Cómo fue el homenaje a Soda Stereo en el Movistar FRI Music

Con un día veraniego: cielo despejado y calor, los primeros curiosos se fueron acercando a la esquina de la avenida Figueroa Alcorta y La Pampa, para disfrutar de la música de Soda Stereo. Un total de 25 bandas fueron las encargadas de interpretar las canciones del trío integrado por Gustavo Cerati, Zeta Bosio y Charly Alberti en el marco del Movistar FRI Music.

Dividido en tres escenarios (Zoom, Signos y Primavera), el encuentro empezó pasadas las dos de la tarde con Flö (el grupo ganador de la batalla de las bandas), Rey hindú y Tbc. Entre los principales nombres del line up se destaron: Café Tacvba, Juanes, IKV, Kevin Johansen y Banda de Turistas. Pero también hubo lugar para bandas emergentes como Indios, Violeta Castillo, Rayos Láser, Olímpica y Dead Berlín, entre otros.

Pasadas las 16, cada vez ante más público que no se acobardó por el sol, comenzó a tocar en el escenario Zoom Leo García. Luego de hacer su tema "Isla", el cantante le puso la voz a varios clásicos de la banda pop por excelencia: "Signos", "Prófugos", "Primavera Cero" y "Hombre al agua". De prolijo chaleco y camisa, García le puso un poco de glamour a su look con una pintoresca corona de laureles dorada sobre su cabeza.

A algunos metros del escenario, muchos eligieron hacer uso de los distintos juegos que estaban a disposición del público, como la mesa de tejo o de ping pong. Otros, aprovecharon las mesas y sillas de madera para tomar algo, o degustar algunas de las variadas opciones de gastronomía que se ofrecían en los distintos food trucks (desde hamburguesas y panchos gourmet a tapas españolas). Entre banda y banda, la gente podía probar suerte en la ruleta (el premio mayor eran entradas para Séptimo día, el show que Cirque du Soleil, inspirado en Soda). También, divertirse en un zamba que vibraba al compás de la música y en un sillón mecánico, que emulaba al típico toro al que hay aferrarse para no caer.

Inmediatamente después, fue el turno de Indios. La banda santafesina liderada por Joaquín Vitola tocó temas propios y, por supuesto, brindó también sus versiones de canciones de Soda. Uno de sus elegidos fue "El rito", del álbum Signos. Entre el público sobresalían las familias que, en muchos casos, eligieron la sombra para disfrutar desde allí del espectáculo. Otros, esperaban a que llegue el turno de sus bandas favoritas y, mientras tanto, aprovechaban para recorrer la exposición de fotos de Soda, que se exhibía en una suerte de galería al aire libre.

Minutos antes de las 17, fue el turno de Banda de Turistas, que ofreció su propia versión de la canción que daba nombre a uno de los escenarios ("Zoom"), y veinte minutos después, Massacre se sumó a la ola de homenajes con "Prófugos".

Uno de los momentos más emotivos de la jornada llegó minutos antes de las 18, cuando subió al escenario Benito Cerati, hijo de Gustavo, con su banda Zero Kill. "Mi homenaje es un poquito más personal, así que espero que les guste lo que venimos a hacer", expresó emocionado el cantante, y luego le puso su voz a "Perdonar es divino", una canción de la etapa solista de Gustavo. Antes mostró su música e hizo algunos temas de su último disco Alien Head.

Richard Coleman, ex Fricción y quien ha participado en Soda, se sumó al tributo con una versión de “En remolinos”. El calor fue cediendo y, de a poco, la luna llena empezó a alumbrar el predio. Los IKV, con Emanuel Horvilleur teñido de rubio platino, hicieron casi propia "Ella usó mi cabeza como un revolver", pero antes Dante quiso homenajear "al número uno" con "Aguila amarilla", el tema que escribió para su padre, el Flaco Spinetta. "Bandas como Soda abrieron el camino para un montón de bandas como nosotros, estamos acá por ellos. Aguante Soda", dijo el heredero de Luis Alberto y luego volvió la fiesta con "Coolo" y "Abarájame".

Acto seguido, Kevin Johansen y su hija Miranda hicieron una tierna versión de "Corazón delator" y más tarde con Rubén Albarrán, vocalista de Café Tacvba como invitado, quien llevó el reclamo de Ni una menos al predio de Belgrano, llegó el turno de "Trátame suavemente".

Pasadas las 20:30, Zeta Bosio, quien fue el curador del homenaje, presentó a su nueva banda, Shoot The Radio. Mientras los aviones dibujaban figuras en el cielo segundos antes de aterrizar o despegar en Aeroparque, el ambiente se puso electrónico. La noche tenía una temperatura ideal. El zamba había quedado como fondo de pantalla entre cortinas de luces verdes y azules que le ponían psicodelia al homenaje y estaban en total concordancia con los elefantes lisérgicos y cuerpos danzarines que salían de las pantallas. Los sintetizadores daban sensación de rave pero la gente estaba ansiosa por escuchar el tema de Soda, que llegó recién casi al final. "Gracias Gustavo por tan buenas canciones. Estoy muy emocionado", dijo Zeta y tocó "No existes".

La noche iba llegando a su desenlace, pero antes el colombiano Juanes tendría su oportunidad de cantar "Cuando pase el temblor" y "Zoom" para darle lugar a la última banda de la noche: Café Tacvba. Los mexicanos le pusieron ritmo al predio y también colores. Rubén Albarrán salió al escenario vestido con una suerte de traje blanco con brillos plateados a las 22 y más tarde se vestiría de pájaro flúo. "Para nosotros es un verdadero placer: celebramos a la música de Soda", dijo el cantante, quien aprovechó para tocar un tema nuevo y hacer algunos comentarios irónicos sobre el triunfo de Donlad Trump en Estados Unidos. "Juego de seducción" fue el primer tema de Soda interpretado por la banda. Más tarde invitaron al resto de los músicos para un cierre muy especial: hicieron una versión a varias voces de "De Música ligera". Así, el espíritu de Soda y, en particular, el de Gustavo Cerati se apoderaron del aire en un coro universal.