Anya Taylor-Joy brilló en Los Ángeles durante la premiere de la película El misterio de Soho

El domingo, el auditorio del museo de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Los Ángeles quedó oficialmente inaugurado con la proyección de El misterio de Soho, la película protagonizada por Anya Taylor-Joy y Thomasin McKenzie (Jojo Rabbit) y dirigida por Edgar Wright (Baby Driver). El film, que se estrenará en la Argentina el próximo 11 de noviembre, le sumó glamour a la industria del cine que paso a paso comienza a recuperarse de los más de 18 meses de pandemia.

La alfombra roja y la ropa de gala fueron el despliegue apropiado para el thriller de terror escrito por Wright y Krysty Wilson-Cairns (nominada al Oscar por el guion de 1917, de Sam Mendes), en el que los brillos y la moda son parte fundamental de la trama. La película que se presentó en el Festival de Venecia cuenta la historia de Eloise (McKenzie), una joven aspirante a diseñadora de modas que, cuando se muda a Londres para comenzar sus estudios, descubre que su pasión por el estilo y la música de los años sesenta va más allá de una cuestión de gustos. Con la capacidad de viajar en el tiempo hasta el swinging London de la década del sesenta, la protagonista descubre lo que se esconde detrás de las bellas fachadas. Allí conoce a Sandie (Taylor-Joy), una cantante en ascenso involucrada con el sospechoso empresario que interpreta Matt Smith (The Crown).

Unas horas después de caminar por la alfombra roja del museo de la Academia, Taylor-Joy fue una de las invitadas del programa de James Corden donde, entre otras cosas, reveló su talento para llorar a pedido, una habilidad que por supuesto suele utilizar en los sets de filmación y, cada tanto, para jugarle una que otra broma a sus amigos.

El estreno del film que resultó ser la última aparición en pantalla de Diana Rigg, fallecida el año pasado, fue postergado en varias ocasiones debido a la emergencia sanitaria global y hasta estuvo a punto de correr la misma suerte de otras producciones que debieron conformarse con un lanzamiento por streaming. “Los productores y yo insistimos con esperar a que se abrieran las salas y el estudio, Universal, estuvo de acuerdo. Sentimos que le tenemos que dar al menos una oportunidad en los cines para que sea vista del modo en que fue concebida. Por supuesto que, eventualmente, el público podrá verla en sus casa”, explicaba hace unos meses Wright en una entrevista con el sitio especializado IndieWire.