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Arrancó como un amistoso, terminó como una final. Pasó de todo. La previa del partido decisivo de la Copa Argentina finalizó con clima caliente y en medio de polémicas. En Sarandí, pegó primero Arsenal y se fue feliz por el triunfo 2-1 ante un San Lorenzo que terminó con nueve jugadores por las expulsiones de Navarro y Gentiletti. En el descuento, ese gol de Furch fue el éxtasis para el local y la frustración para los visitantes, que incluso con dos jugadores menos se habían puesto en ventaja con el golazo de Piatti. Pero Arsenal, aunque no tuvo muchas ideas, empujó y, con dos tantos de Furch, se llevó las tres unidades que le permiten saltar a la punta e igualar en el torneo Inicial momentáneamente la posición de Newell's, que hoy recibirá a River.
El partido había sido trabado. Los dos parecían tener la cabeza más puesta en la final del próximo miércoles en Catamarca. Entre la ambición de San Lorenzo y los cálculos de Arsenal se observó durante la primera etapa una versión disminuida de ambos. Los cambios diluyeron el juego. Los DT preservaron a la mayoría de los titulares para los 90 minutos que definen el título y por eso en el Ciclón hubo siete modificaciones y una versión más disminuida desde la generación del juego y la definición. Por eso Rolle y Furch recién entraron en la segunda parte en el local y cambiaron la ecuación. San Lorenzo estuvo condicionado: al principio, porque entre tantas modificaciones le costó encontrar sociedades. Ruiz y Piatti, aunque intentaron con remates desde fuera del área, no estuvieron conectados y el equipo dependía demasiado de los piques veloces de Villalba.
Las expulsiones de Navarro, a los 4 minutos del segundo tiempo, y de Gentiletti, a los 22 (las dos por doble amonestación), generaron un cambio de roles en el partido. Porque San Lorenzo se vio obligado a modificar su postura ofensiva habitual y debió reagruparse para defender. Y porque Arsenal debió ponerse el traje de protagonista, cuando por lo general suele esperar los errores del rival para lastimar.
En los cambios de Pizzi y Alfaro se confirmaron las posturas. Pero San Lorenzo sorprendió en su única incursión con un zurdazo cruzado de Piatti desde fuera del área que se metió junto al palo izquierdo de Campestrini. Grito de furia para calmar tanta inferioridad. Era una muestra de carácter, era el impulso ganador esperado. Pero... la alegría le duró dos minutos. Nunca terminó de acomodarse con el 1-0. Un pase pinchado de Rolle siguió con un zurdazo de Furch ante un Torrico que pudo ofrecer una resistencia mayor y... Arsenal otra vez en el partido.
A la noche le quedaban emociones. Salvadas de Torrico ante un Arsenal que iba a puro centro, aunque sin muchas ideas. Y un San Lorenzo que aguantaba como podía, ya con los ingresos de Prósperi (por Piatti) y Alvarado (por Villalba) para reforzar el bloque de atrás.
El segundo gol de Furch llegó en el descuento, de arremetida y tras un centro de Aguirre desde la izquierda, que aprovechó un pecado de juventud del lateral Catalán. Final con emociones y... sensaciones de que el miércoles se escribirán más capítulos de esta historia.
El gol de Piatti
Los goles de Furch

