El polifacético Arturo Orgaz
CORDOBA. Arturo Orgaz era abogado cuando a los 26 años, en 1916, preside la Asociación Córdoba Libre (integrada también por Deodoro Roca) que funda la Universidad Popular, antecedentes de la reforma en la que también participaría activamente.
Para las investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Ana Agüero y María Victoria López, esa asociación puso "en primer plano una fracción de elite más intelectual-cultural que política o económica" que defiende la libertad de expresión, la expansión individual y el principio laico en una Córdoba, por entonces, de fuerte impronta católica.
En la Universidad Popular –que funcionaba en el edificio de la Escuela Alberdi- estudiantes y docentes compartían conocimientos con aquellos que no podían cursar estudios superiores. En esos años la UNC tenía mil alumnos.
Orgaz egresó del Colegio Nacional de Monserrat y se recibió, a los 23 años, de abogado en la Facultad de Derecho de la UNC; su tesis doctoral recibió medalla de oro. Durante casi 30 años (entre 1917 y 1946) fue docente de Introducción al Derecho y a las Ciencias Sociales en la universidad y de Instrucción Cívica en el que fuera su secundario.
Vecino del barrio Alberdi –vivía a pocas cuadras del Hospital Nacional de Clínicas, foco de la reforma- era amante del deporte y en 1894, a los 14 años, junto a otros amigos fundó el Club Atlético Belgrano.
"En esos tiempos, los fondos de la casa de la familia Lascano constituía el lugar de encuentro de los muchachos que pasaban las tardes jugando al ‘foot-ball’. El joven Arturo era vecino de la zona", recuerda en su web el club. En 1905 Orgaz jugó como "back derecho"; además de ser presidente del club ocupó –desde 1924- el mismo cargo en la Liga Cordobesa de Fútbol durante cinco períodos consecutivos.
El deporte no lo alejaba de la vida intelectual; a los 17 años escribió la obra de teatro "Uno de tantos" que se puso en escena en 1909 con gran éxito y en 1912 publicó el libro de poesía "Las barcas del ensueño" y el ensayo "Las ideas sociales de Echeverría". Nunca dejó de escribir; publicó ensayos, escritos jurídicos y novelas.
Como funcionario judicial, al adherir a la reforma universitaria, fue amonestado por el Superior Tribunal de Justicia. Renunció inmediatamente a su cargo y afirmó: "He recibido la sorpresa de conocer mi delito: es que pienso libremente y defiendo la justicia".
Aunque primero fue marte de una fracción disidente de la Unión Cívica Radical; en la década del ’30 militó activamente en el Partido Socialista, fuerza por la que fue senador provincial entre 1932 y 1935. En 1946 y 1951 fue candidato a gobernador y acompañó como postulante a vicepresidente a Nicolás Repetto; fueron derrotados por los conservadores.
En 1946 se quedó sin cátedras por su militancia en el anti peronismo por lo que también fue detenido –junto a otros opositores- en 1953 en la Penitenciaría Nacional de la Capital Federal. Murió el 16 de agosto de 1955, en Córdoba.
Los estudiantes reformistas fueron quienes, durante 20 cuadras, llevaron a pulso su féretro. El escritor Arturo Capdevila le dedicó una poesía. "Varón cabal de la mirada pura, de redentoras causas peregrino. ¡Que miel del corazón das en tu vino, hermano dulce de sin par dulzura!", comienza.