Nasser Al-Attiyah, entre la puntería y la velocidad: “El Dakar me prepara para el desafío olímpico”

Con 46 años recién cumplidos, el príncipe qatarí Nasser Al-Attiyah llegó a la Argentina para correr desde pasado mañana un Dakar especial para él. Deberá defender, en un año olímpico, el título que consiguió en enero ¿Un año olímpico? Sí, porque además de piloto es un destacado tirador y competirá en los Juegos de Río de Janeiro, en agosto próximo. "El Dakar es la carrera más dura del mundo, así que es una gran manera de prepararme para el gran desafío olímpico", le dice a LA NACION.

"Empecé a tirar para que me ayude en la concentración para manejar, y luego me di cuenta que me gustaba mucho y que era realmente bueno. Así que seguí ligado a los dos deportes", cuenta Al-Attiyah, dos veces vencedor del Dakar. En Londres 2012 ganó la medalla de bronce y aspira a conseguir el oro en Río de Janeiro en tiro al plato. Su mente está conquistada por deportes de puntería y velocidad. "Disfruto mucho de las dos actividades. Lo que aprendo en un lado lo puedo implementar en el otro", analiza. No falta a unos Juegos Olímpicos desde Atlanta 1996.

A Nasser le corresponde el título de príncipe por ser primo del Emir del reino. Es uno de los pilotos más carismáticos del Dakar y es el gran candidato a quedarse nuevamente con el triunfo.

-¿Qué relación encuentra entre el automovilismo y el tiro?

-En las dos tengo que estar muy preciso y concentrado. Si fallo en tiro pierdo y me quedo con las manos vacías; si cometo un error de maniobra con el auto también pierdo y puedo accidentarme. Son deportes muy mentales.

-¿Es mejor manejando o tirando?

-… (risas) Soy muy bueno en los dos.

-Hablando de este Dakar, ¿ser el defensor del título es una presión?

-Ya me olvidé de lo que pasó en 2015, se terminó, es historia. Ahora me enfoco en este nuevo desafío.

-Pero sabe que es un gran candidato…

-Yo vengo a ganar el Dakar, sí. Para eso necesito tener una gran carrera sin ningún error. Esa es la clave para ganar el Dakar. Hay muchos pilotos de gran nivel. Los respeto a todos, pero mi único fin es retener el título.

-¿Cómo piensa hacerlo?

-Mi táctica es observar, los primeros tres días, quién va más rápido, quién va más lento. Y según eso elijo mi estrategia y cuándo ir a fondo.

-Pero hay equipos más débiles…

-Los protagonistas del Dakar serán los equipos Mini y Toyota. Hay un tiempo para todos. Respeto a todos, pero es muy difícil que Peugeot pueda ganar.

-¿Por qué?

-Sainz tardó 6 años ganar el Dakar, y yo tardé 5. Es el segundo año de Peugeot. El problema del Dakar no es ganarlo, el problema es encontrar un buen equipo en los comienzos.

-Buen equipo y buenos pilotos…

-Peugeot tiene grandísimos pilotos, que se entienda. Carlos Sainz y Stephane Peterhansel son de los mejores, pero todo lleva su tiempo. Nani Roma, Orly [Terranova], Mikko Hirvonen… hay buenos pilotos en general.

-¿Qué opina del recorrido?

-Será una carrera más veloz que en otros años porque se corre gran parte en la Argentina. Pienso que el que vaya rápido desde la largada puede tener suerte, pero a la larga es muy riesgoso. Hay que tener una buena estrategia. Vamos muy rápido y eso es difícil.

-¿Cuál es su expectativa para el 2016?

-Se viene un gran año para mí. Tengo los Juegos Olímpicos por delante y voy a participar del Mundial de Rally-cross, pero ahora lo importante es ganar el Dakar y estar liberado para los Juegos.

La altura de Bolivia y un aclimatamiento fuera de lo común

Al Attiyah está familiarizado con las altas temperaturas. "En Qatar el clima es parecido al de aquí", señala. De todos modos, realizó un proceso de aclimatamiento para no sufrir la altura de Bolivia. Desde hace meses el piloto realiza sesiones en una cámara que simula altitud. Sven Quandt, director de Axion X raid-team, señaló: "Todos los pilotos del equipo se sometieron a distintas pruebas. Durmieron en cápsulas en las que se regula el oxígeno y emula a lo que sería dormir en la altura. Tras pasar la noche allí, fueron directo a entrenarse", afirmó.

av/jt