Les impidieron casarse 60 años atrás, pero la vida les dio revancha y conmovieron a todos

Dicen que, cuando el amor es verdadero, no hay nada que lo detenga. Así lo demostraron dos británicos que se casaron después de casi 60 años de que se los impidieran. Cuando eran jóvenes, los padres de ella frustraron la boda porque consideraban que todavía eran muy chicos para contraer matrimonio. Así, cada quien siguió su camino y formó una familia con alguien diferente, pero la vida les dio otra oportunidad y ahora pasarán el resto de sus días juntos.

La historia de amor de Len Allbrighton, de 79 años, y Jeanette Steer, de 78, comenzó en 1963, cuando se conocieron en un hospital de Isla de Wight, la más grande de Inglaterra. Ambos se capacitaban para trabajar como enfermeros y desde el primer momento supieron que tenían una química inigualable. A los pocos meses de compartir el centro de estudio, se enamoraron perdidamente, según relató el medio británico The Mirror.

Allbrighton le pidió matrimonio a su enamorada cuando ella tenía solo 18 años, lo cual les complicó sus planes porque en ese momento la edad legal era 21. De todas formas, se comprometieron con la esperanza de que los padres de Steer le dieran permiso. Además, el hombre se mudó a Australia, donde tenía planeado esperar a su futura esposa y construir una casa para vivir juntos. Sin embargo, ese día nunca llegó.

Los padres de la entonces joven le impidieron mudarse a territorio australiano y ella debió cancelar la boda. Le envió a su novio una carta para explicarle y el romance terminó. A pesar de que debían separarse, Steer siempre guardó el anillo de compromiso, porque estaba segura de que amaría a ese hombre por el resto de su vida.

Los caminos se vuelven a unir

En aquellos años, los dos jóvenes hicieron su vida por separado: él se casó con alguien de Australia y ella con un hombre de Isla de Wight. No obstante, en 2015, Allbrighton se divorció de su esposa y decidió buscar nuevamente a su amor adolescente. Después de tantas décadas, no había podido olvidarse de ella, así que viajó hasta la isla y trató de contactarla por todos los medios. “No fue un lugar fácil de encontrar, pero lo hice”, declaró para el medio citado.

En ese instante Steer lo rechazó, ya que estaba casada y no quería tener problemas con su marido. A pesar de que le estalló el corazón en cuanto lo vio frente a su casa, decidió hacer caso omiso de sus sentimientos. No obstante, dos años después, su esposo falleció y fue en ese momento que decidió darle una nueva oportunidad a Allbrighton.

Lo buscó y rápidamente retomaron su relación. “Me alegré de que volviera, pensaba mucho en él”, afirmó la mujer. Luego él la invitó a vivir en Stevenage, un pueblo de Reino Unido, y le pidió matrimonio en 2022. Fue así que, en febrero pasado, decidieron contraer nupcias frente a sus hijos, nietos y bisnietos. “Nos enamoramos de nuevo. Nos leímos poemas e intercambiamos anillos. Estaba abrumado con mi amor por ella”, concluyó Allbrighton.

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