Festejar sin estresarnos. Tips para disfrutar de las Fiestas

Ya estamos, casi no queda nada de 2020. Aunque siento que este año ya le pidió crédito de energía al 2021... Pero aquí estamos, a punto de abrir el pan dulce, y lo mejor es disfrutar de las Fiestas. Cada uno a su manera, como quiere y como puede. A cuidar a los que lo necesitan y a brindar. Por eso, pensemos cómo pasar las Fiestas en paz, porque si hay un año en el que no deberíamos estresarnos por su organización es este. De lo que se trata es de enfocar en lo importante.

Aquí van entonces algunos tips que nos pueden ayudar a pasarla mejor. Algunos de los consejos son clásicos; otros, no tanto:

• Delegar algunas cosas. Aunque este año seamos pocos, no cargar con todo. El hielo, la entrada, el postre, el pan dulce, la bebida... Que de algo que se ocupe otro. Siempre que alguien se ofrece y tendemos a decir "que no traigan nada", "que está todo". Y hielo extra nunca está de más. Y "traé cerezas" es un muy lindo pedido.
• Hacer una pequeña lista de tareas. Para luego, en la vorágine, no mezclar prioridades, y para que ante la frase "¿qué puedo hacer?" haya una linda lista a la vista pegada en la pared. Tachar tareas hechas es hermoso.
• Hacer una buena lista de compras anticipadas y comprar todo lo que se pueda antes. Dejar poco para último momento. Para carnicería hoy sería la fecha límite de llamar para reservar. La visita a la verdulería, martes a la mañana, como máximo.
• Si somos los invitados, evitemos llegar muertos de hambre y darnos un atracón. Lo ideal es comer una fruta antes de salir de casa y tener fruta de carozo a mano en la mesa para recibir a los que llegan. Los dips, los vegetales y la fruta deberían formar parte de nuestra mesa. Higos, cerezas, duraznos, damascos, ciruelas, sandía, melón...
• A la hora de cocinar, mantener las cosas simples, solo una parte del menú debería llevarnos trabajo. El resto, fácil. Y hacer lugar extra en la mesada, la heladera, freezer, alacena: todo espacio es clave. El sistema de buffet o autoservicio es el que más recomiendo.
• Tareas para los chicos. Las decoraciones, poner la mesa, cada cual su estilo, podemos encargarla a los niños de la casa. Darles una responsabilidad y festejar su trabajo. Los entretiene, participan y sienten que colaboran.
• Qué hacer con lo que sobra. Siempre sobra comida y las opciones son dos: una heladera colapsada, que detesto, o entregar los tuppers (un viaje de ida). Los que quieran llevarse comida, se traen su propio recipiente. Un problema menos, y todo el mundo con su paquetito para mañana. Comprar envases reciclables, es una opción para los más organizados.
• Lo digo siempre, porque funciona y es una regla básica: por cada vaso de alcohol uno o dos de agua. Me lo agradecen el viernes 25. Y si tenés más de 27 años, no mezcles. La recuperación es fatal. Y nunca está demás decir que si te toca manejar no tomes.
• Es fundamental pensar el menú del día siguiente. Por mi parte, amo el tostado a la plancha con manteca de pan dulce, dijón y gruyere. O torreja de pan dulce con frutas y helado Así que compro todo antes y lo tengo a mano para el 25.
• Muchas familias optan por solo regalar a los niños, pero un buen regalo para hacer es pickles, mermeladas, conservas o algo hecho por nosotros. Creo que son de los regalos más personales que podemos hacer. Y si durante la cuarentena aprendimos algo de cocina, este es buen momento para demostrarlo.
• Masticar despacio. Al cerebro le lleva 20 minutos enterarse que el estomago está lleno. Sí, 20 minutos en los que, en general, comemos de más. Un truco: soltar los cubiertos entre bocado y bocado. O al menos bajar el tenedor de vez en cuando.
• Es probable que tengamos en la mesa algún vegetariano o vegano o celíaco. No hagamos que se traiga su comida. Si nos organizamos podemos hacer un menú que pueda incluir a todos.
• Un gran consejo que me dieron hace muchos años fue: si la familia tiende al conflicto, invitar a alguien completamente ajeno, que no conozcan (compañero de trabajo, extranjero, algún amigo que esté solo). Ellos se divierten y la familia se comporta un poco mejor. Funciona, la novedad distrae.
• Tratemos de descansar la noche anterior. Llegar agotados a un día intenso no nos permite disfrutarlo.
• Poné música desde temprano, para preparar todo; cambia la experiencia completamente.
• Un gran postre es ensalada de frutas de carozo (ciruelas de distinta variedad, cerezas, damascos y duraznos) con dos cucharitas de azúcar, algo de jugo de limón o naranja o algún licor, y helado (a mí me gusta de sambayón), y por arriba merengue roto o garrapiñada picada. Simple y no ocupa lugar en la heladera.

•Feliz navidad, y coman rico siempre!