Piden la detención de Schiavi por los trenes

El fiscal federal Federico Delgado pidió ayer la detención del ex secretario de Transporte Juan Pablo Schiavi en el marco de la causa que investiga la compra de trenes con sobreprecios a España y Portugal durante el gobierno de Néstor Kirchner.

Delgado hizo ayer una presentación en la que solicitó que Schiavi y su antecesor en el cargo Ricardo Jaime fueran procesados "con prisión preventiva" por el juez Julián Ercolini, que ya los indagó y ahora debe resolver las situaciones procesales de ambos. Lo mismo pidió Delgado para Manuel Vázquez, un hombre cercano a Jaime que ofició de intermediario en la compra de los trenes.

Jaime y Vázquez ya están presos en la cárcel de Ezeiza por orden de Ercolini, que la semana pasada rechazó un pedido de excarcelación de Jaime. Schiavi está en libertad.

En su presentación, Delgado solicitó que los tres fueran procesados por los mismos delitos: cohecho (soborno) y peculado, una figura que castiga "al funcionario público que sustrae caudales o efectos cuya administración, percepción o custodia le hubiera sido confiada por razón de su cargo".

El cohecho y el peculado son dos delitos que tienen prevista una alta pena, un máximo de diez años de prisión.

"En esta causa, los imputados, cada uno dentro de su función, desviaron enormes sumas de dinero que estaban destinadas a un fin noble: recuperar el patrimonio ferroviario argentino", afirmó el fiscal, que recordó que las compras se hicieron dentro del "plan de emergencia ferroviaria".

Delgado agregó: "¿Y cómo lo hicieron? A través de un pacto ilegal, mediante el que decidieron comprar chatarra como si fuera buena y facturar sumas exorbitantes a empresas amigas en conceptos de «asesoramiento técnico» que, en realidad, ocultaban sobornos."

Para el fiscal, no hay dudas de que además de ser procesados, Jaime, Vázquez y Schiavi deben esperar su eventual condena detenidos. Según Delgado, en libertad podrían "obstaculizar la aplicación de una sanción".

En el caso de Schiavi, el fiscal recordó que registra una condena a ocho años de prisión por su responsabilidad en la tragedia de Once. "Esos ocho años y la chance concreta de que sea condenado en esta causa por delitos graves como el cohecho y el peculado, cuya pena máxima asciende a 10 años de prisión, forman un cuadro objetivo que justifica la prisión preventiva para asegurar su comparecencia al eventual juicio oral", afirmó Delgado. Ahora, será el juez el que decida.