Asaltan a uno de los Pumas en su casa de Beccar

Recién llegado de Italia, el jugador de rugby de Los Pumas Manuel Contepomi y su esposa, embarazada de tres meses, fueron asaltados en su casa de Becar por cuatro delincuentes que los ataron con corbatas y se llevaron más de 6000 dólares y un reloj que le habían entregado al deportista por su participación en el Mundial de Rugby.

"Caés en la realidad de este maldito país y tenés que agradecer y decir: «Estamos vivos». Lo material pasa a un segundo plano", dijo el rugbier tras el asalto en su sencilla casa, situada en la calle Guido al 2900. A pesar de ello, Contepomi dijo que no se irá del país.

El robo ocurrió poco después de la medianoche, cuando el Puma llegaba a su casa con su esposa, Clara Okecki, de 27 años. El matrimonio ingresó con su Peugeot 307 en la cochera de su vivienda y cuando el rugbier estaba cerrando el portón lo amenazaron dos delincuentes armados para que les abriera y los dejara entrar. Luego lo hicieron otros dos. Amedrentaron al deportista y a su esposa, embarazada de tres meses y medio, pero no los golpearon.

Contepomi explicó que durante los 20 minutos que los ladrones estuvieron en el interior de su casa le pidieron "plata y oro" y que él les aseguró que sólo había un poco de dinero. Así encontraron y se llevaron unos 6000 dólares, 500 pesos, el reloj que le habían entregado en el Mundial de Francia, joyas, y electrodomésticos.

Revisaron los placards del matrimonio. El de la esposa rápidamente lo descartaron, pero del de Manuel se llevaron zapatillas, remeras y pantalones.

Por último los ataron con corbatas y los encerraron en un baño, mientras uno bromeaba y le gritaba al rugbier: "¡Che, Puma!". No obstante, las víctimas dijeron que habían recibido un trato "relativamente bueno".

El jugador recordó que en un momento los delincuentes dudaban sobre llevarse cautivo al matrimonio, por lo que les pidió que en ese caso se lo llevaran a él, ya que su esposa está embarazada

"Estos pibes piensan que por jugar en los Pumas somos millonarios, nada más lejos de eso. Me decían: «Quiero plata y oro», y yo les decía: «Mirá, me acabo de mudar, llevate todo lo que quieras, pero plata no hay y oro, menos»", explicó.

"El más lógico, si se lo puede llamar de esa manera, me dijo: «Mirá que si llego a encontrar oro y vos me estás mintiendo, yo te mato». Yo le dije: «No vas a encontrar nada, así que no te preocupes»", dijo el jugador.

El rugbier describió que tres de los delincuentes tenían entre 17 y 20 años y el cuarto, entre 30 y 40, y precisó que sólo a dos de ellos vio armados. Al liberarse, las víctimas llamaron al 911, por lo que llegaron a la vivienda efectivos de la subcomisaría La Cava, con jurisdicción en esa zona de Beccar.

"Es triste, pero caés en la realidad de este maldito país, en cuanto a seguridad, y tenés que decir «por suerte estamos vivos»", reflexionó.

Al ser consultado por la prensa acerca de si a raíz de este episodio duda de volver a vivir en el país, Contepomi afirmó: "No, para nada. Es mi país, acá tengo toda mi familia, todos mis afectos".

"Lamentablemente, vivimos en un país en el que creo que todos estamos luchando para tratar de sacarlo adelante con todo el tema de la seguridad y ninguno está exento de vivir estas cosas", consideró.

"Hoy me tocó a mí y la saqué barata, pero no por esto voy a cambiar el lugar donde vivo", concluyó.

El hermano de Manuel, Felipe, vive en Europa y juega en un equipo de Irlanda.

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