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Dicen que bajó la venta ilegal en Warnes
El comercio de repuestos robados disminuyó un 50 por ciento, según el Gobierno
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Según informó la Secretaría de Seguridad Interior de la Nación, desde julio último, cuando comenzaron los operativos permanentes de control en la avenida Warnes, situada en la zona de los barrios de Paternal y Villa Crespo, se redujo más del 50 por ciento el desarme de vehículos robados y la venta de sus autopartes.
El secretario ejecutivo del Consejo de Seguridad, Ignacio Rodríguez Varela, dijo a LA NACION que desde que comenzaron los procedimientos se cerraron más de 30 locales en la avenida Warnes.
Menos robos de automotores
El funcionario añadió que en similitud con la reducción en la venta de repuestos ilegales, también hubo, durante el mismo período, una disminución del 50 por ciento en los robos de automóviles.
"Los controles tuvieron un muy buen resultado. Se han cerrado los focos de venta de repuestos robados. La continuidad de los procedimientos tuvo un fuerte impacto", agregó Rodríguez Varela.
Ayer, encabezado por el subsecretarío de Seguridad y Protección Civil, José María Campagnoli, y Rodríguez Varela, se realizó un nuevo operativo en la avenida Warnes. En los procedimientos de control participaron más de 50 efectivos de la División Asuntos Internos de la Policía Federal, 150 inspectores de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y funcionarios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
La medida, ordenada en julio último por el secretario de Seguridad Interior, Norberto Quantín, tuvo como fin controlar la actividad del sector dedicado a la venta de repuestos de autos y, según informaron fuentes oficiales, nueve comercios quedaron en situación de clausura permanente.
Rodríguez Varela explicó que distintos comercios que estaban bajo sospecha de vender repuestos de automotores de origen ilegal cerraron sus puertas.
Monitoreos constantes
"Se comprobó que los comercios que estaban en condiciones de ser clausurados no volvieron a abrir. Creemos que los controles permanentes ayudaron a que las personas que vendían mercadería de origen ilegal desistieran de continuar con esta actividad", afirmó Rodríguez Varela.
El funcionario agregó que la Secretaría de Seguridad Interior realiza monitoreos constantes para determinar si los comerciantes que tienen clausurados sus negocios en Warnes inauguran locales en otras zonas de la ciudad o del conurbano, pero, según explicó, hasta el momento no se constató que esto haya ocurrido.
Según dijo Rodríguez Varela, una vez por semana, los funcionarios de la Secretaría de Seguridad Interior, del Gobierno de la Ciudad, de la AFIP y efectivos de la Policía Federal se reúnen para analizar los operativos y para determinar en qué momento se realizarán los próximos allanamientos.
Para los funcionarios de la Secretaría de Seguridad Interior, el día clave del comienzo de los operativos de control fue el 26 de julio pasado, cuando por orden judicial allanaron un desarmadero clandestino en plena avenida Warnes, en la misma causa en la que se investigaba a la banda de secuestradores VIP.
