Los mejores sandwiches ruteros para probar en Córdoba

CORDOBA. Complementar el recorrido de los caminos de las sierras de Córdoba con buena gastronomía es una opción que buena parte de los visitantes y locales elige. Además de los restaurantes, hay otras opciones que, en general, ganaron participación por los comentarios de quienes tienen más experiencia en ruta como los camioneros o viajantes. Son los "expertos" en comidas rápidas, de buena calidad y, en general, también a buen precio. Los sándwiches son un clásico en estas rutas gastronómicas.

Una parada obligatoria para quien va hacia las Altas Cumbres por el camino de Falda del Carmen (desde Alta Gracia ) es la despensa Don Quito. El lugar donde funciona tiene 110 años y fue, en sus comienzos, una pulpería. "Todo es original, hasta tenemos un mostrador de aquellos años donde los gauchos se acodaban a tomar algo", cuenta Rubén Arias, hijo de Quito que desde hace 45 años es el autor de los sándwiches más tentadores de la zona.

Después de la pulpería hubo un almacén de ramos generales y, cuando Quito se hizo cargo, siguió con ese formato hasta convertirlo en "despensa". Su hijo apunta que sumó "picadas y algún sándwich de mortadela para los lugareños, poca variedad". Se fueron sumando camioneros y familias que tenían casas de fin de semana en San Clemente. "Todavía el camino era de tierra, empezaron a parar y a pedir porque alguien les había comentado y así nos fuimos haciendo más y más conocidos", describe Arias.

A la despensa la gestiona la familia y aseguran que el "secreto" de sus sándwiches son los productos de "primera calidad" y el hacerlos "en el momento, en vivo y en directo". Los arman a pedido del cliente, pan sin miga, sin cáscara, con mayonesa, con manteca "lo que pida". La estrella es el de manteca y jamón crudo. "Es el más pedido, no le gana ninguno aunque tenemos 14 variedades y todos salen muy bien", se ufana Arias. Están abiertos de lunes a lunes desde las 8:30 (fin de semana a las 9:30) hasta las 22.

Pasión por el jamón crudo

En el mismo camino –que lleva a Traslasierra, en el oeste provincial-, a 2300 metros de altura y con una vista panorámica inigualable está el parador El Cóndor, de donde sale un viejo camino de ripio que pasa por puentes colgantes y por Copina (ese tramo es uno de los clásicos Rally de la República Argentina). Allí, dicen los entendidos, está uno de los mejores sándwiches de jamón crudo de la provincia. "Para comerse varios", postean los visitantes.

Jamón crudo fabricado en Córdoba (que se caracteriza por la buena calidad de sus chacinados) y pan casero, esa es la dupla aconsejada para contemplar el paisaje que incluye vistas, hacia un lado, del lago San Roque y de las Sierras Chicas, y hacia el otro, el inicio de la Pampa de Achala.

En la zona friulana de la provincia, con corazón en Colonia Caroya , el salame, la bondiola y el jamón crudo son los productos más buscados y, por supuesto, los más elegidos a la hora de pedir un sándwich. En el Kilómetro 760 de la ruta 9, en Sinsacate, está el hotel Nawan que tiene su restaurante abierto al público.

"Todo el pan se fabrica acá y, por supuestos, los fiambres son de productores locales –menciona Carol Treachi-, la dueña-. El Caroyense con salame o bondiola y queso criollo es muy elegido; también ofrecemos hamburguesas caseras de carne y de pollo y hasta un vegetariano, pero el tradicional sale mucho". El lugar, un edificio colonial, abrió hace cinco años donde antes era un campo de soja.

En Oncativo, también reconocida por su producción de salames (tiene la marca colectiva registrada), hay quienes calculan su tiempo de viaje para pasar por Monnier (autopista Rosario - Córdoba Km 629) y cargar unos sándwiches o comerlos ahí. Es una fábrica familiar de chacinados que lleva 60 años en la actividad. "Pan francés, manteca (no margarina), queso y después el cliente elige salame, bondiola o jamón crudo, todo hecho acá", señala Silvia.