El gigante de los semiconductores replantea su futuro más allá de los procesadores clásicos
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Los autos, los electrodomésticos, las máquinas, los sensores. Cada vez más dispositivos están conectados a Internet y generan toneladas de información. Las consultoras aseguran que justamente en los datos está la verdadera riqueza de una empresa, ¿pero de qué sirven estos datos si no se saben analizar ni utilizar? Justamente esto es lo que plantean desde Intel.
“Un coche conectado genera más de 4000 GB de información al día, mientras que una fábrica conectada más de un millón”, ejemplifica Lisa Davis, vicepresidenta del Grupo de Centro de Datos en Intel, durante la conferencia Intel Shift, evento que organizó la compañía en Nueva York, Estados Unidos.
En el pasado Intel basaba sus presentaciones en especificar los detalles técnicos de sus nuevos productos, pero hoy se concentran en explicar cómo conjugar la tecnología con las decisiones relacionadas con el área de negocios. “Lo principal es la estrategia de una empresa. Si no se sabe con certeza a dónde se quiere ir nunca se llegará”, aclara Davis.
Una de las principales tecnologías en la que se está focalizando Intel es la inteligencia artificial . “Ha crecido de manera impresionando en los últimos diez años. Detrás de ella se encuentra la eficiencia de la nube, la conectividad y capacidad de las redes, que se está volviendo más fuerte con el correr del tiempo, y generaciones de personas cada vez más computarizadas. Pronto cada aplicación contará con una base de Inteligencia Artificial. Desde el punto de vista de los negocios permitirá poder identificar las necesidades específicas de los usuarios y poder proveer un mejor servicio”, señala Lisa Spelman, vicepresidente y gerente general de Productos Intel Xeon y Marketing de Centros de Datos en Intel.
Es que con un mercado de computadoras personales (que domina) estancado, y su ausencia del mercado de procesadores para dispositivos móviles como smartphones (aunque con una presencia creciente en el iPhone con su módem 4G), Intel sólo tiene al mercado de servidores como segmento creciente: hasta Samsung la igualó en facturación como fabricante de semiconductores. Está obligada a repensar su futuro. Invirtió en drones, en anteojos de realidad aumentada, en tecnología para relojes inteligentes y otros vestibles. Nada de esto tuvo éxito.

No sólo es cuestión de datos
Para Spelman los datos se convertirán en el ingrediente esencial que dará forma a casi todas las industrias: transporte, venta minorista, fabricación, atención médica, servicios profesionales e incluso agricultura. “Este futuro, sin embargo, sólo es posible cuando contamos con el poder y la inteligencia de los datos, y ninguna otra empresa puede hacerlo mejor que Intel”, resalta.
Para poder estar en línea con sus convicciones, Intel está construyendo "plataformas" de procesadores avanzados que permiten a las empresas construir soluciones inteligentes basadas en inteligencia artificial. Pronto presentará la primera familia del mundo de "Procesador de red neuronal Nervana" (Nervana Neural Network Processor o NNP) que pretende revolucionar la informática de inteligencia artificial. Además la gigante de chips ha colaborado con Facebook para compartir conocimientos técnicos y llevar la nueva generación de hardware de IA a los usuarios.
Asimismo, con el uso de Intel Nervana, las compañías podrán desarrollar aplicaciones de inteligencia artificial que maximizarán la cantidad de datos procesados. Aunque los ejecutivos de Intel destacan que aún la Inteligencia Artificial está en sus inicios, también dicen que han observado un gran incremento en su desarrollo y uso en los últimos cinco años.
Sobre el impacto de esta tecnología desde Intel adelantan: “En la salud abriría espacio para diagnósticos más rápidos y certeros para enfermedades como mal de Parkinson; en los medios sociales, ayudará a dirigirse al público más adecuado para una acción; en la industria de autos, para avanzar al encuentro de los vehículos autónomos; y en el clima, para mejorar pronósticos basados en datos”.

Autos autónomos
La otra gran apuesta de Intel son los vehículos autónomos . Con este objetivo la compañía completó, en agosto, la adquisición de la tecnológica israelí especializada en conducción autónoma Mobileye y la incorporó a su Automated Driving Group.
También se asoció con Waymo, la empresa desarrolladora de vehículos autónomos perteneciente a Google. La tecnología desarrollada por Waymo permite a un automóvil conducirse autónomamente por ciudad y por las rutas detectando otros vehículos, señales de tráfico, peatones, etc.
Sobre el futuro de su compañía Spelman destaca que Intel ha pasado por varias evoluciones. “El desafío constante es como mantenerse a la vanguardia y como innovar por delante de los consumidores, de manera de poder satisfacer las necesidades en la medida en que van surgiendo. Diez años atrás no habría sido considerado una buena idea invertir en Xeon. Hemos pasado por una gran transformación cultural para estar abiertos a las nuevas ideas, el gran logro de la actualidad es estar cada vez más abierto a las necesidades de los clientes”, adelanta.









