María Eugenia Vidal tiene una vestuarista de lujo: Juliana Awada

“El domingo a la noche es un momento en el que en general no trabajo y preparo la ropa para toda la semana. Le dedico media hora y armo las perchas para todos los días. Lo hago porque sé que tengo que estar más o menos presentable”. Así describe María Eugenia Vidal, en tono jocoso, su relación con la moda, en una charla íntima de mujeres que organizó LA NACION para celebrar el 8 de marzo .

Las preguntas durante la charla estuvieron a cargo Gail Scriven (Secretaria de Redacción), Juliana Varela (jefa de alianzas de Club LA NACION), Carolina Estevez (jefa de Procesos) y Teresa Elizalde (jefa del grupo de revistas de LA NACION). Más tarde hubo espacio para que las personas presentes consulten a la gobernadora.

Vidal es pragmática y lo reconoce."Me levanto muy temprano y no quiero pensar en la ropa. Muchas veces le pregunto a gente que sabe, en algunas ocasiones lo llamo a Fabián Medina Flores y me ayuda a cumplir con las reglas de protocolo, y también a Juliana [Awada] que sabe un montón", dice.

La gobernadora señala a su madre como su crítica más rigurosa: "A veces me ve en la tele y me llama por teléfono para preguntarme por qué me puse eso". Sus hijas Camila (15) y María José (13), en cambio, y a pesar de estar en la preadolescencia, son más condescendientes con la cuestión estilística de su mamá: "No es que todo el tiempo me dicen qué bien que estoy pero tampoco me dicen que soy un desastre".

Más allá del poco interés que le despierta ir de compras, cuenta que es uno de los planes, además de ver series, que comparte con sus hijas. Eso sí le entusiasma. "No me divierte ir de shopping. Al cuarto negocio que entré me aburrí. Me gusta más ir a comprarle a mis hijas; hace dos semanas la acompañé a Camila que está empezando a tener sus primeras fiestas de quince", cuenta, y concluye: "Tengo un vínculo bastante despojado con la moda. Si más o menos pasé el examen de verme en el espejo y me pareció que estaba bien, ya está".

La política y la pareja

María Eugenia Vidal comparte su vida con Ramiro Tagliaferro desde hace 18 años y con él tuvo a sus tres hijos: Camila (15), María José (13) y Pedro (8).

Cuando habla de su vida personal la define como "sencilla" o "la de cualquiera" y dice que dedica su escaso tiempo libre a su familia y sus hijos: "Voy a comer a los de mis padres o con mis amigas".

Sobre la relación con su marido, el actual intendente de Morón, confiesa: “Es difícil el tiempo que la gestión nos insume a los dos. Nos cuesta mucho acompañarnos. Él tiene una agenda de mucho trabajo y es difícil porque yo también estoy muy dedicada a lo que hago. Los dos somos personas muy comprometidas con lo que hacemos y hay muy poco tiempo. Un intendente, si realmente está comprometido con su gobierno, está 24 horas con el teléfono abierto”.