Mundo de políticos, entre el bien y el mal
La mayoría de las veces que subo al segundo piso del Maipo Kabaret es a escuchar música, ver teatro musical o algún show acompañada de un rico vino. Esto no pasa con Dignidad, de Ignasi Vidal, bajo la dirección de Corina Fiorillo. El espacio es el mismo, con sus mesitas y sus sillas, pero nos encontramos con una escenografía diferente en el espacio escénico. Un escritorio, con su lámpara de bronce, los sillones con su correspondiente capitoné, una mesita con dos butacones y una mesa bar con su whisky importado, que tendrá una importante presencia durante toda la obra. Un verdadero despacho.
Se apagan las luces y entran ellos: Roberto Vallejos y Gustavo Pardi. Desde el primer minuto uno sabe que va a ver a dos señores actores arriba de ese pequeño pero funcional espacio. Es un duelo con un texto que va entrando de a poco, sin que uno se dé cuenta, hasta quedar totalmente metido en este mundo de políticos donde se mezclan el bien y el mal. Donde lo inmoral y lo corrupto son las armas cotidianas para avanzar en la vida y hasta para tener un mejor pasar. Esta obra habla de la dignidad y de la pérdida de la misma. Esta obra habla del hombre, de nosotros mismos.
Dignidad
De miércoles a domingos, a las 21.30; en el Maipo Kabaret, Esmeralda 443.
Producción: Julia Montesoro
Ana Padilla
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