Reclusión perpetua para el nieto de Pepe Cantero
La justicia platense lo halló culpable del homicidio de su abuela, su padre y de la novia de éste
1 minuto de lectura'
LA PLATA.- El nieto del fallecido diseñador de calzados "Pepe" Cantero fue condenado hoy a reclusión perpetua por asesinar a su abuela, su padre y la novia de éste para robar 10 millones de dólares que, según una leyenda familiar, estaban enterrados en una quinta.
El Tribunal Oral en lo Criminal 4 (TOC4) de La Plata, integrado por los jueces Gloria Berzosa, Emir Caputo Tártara y Juan Carlos Bruni, dictó esta noche la sentencia: Cantero, de 22 años, y a su cómplice Gustavo Muñoz, de 35, fueron considerados coautores del "triple homicidio calificado por el vínculo y cometido con alevosía".
Según el fallo, los dos jóvenes asesinaron a tiros a Norma de Cantero, su hijo, Jorge Cantero, y la pareja de éste, Giselle Minod, mientras miraban televisión en un quincho de una quinta situada en la calle 20 de junio al 192, en el partido bonaerense de San Vicente.
El hecho ocurrió el 11 de enero de 2004 y, según se acreditó en el juicio oral, las víctimas fueron prácticamente fusiladas por los dos ahora condenados que pretendían apoderarse de la presunta suma millonaria que había enterrado en esa vivienda el famoso diseñador de calzado Pepe Cantero.
Desde un principio, los investigadores determinaron que quienes habían concretado el triple crimen debían ser conocidos de sus víctimas, ya que no se encontraron los accesos a la vivienda forzados ni tampoco reaccionaron los perros que se encontraban en el parque de la casa.
Es más, esos perros -cuatro doberman y un ovejero alemán- fueron encontrados encerrados en una habitación, algo que no era habitual, según contaron los vecinos a los investigadores que instruyeron la causa.
Esas circunstancias, fueron ratificadas en el transcurso del juicio oral las que, sumadas a la mecánica de las muertes, dieron el argumento para que los jueces del Tribunal coincidieran por unanimidad en que los homicidios se produjeron con alevosía.
Para el juez Emir Caputo Tártara, ambos imputados asesinaron primero a Jorge Cantero "porque se trataba de un sujeto adulto masculino que evidentemente entrañaba el mayor riesgo para los agresores y, luego, atacaron a las mujeres inmovilizándolas con disparos y rematándolas con certeros disparos en la nuca".
Es que según los peritajes, Cantero recibió un tiro en la cabeza, mientras que su madre y su pareja, primero fueron baleadas a la altura del tórax y el brazo, presuntamente por un intento de defensa que tuvieron las mujeres, y luego rematadas con un tiro en la cabeza cada una.
El magistrado tuvo en cuenta además el factor "sorpresa" del ataque, debido a que la presencia de Alex y su cómplice "no podía significar para la familia asesinada ningún toque de atención porque uno era hijo, nieto e hijastro de las infortunadas víctimas y el otro frecuentador de la casa".
"Mal podían los asesinados esperar agresión de ninguna especie porque la presencia de los autores en la casa no debía despertar sospecha alguna, y esto fue utilizado por los acusados para arteramente atacar a sus víctimas. Ha sido el ataque de una sorpresa absolutamente extraordinaria, impensado e insospechado", graficó.
Durante las audiencias, se desvirtuó también la coartada que en un principio habían presentado los imputados al presentar los boletos de micro que acreditaban que a la hora de los homicidios ellos dos estaban en un hipermercado de la localidad de Temperley.
El Tribunal tomó como válida la declaración del testigo Darío López, amigo de los condenados, quien declaró que a cambio de 25 pesos entregó los boletos a los acusados cuando en realidad en el shoping habían estado él y su novia.
La circunstancia de haber querido generar una coartada fue tomada también por el Tribunal como un elemento agravante para la calificación del hecho y la graduación de la pena, junto al uso de arma de fuego, la motivación económica, la modalidad de la ejecución y la premeditación del hecho.
"Cantero y Muñoz urdieron con antelación suficiente una macabra trama a los fines de asesinar al padre y su concubina, como así también a la abuela del primero, fingiendo un robo y homicidios, con la finalidad de obtener y quedarse con una importante suma de dinero que se encontraría enterrada en el predio", sostuvo Caputo Tártara en el fallo.
Además consignó que Cantero llevó adelante el plan para "apropiarse de la totalidad de la presunta suma de dinero" ya que su padre la había buscado en alguna oportunidad y, de haberla encontrado, le habría correspondido una parte pero no todo el dinero.
En el fallo, los jueces de Tribunal rechazaron también los pedidos de inimputabilidad presentados por las defensas de los acusados al basarse en pericias que los catalogaron como personas con parámetros de inteligencia e intelectualidad normales.
También precisaron que en el caso de Muñoz, se suma como agravante que al momento del hecho era mayor de edad y en lugar de calmar "las pasiones y ansiedades de su amigo menor, se puso a la par para consumar juntos el triple crimen".
Agencias DyN y Télam



