Quiénes son los diputados y senadores que pasaron 991 días en el exterior

Durante 2018, 66 diputados y 33 senadores viajaron al exterior en 182 misiones oficiales con viáticos costeados, en su mayoría, por el Estado. En total, los 99 parlamentarios argentinos pasaron 991 días fuera del país y gastaron 134.951 dólares y 27.660 euros. Los destinos más elegidos fueron los Estados Unidos, Panamá, Suiza y Francia.

Así surge de las planillas publicadas por la Cámara de Diputados y el Senado y analizadas por LA NACIÓN Data, en las que queda claro que la distribución de viajes y gastos tuvo muchos beneficiarios pero también grandes protagonistas. Con 74 días fuera del país, la senadora que más viajó fue Lucila Crexell, del Movimiento Popular Neuquino. En Diputados, el récord lo consiguió Fernando Iglesias (Pro), con 42 días en el exterior.

Iglesias lideró también el ranking de gastos en la Cámara baja, ya que consumió viáticos por 5195 dólares para alojamiento, comidas y traslados. Con 9170 dólares, Crexell arañó la punta en el Senado, superada por Federico Pinedo (Pro), que pasó 26 días fuera del país (48 menos que la neuquina) pero gastó viáticos públicos por 9568 dólares.

Desde el entorno del presidente provisional del Senado indicaron a LA NACIÓN que un viaje autorizado de siete días fue mal registrado en las planillas como de tres días, con lo cual Pinedo estuvo en realidad un mes fuera del país.

Puestos en fila, los senadores que más días estuvieron en el exterior fueron Crexell, con 74 días; Ángel Rozas (UCR-Chaco), con 50; Rodolfo Urtubey (PJ-Salta), con 33; Silvia del Rosario Giacoppo (UCR-Jujuy), con 31; Pinedo, con 30 (26 según las planillas oficiales); y los peronistas Juan Carlos Romero (Salta) y Mario Pais (Chubut), ambos con 24.

En Diputados, detrás de los 42 días en el exterior del ultramacrista Iglesias se ubica la ultrakirchnerista Mayra Mendoza (Buenos Aires), con 29 jornadas fuera del país; seguidos por el jefe del bloque de Pro, Nicolás Massot (Córdoba) y el massista Marco Lavagna (Buenos Aires), ambos con 21 días. Con 18 jornadas en misiones oficiales, cierran el club de los diputados más viajeros la jefa de la bancada massista, Graciela Camaño (Buenos Aires) y el kirchnerista Horacio Pietragalla (Buenos Aires). En la Cámara baja, no hubo grieta a la hora de viajar.

La defensa de la diplomacia parlamentaria

LA NACIÓN consultó a los legisladores que más viajaron y se encontró con varias constantes: por un lado, una férrea defensa del trabajo realizado en el exterior, con actividades detalladas que fueron más allá de los foros y reuniones oficiales y que incluyeron la coordinación con los lineamientos diplomáticos que fija la Cancillería, a través del ministro Carlos Cherniak, director de Asuntos Parlamentarios.

"En todos los casos, la Cancillería se pone a disposición de los legisladores para ofrecer información sobre la relación bilateral con el país que visitan. Existen una relación virtuosa y un circuito aceitado de intercambio con el Congreso", expresaron fuentes del ministerio a cargo de Jorge Faurie.

Por otro lado, los legisladores indicaron que no sólo pagaron de su bolsillo parte de esos gastos en misiones oficiales, sino que el resultado de lo trabajado se volcó en los proyectos presentados en el Congreso.

Finalmente, la mayoría coincidió en destacar que tuvo asistencia perfecta o casi perfecta a las sesiones. El dato puede confirmarse en la web del Congreso, aunque se ve opacado por una realidad: 2018 pasó a la historia por ser el año con menos leyes aprobadas desde 1983: apenas 36. No hubo mucho que perderse estando fuera del país.

Los senadores que más viajaron

"Soy consciente de las críticas, porque es el segundo año que aparezco entre quienes más viajan, y me parecen injustas, porque estoy entre las senadoras con más intervención en comisiones y más proyectos de ley. Pero defiendo la diplomacia parlamentaria porque el posicionamiento de la Argentina en el mundo requiere un trabajo de continuidad", le dijo Crexell a LA NACIÓN, para luego ofrecer un informe detallado de los foros y comisiones en el exterior en los que participan ella y sus pares del Senado, así como los proyectos de ley que surgieron de esos encuentros.

Crexell también justificó el segundo récord que ostenta: el viaje más largo, de 23 días continuados fuera del país. Confirmó que participó en la Reunión de Parlamentarios de la OCDE, en Francia, y luego de la Asamblea de la Unión Interparlamentaria, en Suiza, pero agregó que su estadía se prolongó por un seminario que dirige Francis Fukuyama, del que es becaria desde 2017, con gastos que pagó por su cuenta. También dijo haber pagado el viaje de ocho días de la misión oficial a Islandia, para el Foro Mundial de Mujeres Líderes. Sus destinos en 2018 incluyeron, además, Inglaterra e Irlanda, Emiratos Árabes, México y los Estados Unidos.

Los 50 días de Rozas se repartieron en dos viajes a Suiza y una visita a Panamá, los Estados Unidos, Austria y Marruecos. "El senador es miembro de la Unión Inteparlamentaria y la Asamblea Euro-Latinoamericana, que tienen dos reuniones cada una por año. Al igual que sus pares, cada vez que viaja al exterior lleva la postura argentina sobre la soberanía en los mares del sur o el cambio climático, por dar un ejemplo, del mismo modo que en esas reuniones se trabaja para armonizar la legislación argentina con el mundo", indicaron en su entorno, en línea con lo sostenido por Crexell.

Los diputados con más presencia en el exterior

Con 42 días de afuera, Iglesias destacó que es director de la campaña para crear una Corte Penal Latinoamericana contra el Crimen Organizado (Copla) y presidente del Movimiento Federalista Mundial y que la mayoría de sus viajes están relacionados con esas tareas.

"De los cinco viajes oficiales que realicé, la Cámara pagó solamente dos pasajes. Uno lo pagué de mi bolsillo y los otros dos fueron invitaciones como las que recibo permanentemente. No solamente no gasté por encima de lo razonable, sino que por lo contrario utilicé mi dinero y mis contactos para realizar actividades relacionadas con mi trabajo como diputado", expresó. Por las misiones oficiales se le otorgaron a Iglesias US$5195 en concepto de viáticos.

Iglesias viajó a los Estados Unidos, Uruguay, Italia, España, Austria, Suiza, Hungría y Bélgica. "Yo viajo desde hace 20 años. Cualquiera que vea mi pasaporte sabe que es el ritmo habitual que yo tengo siempre. Viví diez años en Europa y en las ciudades en las que estuve ya había estado más de tres veces anteriormente, de manera que en las únicas actividades que pude haber hecho algún tipo de paseo las hice los fines de semana", explicó.

Agregó que su actividad como legislador no se vio afectada: "Tengo 100% de presencia en las sesiones o 99 y pico por ciento, porque en una de las 106 votaciones nominales fui al baño. También participo en once comisiones, el doble de la media de la Cámara".

Mayra Mendoza, con 29 días en el exterior, visitó Cuba, Rusia e Islandia. Para estos viajes se le autorizaron viáticos por US$3573. En su despacho rechazaron responder a la consulta de LA NACIÓN.

Nicolás Massot, jefe del bloque legislativo Pro estuvo 21 días en el extranjero y sus destinos fueron los Estados Unidos, Marruecos, Túnez, Francia, Ghana y Costa de Marfil. En relación al interés por viajar a países africanos (que visitó durante un año como mochilero antes de dedicarse a la política), argumentó que participa en el Plan Estratégico de Cooperación con África para profundizar los vínculos con esos países para futuras oportunidades.

Dijo que en el primero de sus viajes integró la comitiva del canciller Jorge Faurie y en el segundo acompañó una iniciativa privada para para desarrollar estudios de factibilidad sobre tecnología argentina aplicada al maíz y la soja.

"Nos parecía importante acompañar por las consideraciones respecto de posibles tratados de libre comercio para la importación de esa tecnología, y sobre todo para no concebir a la Argentina solamente como exportadora de alimentos a África, sino también como exportadora de tecnología. Esos tratados tienen que pasar por el Congreso", explicó Massot.

Cobró viáticos por US$4767. "Suele ocurrir que los legisladores aportan dinero propio para costear cuestiones que no están contempladas. Por ahí uno recibe viáticos como corresponde para un estándar de hoteles de 3 o 4 estrellas y si uno quiere ir a un hotel mejor lo lógico es que lo costee cada uno", completó.