Trabajo, tenis y fútbol: tres amigos se asociaron para crear una empresa de alimentos saludables
Cumplir un sueño, vencer desafíos, crear un producto, son algunos de los motores de quienes fueron tocados con la varita mágica del espíritu emprendedor. En el caso de estos tres socios, hay un plus: la amistad.
De compartir la facultad y los fines de semana jugando al tenis, al fútbol, salidas de juventud, el ingeniero industrial Santiago Leber, junto con su colega de profesión José Ramón Lanusse y el licenciado en administración de empresas Sebastian Piazza pasaron a verse hoy a los 40 años (a Santiago le falta unos meses todavía) transformados en los directores de una empresa que está renovando el mercado de los productos saludables en la Argentina.
Son los dueños de Tratenfú, una marca de bebidas vegetales a base de frutos secos que salió del ámbito de las dietéticas y de los locales especializados para llegar a las góndolas de los supermercados. Lo hicieron gracias a la incorporación de tecnología para envasar el producto.
Tradicionalmente las "leches vegetales" se envasan en frascos de vidrio, son producidas en pequeña escala con mecanismos de elaboración artesanal, pero ellos, que ya venían con experiencia en la comercialización de fideos sin gluten aptos para personas con celiaquía (importan la marca uruguaya Blue Patna), encontraron el modo de hacer este producto más accesible, tanto en precio como en distribución.
Después de descubrir que en Europa y Estados Unidos había una forma más práctica de presentar las bebidas vegetales, se preguntaron si sería posible hacerlo en nuestro país y se lanzaron a poner la idea en marcha. Un año les tomó llegar a la receta perfecta para elaborar las "leches" de almendra en sabores natural, vainilla y chocolate y conseguir conservarlas con la conocida tecnología Tetra Pack y ponerlas a disposición del público. Ese envase de base cuadrada en el que se suelen presentar las leches, yogures y los jugos de frutas, permite conservar por más tiempo las bebidas de frutos secos sin necesidad de guardarlas en heladera por hasta once meses.
En 2018 vendieron 550 mil litros de estos productos y este año, aun con la difícil situación económica apuestan a facturar 70 millones de pesos, con todas las fichas puestas en un nuevo producto estrella que, esperan, va a conquistar a todos: la bebida vegetal a base de castañas de cajú. Cuentan que es lo que se viene, que las almendras y las nueces pareciera que las conoce todo el mundo, pero que el cajú, ese fruto seco medio dulzón, más blando y más exótico que una avellana, también resulta un ingrediente ideal y más novedoso para elaborar esta bebida blanca que se usa como sustituto de la leche de vaca en alimentaciones vegetarianas o para personas intolerantes a la lactosa.
Además, resultaron aceptadas por el público que no tiene necesidades especiales en su dieta, así que la apuesta, va también por el lado de conquistar paladares gourmet en busca de sabores nuevos.
El entusiasmo con que Santiago Leber, quien asume el rol más visible dentro del grupo, transmite los beneficios de su producto es contagioso. Es inevitable y suma un punto extra el compartir un vaso de la bebida mágica. Es rica.
Pero lo que más interesa en esta historia es cómo lo hicieron. Cuando se conocen tantas historias de amistades rotas después de pasar al ámbito de los negocios, al saber los riesgos que implica para toda relación afectiva cambiar el status, asumir responsabilidades, pasar de compartir momentos de despreocupado ocio a reuniones empresariales, esa es la pregunta ineludible.
¿Cómo es trabajar con amigos?
"El clima laboral es distinto. Siempre hay momentos de risas y distensión", responde Santiago y aclara: "Yo creo que a nosotros nos salió bien pero conozco casos en los que no resulto. Cuando uno va creciendo aparecen las necesidades, los roces. Como en una empresa hay mucho trabajo, hay que poner mucho esfuerzo, para que resulte bien hay que asociarse con amigos que se complementen para llevar adelante distintos roles en la empresa, que tengan distintas habilidades. Una persona puede ser tu mejor amigo pero no tu mejor socio".
Sebastián Piazza coincide: "Esta buenísimo, la confianza por los años que nos conocemos nos da por un lado el poder trabajar pasándola bien como también poder decirnos cualquier cosa cuando no estamos de acuerdo con algún tema. Lo positivo es que los tre somos muy distintos así que cada uno tiene un rol bastante marcado dentro de la empresa".
Y José Lanusse se la juega con más emoción: "Una satisfacción inmensa. Ni en el mejor de mis sueños hubiera soñado este presente. Espero que lo sea muchos años mas".
¿Cómo viró el vínculo del deporte a la empresa?
Los tres recuerdan que lo que más los unió siempre fue el deporte, no tanto el estudio. Era lo que pasaba fuera de las aulas de la Universidad Católica Argentina, lo que los unía, como se dijo, el tenis, el fútbol y jamás se imaginaron que un día terminarían trabajando juntos, menos que lo harían durante casi diez años.
Al graduarse en sus respectivas carreras entre los años 2004 y 2005, cada uno de ellos comenzó a trabajar en empresas. El primero en decidir un camino de emprendedor, mientras todavía estaba empleado fue Santiago Leber, que comenzó a importar los fideos Blue Patna en 2010. Al ver que el negocio funcionaba tomó el riesgo de renunciar a su puesto y crear su propia empresa. José lo siguió y el crecimiento los alentó a decidirse a fabricar. Así descubrieron las leches vegetales con todo su potencial y fue entonces cuando se sumó Sebastián, en 2017 para aportar dos brazos más al lanzamiento del nuevo producto.
Los tres recuerdan con particular alegría el momento en que eligieron el nombre que hoy es su marca: Tratenfú, fue idea de José, quien sentado en la mesa de la escribanía donde firmaban los papeles para el nuevo producto, se le ocurrió el nombre que resume aquello que los une, el trabajo, el tenis y el fútbol. En ese orden, ya que ahora son empresarios, no estudiantes.
Así como cambió el orden de sus intereses también lo hicieron las emociones que acompañaron el crecimiento. En la etapa inicia de Tratenfú Sebastián confiesa que sentía una mezcla de ansiedad y alegría "por lograr lanzar algo que llevó mucho tiempo y esfuerzo armarlo, arrancamos de cero aportando nuestros ahorros y apostando todo a este proyecto. Hoy en estos días ver nuestros productos en la góndola me llena de satisfacción".
José también sucumbió a la ansiedad inicial pero hoy está feliz y sobre todo siente mucha gratitud por las respuestas de los clientes.
Santiago reconoce que dar el paso de salir de la zona de confort de su empleo bajo dependencia le generó bastante miedo. Pero hoy confluyen en él sentimientos encontrados de alegría, esperanza y ansiedad: "Trabajar en tu propia empresa implica mucha responsabilidad así como también ser flexible a los cambios del contexto y, por suerte, somos un equipo que demostró estar bien preparado para esto".
En ese sentido, otra de las preguntas que les suelen hacer es ¿Por qué en el contexto de crisis que atraviesa la economía argentina se deciden a seguir apostando, a lanzar un producto nuevo? ¿Son optimistas o intrépidos?
Santiago responde: "La verdad es que el contexto no ayuda, nuestros insumos son en dólares, el tetra, la almendra todo es en dólar. Se hace cuesta arriba. Uno con el afán de seguir creciendo vende y cobra a los 60 días y no sabe con qué tipo de cambio se va a encontrar. Nos pasamos el año pasado que estábamos en pleno lanzamiento y del dólar paso de $20 a $30 y después a $40 (al momento de redactar esta nota ya está en $47). De todos modos nosotros seguimos apostando a la producción. Hoy como está el contexto o vas a la parte productiva o a la parte financiera. Tal vez hacés un plazo fijo y te da más plata que producir. Pero nosotros apostamos a seguir creciendo en productos, apostamos a la empresa a que la crisis va a pasar No conocemos otra realidad. Por ahí si viniéramos de otro palo, del mundo financiero… pero nosotros somos del mundo de los fierros, de laburar. A veces hablo con gente que me dice estas totalmente equivocado pare para nosotros es el único rumbo que hay.".
Conclusión: definitivamente estos empresarios, además de jóvenes, amigos e innovadores son optimistas, posiblemente de aquellos que idealizó Joseph Schumpeter, de los que se necesitan para sacar adelante un país.
Los consejos de Santiago, Sebastián y José para emprender
- Siempre es buen momento para emprender. El país siempre tuvo crisis y ahí puede radicar la oportunidad que están buscando.
- Hay que creer en la idea que tengan y llevarla adelante.
- Es fundamental conocer el mercado y las herramientas que cada uno tiene.
- Las cosas no se dan porque sí, primero hay que soñarlas y después ir atrás de ese sueño.
- Emprender implica mucho esfuerzo y dedicación.
Claves de un sueño cumplido
- Tratenfu, empresa argentina fabricante de bebidas vegetales.
- Hace un año fueron los primeros en lanzar "leche de almendra" en Tetrapak, presente en supermercados.
- Los próximos lanzamientos serán: blend almendra con coco y una bebida de nuez.
- En 2019 lanzaron una bebida vegetal con castaña de cajú.
- La innovación tecnológica guía la elaboración de los productos.
- Durante 2018 vendieron 550.000 litros.
- Proyectan facturar 70 millones de pesos en 2019.
- Todos los productos son libres de gluten y libres de lactosa.
- Cuentan con más 120 distribuidores en todo el país. Están presentes en Carrefour, Coto, Cencosud, Cooperativa Obrera y Libertad.
Más leídas de Lifestyle
“¡Qué mágico!” Descubrieron un antiguo bar abandonado en venta y decidieron abrir un “neo bodegón” que los llenó de sorpresas
¿Qué significa? “Mirá entre la T y la O en tu teclado”: el nuevo reto viral de las redes sociales explicado con memes
"Algo andaba mal". Empezó a trabajar en un hotel y renunció 27 minutos más tarde tras descubrir lo que hacían en las habitaciones