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Se oponen al bingo en la peatonal San Martín
Un decreto prohíbe su instalación cerca de iglesias o escuelas
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MAR DEL PLATA.- Habilitar o no habilitar un bingo en el corazón de la peatonal del balneario es el dilema que por estos días desvela a las autoridades comunales.
En cambio, los dueños del establecimiento no dudan: si se les impide abrir las puertas del establecimiento, cuya construcción está prácticamente finalizada, amenazan con acudir a la Justicia para obtener dicha autorización.
El conflicto se desató hace pocos días, ni bien Intermar Bingos SA, que también explota otros dos negocios de idénticas características en la ciudad, pidió la correspondiente habilitación municipal con el propósito de inaugurar el local que se levanta en San Martín al 2400, en vísperas de la próxima temporada estival.
La noticia llegó al Concejo Deliberante y se ganó el inmediato rechazo de los ediles: en una comunicación votada por unanimidad, le pidieron al intendente Elio Aprile que impidiera tal apertura.
Un decreto duhaldista
Según los legisladores, para cumplir esta misión el jefe comunal sólo tiene que "aplicar en un todo lo estipulado por el artículo 2 del decreto provincial 3656/99", firmado por Eduardo Duhalde cuando cumplía sus últimos minutos como gobernador bonaerense.
En el artículo se dispone que a partir de diciembre de 1999 "la apertura de las salas de juego conocidas como lotería familiar, lotería familiar gigante o bingo sólo será autorizada cuando mediare una distancia no inferior a los 300 metros, medidos de puerta a puerta, de los inmuebles en que funcionen instituciones culturales, educativas o religiosas".
Aunque nadie se tomó ese trabajo aún, en la misma manzana que el bingo en cuestión funcionan tres cines y teatros, a una cuadra y media hay una guardería y jardín de infantes del personal del Banco Provincia, y la catedral marplatense se levanta a tres cuadras del local elegido por Intermar SA.
"Es tan claro el decreto que no entiendo por qué se habla de conflicto. Ese bingo no puede funcionar allí porque no cumple con los requisitos elementales", afirmó Roberto Páez, edil radical.
"Además, estos locales se han desvirtuado, ya que tiene ruletas electrónicas y tragamonedas, prohibidas especialmente por nuestras ordenanzas", apuntó Diego García Conde, del Frepaso.
"Hoy no puedo decir si se abre o no, pero le anticipo que será respetada la normativa legal vigente a ultranza, a la hora de resolver sobre la habilitación de este bingo", adelantó a La Nación Francisco Bowden, secretario de Gobierno municipal.
Aunque el funcionario eludió anticipar la decisión oficial, en las inmediaciones de su despacho se augura que el trámite no prosperará.
Otros intereses
El doctor Gustavo Demarchi, apoderado de la compañía, no descarta otros intereses detrás de quienes nada quieren saber con un bingo en plena peatonal San Martín.
"Igual, no nos extraña esta oposición, ya que hace dos meses el gerente de Bolt le advirtió a uno de los nuestros que no íbamos a poder abrir", agregó. Bolt es la empresa que fabrica y explota las máquinas tragamonedas que se usan en el casino marplatense, competidor natural de Intermar Bingos SA.
"No hablo de cosas raras, pero es un comentario sugestivo, ¿no?", preguntó Demarchi. Con todo, para no sufrir sorpresas amargas, hoy, un agrimensor contratado por la compañía medirá la distancia que separa la catedral marplatense del controvertido bingo peatonal.
Por Oscar E. Balmaceda
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