Mar del Plata no tendrá nuevo basurero

MAR DEL PLATA.- Un fallo judicial prohibió a la comuna la habilitación de un nuevo predio de disposición final de residuos, con lo que el servicio en esta ciudad puede entrar en situación de virtual colapso.

La demanda había sido presentada por vecinos de los barrios Valle y Parque Hermoso, de la zona sur, que se sentían perjudicados por la cercanía existente entre sus viviendas y los lotes elegidos como anexos para la descarga de desechos urbanos.

Ahora, el mayor problema ha quedado en manos de la intendencia: no sólo tiene saturado el actual predio, sino que se ha quedado sin la única alternativa que tenía disponible, un conjunto de parcelas situadas a la altura del kilómetro 10,5 del denominado camino viejo a Miramar.

"La Justicia optó por obligarnos a seguir enterrando basura en un predio que ya está agotado. Y sólo nos queda acatar la resolución", afirmó el intendente, Elio Aprile.

El mandatario comunal adelantó que la asesoría letrada de la municipalidad continuará el proceso con una apelación ante la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires.

La disposición final de residuos se realiza actualmente en tierras pertenecientes a la empresa Imepho.

Desde el año pasado se había advertido que la capacidad del predio quedaría saturada en julio último.

Aun así, y ante inconvenientes surgidos en la elección de parcelas auxiliares, allí todavía se continúa efectuando relleno sanitario con las 600 toneladas de basura que genera diariamente la población marplatense, con un promedio a razón de un kilo por habitante.

Vivir entre desechos

En ese lugar se suma un problema extra: unas 300 familias formaron un asentamiento en medio del basural y sobreviven con alimentos que rescatan entre las montañas de residuos.

La comuna lleva más de dos años buscando un nuevo predio. "Todos los intentos que hizo la municipalidad están en proceso judicial", admitió Aprile, al recordar dos licitaciones frustradas y ahora este fallo adverso que rechaza la situación de las tierras que directamente había adquirido el municipio para atender esa situación de emergencia.

Durante ese período, los vecinos del Sur encabezaron una tenaz lucha para evitar que la basura se siga volcando en esa zona de la ciudad.

"Las tierras elegidas por la comuna no sólo siempre miran hacia nuestros barrios, sino que se sitúan muy cerca de áreas urbanas, con el riesgo que esto implica para quienes allí viven", remarcó Margarita Pérez, directora de la escuela Nº 44, que cuenta con una matrícula de 308 alumnos y que funciona muy cerca del predio elegido.

"No nos oponemos porque sí, sino porque a nadie le gusta tener un basurero a cuatro cuadras de la casa", resumió el vecino Juan Carlos García, tras escuchar en los tribunales locales el fallo favorable.

La gente de los barrios perjudicados insiste en que es necesario un diálogo con la municipalidad para alcanzar una situación de consenso y así destrabar el conflicto.

"Esperamos que el intendente nos convoque, escuche nuestras propuestas y evalúe algunas tierras aptas, y hasta incluso más baratas que las que había comprado la municipalidad", indicó García.

Varias opciones

Entre las opciones que maneja la comuna está un predio de la empresa Coarco para el que se ha solicitado el certificado de habilitación a la Secretaría de Política Ambiental de la provincia de Buenos Aires.

Ese permiso está trabado, puesto que en el pliego licitatorio se establecía que las tierras para la disposición final no podían estar a menos de 2500 metros de un centro urbano, y se encontrarían a 1900 metros de un complejo habitacional llamado Lomas del Golf.

Concejales de la oposición alientan la construcción de un predio regional que involucre a varios distritos de la zona.

Gustavo Pulti, de Acción Marplatense, no sólo se mostró partidario de esa alternativa, sino que asegura que hay avances concretos: "Desde el año pasado hay contactos con municipios vecinos para formar un consorcio regional para la disposición final de la basura", explicó.

El justicialismo también acompañaría una acción de esta naturaleza que implicaría separación y reciclado de residuos, además de una fuerte campaña de concientización comunitaria sobre el problema ambiental.

Si bien hay quienes sostienen que se trata de un mecanismo que demanda mayor inversión, Pulti toma otra escala de valores. "Más caro _aseguró_ es el riesgo de contaminación que implica el actual sistema de relleno sanitario."

Como ahora la comuna aparece obligada a seguir operando en el predio actual, el intendente también hizo su advertencia.

Aclaró que la responsabilidad del Estado por las futuras consecuencias "queda liberada", porque "es la Justicia la que ha dicho no" a la utilización de nuevas parcelas para disposición final de residuos.

Por Darío Palavecino

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