Federico Bruno debutó en la Liga de Diamante y marcó un récord argentino

"Estoy muy feliz. Estaba muy ansioso por correr y dejar una buena impresión". La voz corresponde a Federico Bruno . El atleta de 21 años no viajó a Estados Unidos para tan sólo participar de la Liga de Diamante . El Prefontaine Classic es una de las pruebas más populares del país del norte y el chico de Concordia recibió una invitación de la organización que no quiso desechar. "Estaba con muchas expectativas por todo lo que representa este torneo. Con estar acá ya estaba contento y conseguir el récord es un plus enorme", dice desde el otro lado del teléfono Bruno, quien con su marca 4:00.31 se posicionó como el mejor atleta argentino en completar la milla. Bruno con su 11° posición logró romper la plusmarca nacional para mayores, vigente desde el 21 de abril de 1984 (4:02.45) que estaba en manos de Omar Ortega. Además, se apoderó el récord argentino Sub-23 que ostentaba Damián Ezequiel Pérez, realizado el 22 de mayo de 1993 (4:08.3). "Me sentí muy bien y fue una gran experiencia haber corrido con tantos grandes de este deporte", explica. Y añade: "Estas son oportunidades que hay que aprovechar. Codearse con los grandes atletas del mundo ayuda a que uno mejore como deportista. Sirve para saber dónde estás parado. Una cosa es el ránking y otra muy distinta es la realidad de la competencia".

Bruno, denominado el Messi del atletismo argentino por Miguel Bárzola, no le escapa a la responsabilidad. Entrena en consecuencia y busca ir paso a paso en su evolución como aleta. "No es cuestión de apresurarse. Recién tengo 21 años y entiendo las expectativas que se generan pero yo no puedo quedarme con eso. Quiero mejorar día a día y tener una carrera lo más extensa posible", se sincera. Tal vez por eso aprovechó una sugerencia de Taoufik Makhloufi, campeón olímpico de 1500 metros en Londres 2012. "¿Qué tenés que hacer hoy?", le preguntó Makhloufi. "Me tocan 10 series de 150 metros", fue la respuesta de Bruno. "Bueno, a mí me tocan 5 series. ¿Las hacemos juntos?", le sugirió el argelino de 27 años. Con una gran sonrisa, Bruno aceptó la propuesta y se entrenaron en la pista auxiliar.

-¿Sos consciente de lo que lograste? Rompiste dos marcas nacionales que llevaban 31 y 22 años de vigencia…

-Es muy importante, pero tengo en claro cuál es mi objetivo. Ahora es recuperarme para estar en dos semanas en el Sudamericano [de Lima, Perú ] de 1500 y, seguramente, de 5000 metros.

-¿Qué te queda como experiencia de este viaje para competir contra los mejores?

-Detalles. Varios detalles que hacen a un atleta mejor. Por ejemplo, estando en Eugene entendí la importancia de los suplementos. Siempre preferí comer bien y acá entendí que los suplementos ayudan mucho en la recuperación de un atleta. No puedo dar ventaja en ese detalle. En realidad, no puedo dejar ningún detalle librado al azar si quiero seguir mejorando.

-¿Qué diferencia notaste, más allá de esos 109 metros, entre la milla y los 1500 metros?

-Se corre igual que en los 1500 pero a una intensidad mayor. Noté que corren fuerte pero llegan holgados a los 1500 para rematar con todo en esos 109 metros restantes.

-Sos muy joven, pero varios grandes aletas argentinos como Antonio Silio, Luis Migueles u Oscar Cortínez aseguran que tenés mucho para mejorar. ¿Es una presión?

-No veo que sea una presión. Es lindo saber que grandes atletas del país piensen así de uno. Lo vivo con naturalidad porque trabajo para dar siempre lo mejor. Tengo mucho por delante y mi objetivo es estar presente en una final olímpica y, con esto que viví, deseo, en unos dos o tres años, volver para ganar un torneo así.