones psicológicas, al punto de requerir una cantante de alto rango con dotes de actriz.
Adalgisa, la rival de amores, totalmente inocente, reclama una voz de mezzosoprano, con facilidad en la zona aguda, en tanto Polione, el militar romano causante de un trágico triángulo amoroso, inaugura anticipándose el tenor dramático posterior.
Se está sin duda frente a un desafío para la polémica, porque la versión en forma de concierto traiciona los ideales del autor, ya que "Norma" pone en primer plano a una heroína que debe marcar en una acción teatral pleno de matices psicológicos. El secreto de tener dos hijos, siendo una sacerdotisa, la rivalidad primero y luego la unión en la desgracia para enfrentar al autoritarismo y por fin esa muerte purificadora, son algunos momentos que se pueden dar acabadamente con el gesto unido a la inflexión vocal.
Si bien es cierto que Adelaida Negri reúne condiciones indudables como para cantar con la fuerza expresiva necesaria a la manera de María Callas, una de las más grandes intérpretes del personaje, el detalle de estar en una sala de conciertos impide toda acción teatral. Entonces, esos aspectos que surgen de las miras, el gesto, en una palabra, del movimiento actoral, han de estar ausentes, y mejor que sea así, porque si se pretendiera actuar delante de la orquesta se traicionaría a la música sinfónico vocal, detalle que también podría resultar negativo. De ahí el interés en conocer esta versión.