Coronavirus: aseguran que se restableció el servicio de agua en el 95% de la Villa 31
A casi 10 días de que comenzaran los problemas con el suministro de agua en la Villa 31, una de las zonas más afectadas por el coronavirus Covid-19 en la Ciudad de Buenos Aires, el problema se solucionó en el 95% del barrio de emergencia.
"Al agua volvió en su forma habitual el domingo. Cuando no había agua atendíamos un promedio de 8 mil vecinos, con 600 llamados por día. Hoy atendimos a 22 llamados. Hay entre 50 y 55 hogares afectados de los 11500. Ya se recuperó la presión normal", dijo a LA NACION, Diego Fernández, Secretario de Integración Social y Urbana de la ciudad de Buenos Aires.
El funcionario remarcó que "el grueso" del barrio ya recuperó el suministro que se vio afectado desde el 25 de abril pasado. En un principio, por un desperfecto en la planta potabilizadora San Martín de Agua y Saneamientos Argentinos (Aysa).
Ante la consulta sobre si el desperfecto que llevó a que se cortara el suministro podría haber ayudado al crecimiento exponencial de casos de coronavirus Covid-19 dentro del barrio, que ya tiene más de 130 casos confirmados y al menos una muerte, Fernández respondió: "Hubo faltante de agua, pero también hubo provisión del gobierno. No dejamos a la gente sin agua, sino que, a veces, tuvo que esperar. De los casi 8000 vecinos a los que les acercamos agua durante esos ocho días, el promedio de respuesta fue de seis horas. Lo que dicen los expertos médicos es que la proliferación del virus se debió a la cercanía o contacto entre convivientes en esta semana".
En tanto, desde Aysa explicaron que el problema de suministro, en lo que respecta a su función, la presión en las tres bocas de entrada a la Villa 31 se reestableció el lunes 27 a la noche.
"Nosotros tuvimos la rotura de un caño maestro el sábado 25 de abril en la sala de máquinas de bombas y se inundó todo. Viramos el sistema para restablecer la presión habitual a través de otras plantas que tenemos en la Ciudad de Buenos Aires", dijeron desde la empresa estatal dirigida por Malena Galmarini.
Ante la consulta del por qué de la diferencia de días entre que se solucionó el desperfecto en la planta de Palermo y la normalización del servicio en la Villa 31, dijeron que se trata de un problema de infraestructura interno.
"El problema histórico que tiene el barrio es que la parte interna de los caños no está terminada. Las obras no avanzaron al mismo ritmo de la cantidad de gente que fue viviendo dentro del barrio", dijeron, y agregaron: "El problema es que hay lugares que no están conectados a la red".
Sobre qué se hizo para abastecer el servicio durante las ocho jornadas, desde la Ciudad explicaron que se utilizó un esquema con camiones medianos adaptados para entrar al barrio y motos cisterna para los pasillos, para que el agua llegue a todas las familias.
Incluso, habilitaron una línea de WhatsApp para que los vecinos del Barrio 31 puedan solicitar el servicio de agua en caso de necesitarlo. En total se distribuyeron 288.000 litros de agua por día. También, 10 camiones cisternas por la mañana y otros cinco por tarde noche recorrieron el barrio. Además, se entregaron 10.000 sachets semanales para lugares que lo necesitaban.
Por otro lado, está previsto un encuentro entre los equipos técnicos de Aysa y el ministerio de Obras Públicas porteñas para ver si pueden, en conjunto, terminar con las obras de red interna para terminar con el faltante de agua en el barrio, que volvió a quedar en el centro de la escena por la pandemia.
Retomarán las obras claves para mejorar el servicio
Pasadas las 18, Aysa y el Gobier porteño anunciaron que, tras la reunión en la sede de la empresa de agua, se comprometió a comenzar mañana las obras pendientes para brindar agua potable a la Villa 31 Barrio.
Al finalizar el encuentro, Diego Fernández dijo: "Estuvimos trabajando con Malena Galmarini y la cúpula de Aysa y mañana mismo desde el gobierno de la ciudad comenzamos a hacer las conexiones que quedaban pendientes entre los caños troncales de la red de agua y los caños internos de la red de distribución del barrio. Esto va a poder mejorar la presión de agua y todo el sistema interno".
Por su parte, la presidenta de AySA agregó: "La conclusión es que mañana la Ciudad va a comenzar la obra y en 15 o 20 días vamos a estar conectando la primera etapa que les quedó inconclusa a causa del coronavirus. Como dije muchas veces, esta no es una obra que sea de un día para otro, mientras tanto vamos a garantizar que la gente siga teniendo agua a través de los camiones cisternas, de los sachets, vamos a ver si podemos llevar los bidones y colaborar para que tengan el agua en sus casas. Sin embargo, lo estructural es lo que hay que hacer para darles el pleno ejercicio de sus derechos".
En el mismo sentido, el Defensor del Pueblo de la Ciudad, Alejandro Amor, agregó: "Para nosotros es muy importante, entendamos que para Naciones Unidas el agua es un derecho humano y la conclusión más clara que dieron Malena y Diego es que mañana a nadie le va a faltar el agua, la provisión se va a hacer y comienzan las obras que se pararon antes por las circunstancias que conocemos y tiene diferentes etapas. Lo importante es que a nadie le falte agua. Lo estructural irremediablemente lleva tiempo pero se va a hacer y parte del Barrio Mujica va a estar conectado a esas conexiones que no se pudieron hacer antes".