Traspié oficialista: se demorará el inicio del debate de la reforma laboral en el Senado
El proyecto no ingresaría hasta que no esté firmado por Milei, que viajó a Noruega por el Nobel de María Corina Machado; eso obligaría a postergar el tratamiento en comisión
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El ímpetu oficialista para acelerar el tratamiento de la reforma laboral sufrió un primer contratiempo como consecuencia de la demora del Poder Ejecutivo en enviar el proyecto de ley al Senado. Según fuentes libertarias, eso se debe a que le falta la firma del presidente Javier Milei, que viajó a Noruega para participar de la ceremonia de la entrega del premio Nobel de la Paz a la venezolana María Corina Machado.
La información fue reafirmada por la jefa de la bancada oficialista de la Cámara alta, Patricia Bullrich, en un breve contacto que mantuvo con LA NACION.
“Todavía no se conformaron las comisiones porque no está el proyecto. El atraso del [envío del] proyecto me atrasó todo”, explicó Bullrich.
A priori, la jefa de bloque de La Libertad Avanza (LLA) no descartó la posibilidad de que, al menos, pudiera constituirse la Comisión de Trabajo en las próximas horas, pero parece difícil que el proyecto pueda comenzar a discutirse antes de la semana próxima.
La demora del tratamiento del proyecto de reforma laboral se conversó también en una reunión que Bullrich mantuvo con la presidenta la Cámara alta, Victoria Villarruel.
En un encuentro que se desarrolló en buenos términos, según confiaron voceros legislativos, la senadora terminó reconociéndole a la vicepresidenta sus inconvenientes para avanzar con un trámite exprés ante la demora del Poder Ejecutivo en enviar el texto de la iniciativa.
Como corolario de la reunión, Villarruel se comprometió a convocar a una reunión de jefes de bloque para el martes de la semana próxima, en la que se terminará de definir la conformación de las comisiones.
Se espera que para esa fecha ya estén conformados los diferentes bloques e interbloques en que quedará dividido el Senado y que permitirá calcular el reparto proporcional de lugares en cada uno de los cuerpos de trabajo legislativo.
Las modificaciones están a la orden del día. Por ejemplo, esta mañana Luis Juez comunicó que abandona Pro y que conformará un monobloque con el rótulo de Frente Cívico, nombre de su fuerza política en Córdoba.
El cordobés le confirmó a LA NACION que se integrara en un interbloque con La Libertad Avanza, lo que le permitirá al oficialismo ascender a 21 integrantes y poder tallar con un poco más de peso a la hora de definirse la integración de las comisiones.
Con la salida de Juez, la bancada de Pro que conduce Martín Goerling (Misiones) cae a tan sólo tres integrantes. La semana pasada ya había sufrido la baja de la tucumana Beatriz Ávila, que conformó un monobloque denominado Independencia y referenciado en el gobernador de su provincia, el peronista Osvaldo Jaldo.
Nueva cumbre
Villarruel y Bullrich volvieron a encontrarse luego de la polémica que protagonizaron el pasado 28 de noviembre, cuando la vicepresidenta no le cedió la palabra a la legisladora oficialista en el final de la sesión en la que juraron los nuevos senadores.
Según coincidieron voceros de ambas dirigentes, la reunión se desarrolló en términos cordiales y sirvió para avanzar en la definición de temas formales relacionados con el funcionamiento y la organización de la Cámara y del bloque libertario.
Siempre de acuerdo a esas fuentes, la jefa del bloque oficialista del Senado le pidió a Villarruel un despacho para Enzo Fullone, quien reemplazará a Lorena Villaverde como representante libertario por Río Negro.
Villaverde fue electa senadora como cabeza de lista de LLA en la provincia patagónica, pero el Senado se opuso a aprobarle su diploma por los antecedentes penales, uno de ellos vinculado al narcotráfico. Por esta razón, la todavía diputada nacional renunció la semana pasada a asumir su escaño en la Cámara alta.
Villarruel se excusó de cumplir con lo solicitado por Bullrich, le recordó que Fullone todavía no juró como senador −seguramente lo hará en la próxima sesión−, y que, por lo tanto, no podía asignarle un despacho hasta que no tome posesión de la banca de manera oficial.


