Malena Solda, de la TV al teatro inglés
Está realizando un curso de clásicos
LONDRES.- Malena Solda está hoy muy lejos de los ojos argentinos que supieron disfrutarla en "Soy gitano" y "Jesús, el heredero", aunque se encuentre aún bastante cerca de su público en el pasado y, también, en el futuro. La decisión de volver al país "en algún momento" ya parece haber sido tomada por esta inquieta morocha for export, más allá de que sus palabras hablan por sí mismas de un cambio de esos que no permiten regresar a estados anteriores, y de que Londres, definitivamente, le sienta bien? y mucho. "Soy muy feliz acá: estoy encantada con esta posibilidad que tengo de vivir la riqueza del teatro local, la diversidad cultural de esta ciudad e incluso la comida, que es algo que otros critican de los británicos. Pero yo no me quejo, nunca podría quejarme de poder hacer lo que siempre quise hacer", asegura en su entrevista con LA NACION.
Lo que siempre quiso hacer Malena, una de las actrices más dotadas que alguna vez pasaron por Pol-ka, no era otra cosa que dejar pulir su talento en manos de una buena escuela inglesa de teatro. Y lo logró el año pasado, después de resultar elegida entre más de 3000 aspirantes de todo el mundo
para integrar una nueva promoción del posgrado en teatro clásico, organizado por la Academia de Música y Arte Dramático de Londres (Lamda, según su sigla en inglés). "Para esta promoción, quedamos no más de 120 personas, de modo que lo considero un privilegio", dice esta actriz, de 27 años, que fue seducida por la idea de hacer el curso, a pesar de estar en un momento de pleno éxito profesional. Pero, según ella, más que los buenos augurios del presente pudo la ambición de ser una artista más completa y también de perfeccionar, en particular, sus aptitudes para el teatro. "Además, no quería quedar encasillada como una actriz melodramática. Mi intención era explotar más mi faceta cómica, dado que los últimos trabajos que había hecho en la Argentina, sobre todo en televisión, fueron de personajes vinculados con el drama", afirma.
En esta nueva etapa, que comenzó en agosto del año último, Malena pone a prueba sus propios límites todos los días, durante 12 horas. En cada jornada de este arduo curso que sólo le deja libres algunos fines de semana, se ejercita a fondo en la práctica de todas las disciplinas escénicas, principalmente las desarrolladas en Gran Bretaña entre 1500 y 1750. "En estos meses, hice clown, combate en escenario (con dagas, espadas y hasta trompadas), movimiento, tap, flamenco, canto, sesiones de voz con foniatría, voz con texto y sin él, coro, fonética (acentos y pronunciación), actuación, Le Coq, danzas históricas? Es mucho, pero mucho más de lo que imaginaba", afirma, casi exhausta, tras semejante enumeración.
Ante tal variedad de propuestas, la ex actriz de "Gasoleros" dice tener una marcada preferencia por la comedia shakespeariana. "Eso es lo que me sale mejor, en eso me siento fuerte porque tengo varios años de experiencia en televisión y teatro, más allá de que esto sea distinto. Pero también estoy aprovechando esta experiencia para iniciarme en el canto coral, algo que antes ni hubiera pensado hacer, a pesar de que en mi familia hay quienes sí practican esta forma de expresarse. Pero cuando vuelva a la Argentina, lo primero que voy a hacer es anotarme en un coro, sin falta", bromea.
Proyectos futuros
Malena prevé terminar el posgrado en abril y, aunque extraña a su familia, amigos y "esas pequeñas cosas" (entre ellas, Platense, el club del que es hincha), admite que consideraría una potencial oferta para trabajar dentro del circuito teatral londinense. "Ojalá se diera una oportunidad, aunque sé que es difícil, porque aquí, como es entendible, tienen muchas más posibilidades de acceder a un papel los que tienen el inglés como lengua nativa. Es muy difícil competir con alguien que tiene esa cualidad; por eso, tampoco quiero hacerme muchas ilusiones", comenta, mientras tiembla de sólo pensar que deberá quitarse la campera para hacer las fotos que acompañan esta nota. "El invierno acá no termina más? Eso es lo único que me ha impacientado en los últimos meses. Por lo demás, no puedo más que decir que mi aprecio por esta ciudad va creciendo en la medida en que la voy conociendo más profundamente", revela.
Sin embargo, su romance con Londres no comenzó con este curso, sino mucho antes, cuando a los 17 años vino por primera vez y tocó el timbre de la casa de Emma Thompson, su actriz preferida, para sacarse una foto con ella. Hoy, pese a que el amor incondicional hacia la ciudad de sus sueños no cambió "ni un poquito", ahora ha aprendido a expresarlo de otras maneras. "Desde esa vez quedé impresionada con la tradición y la diversidad de géneros teatrales que existen en este país, y a partir de ese momento comencé a viajar tantas veces como pude", señala.
No obstante, ahora el destino ha querido que Malena volviera a pensar en su porvenir, pero mirando otra vez al Sur. Si bien el tema no la inquieta -pues sus prioridades ahora tienen que ver con terminar lo mejor posible su posgrado-, ella ya ha pensado en un regreso distinto respecto del mundo laboral de su patria. "Yo me veo haciendo televisión nuevamente en la Argentina, pero la verdad es que me gustaría incursionar en la comedia. Me muero de ganas por aplicar todo lo que estoy aprendiendo acá, y por eso mismo también quiero dedicarme mucho más al teatro. Además, algún día, cuando llegue el momento, quisiera ejercer la docencia, pero para eso creo que voy a tener que esperar un poco", comenta.
Mientras ese día llega, Malena parece llevarse bien con su propia y envidiable incertidumbre, que esconde, sin embargo, la certeza de saber que no le va a hacer falta mencionar a Anton Chejov o Fiódor Dostoievski entre sus lecturas favoritas para demostrar lo que ya es: una actriz seria y muy calificada. Y todo esto, más allá de que también rehúya de esos encasillamientos...
Más leídas de Espectáculos
A cinco años de su muerte. Santiago Bal: de crooner de cabaret a comediante, un hombre de amores, infidelidades y delicada salud
Cómo se hizo la entrevista entre Susana y La Mary. Inteligencia artificial, más de 80 notas de archivo y una película histórica
"Una artista maravillosa". Susana Giménez: Invitados VIP, sueños cumplidos y todo lo que no se vio de su último programa del año