"Estamos seguros de que va a volver", dijo la mamá de Sofía

Giuliana es el nombre que eligió Sofía Herrera para nombrar a su futura hermanita y Giuliana es el nombre con que los padres de la niña desparecida hace cuatro meses en Río Grande bautizaron a su nueva hija, que nació el viernes último, en la misma clínica que su hermana mayor.

La llegada de la beba mitiga por momentos la incertidumbre por la falta de datos sobre el paradero de Sofía, pero al minuto siguiente la alegría por la nueva integrante se empaña con tanto dolor.

María Elena Delgado abandonó esta mañana la clínica Cemep de la ciudad fueguina, la misma en la que el 30 de diciembre de 2003 nacía Sofía. El viernes último le practicaron una cesárea para hacer nacer antes de tiempo a la beba, porque ya tenía un tamaño considerable, según comentó la mamá.

Con la alegría oscurecida, María Elena relató a lanacion.com que Sofía estaba muy contenta con la noticia de su embarazo y fantaseaba con el arribo del nuevo miembro de la familia. Cuando desapareció, su madre llevaba varios meses de gestación.

"Ella estaba muy entusiasmada con la llegada de su hermanito. Decía que el bebe iba a ser de ella, que lo iba a cambiar, a dar la teta, todo. Y cuando estaba enojada, decía que no lo quería y que lo iba a dejar afuera", recordó.

Los nueve meses de embarazo no fueron fáciles para María Elena. Apenas entrada en el tercer trimestre, recibió la peor noticia: su pequeña hija, que en diciembre cumplió cuatro años, desapareció casi frente a sus ojos.

"La pasé terrible. Estos cuatro meses de ausencia de Sofía fueron muy tristes. No se cómo llegó a término el embarazo. A veces no me daba ni cuenta que estaba embarazada", narró.

A pesar del dolor, María Elena trajo al mundo a su segunda hija y la llamó como había pedido Sofía. "Cuando desapareció, no sabíamos si era varón o nena. Ella quería que se llame Giuliana, si era mujer, y Mateo, si era varón", rememoró y aseguró que la nueva beba se parece mucho a su hermana mayor. "Salieron al padre", bromeó.

Sofía Herrera, que cumplió 4 años, desapareció el 28 de septiembre cuando junto a sus padres y un matrimonio amigo se encontraba en el camping John Goodall, en las afueras de Río Grande. Y aunque desde ese momento se lleva adelante un fuerte operativo de búsqueda, todavía no existen pruebas concretas del paradero de la niña.

"Estamos contentos por la llegada de la beba y a la vez tristes porque no tenemos noticias de Sofía. Es desesperante. Hace cuatro meses que estamos en esta situación, pero tenemos que seguir adelante porque ella nos necesita. Hay que buscarla y encontrarla. No es fácil, pero hay que seguir. Estamos seguros que va a volver.", señaló María Elena

Además, declaró que el juez Eduardo López les adelantó que los investigadores del FBI que siguieron el caso Maddie leyeron el material que se les envió y ahora deben decidir si trabajan en el caso.

También habló sobre su relación con las Madres del Dolor y agradeció la colaboración del abogado de la asociación, Claudio Mazaira, que viajó a Tierra del Fuego para interiorizarse sobre el caso, y de Vivian Perrone, su titular, que ayer se comunicó telefónicamente con la familia.