A Huracán le sigue costando hacer goles y Arsenal lo venció 2-0 de contraataque

Antes de arrancar la fecha, Huracán era el equipo que menos goles había hecho en la Superliga: apenas ocho en 15 partidos. Tras la salida de Juan Pablo Vojvoda luego de la goleada ante River (0-4), por la sexta fecha, Néstor Apuzzo tomó las riendas del equipo y con él consiguió cierta solidez defensiva (le habían anotado apenas 4 goles en 9 partidos), pero al mismo tiempo tenía muchas dificultades para elaborar juego y crear situaciones de gol. Ante Arsenal, en Parque Patricios, por la 16° fecha, tuvo voluntad y empuje, pero el déficit ofensivo se potenció. Los dirigidos por Sergio Rondina se impusieron 2-0 con dos goles de contraataque, uno de Juan Kaprof y otro de Juan Manuel García.

Después de ganarle el clásico a San Lorenzo (2-0), con goles de Lucas Barrios y Fernando Coniglio, Huracán había encontrado una reacción anímica y futbolística, incluso los futbolistas cantaban en la cancha y en el vestuario por la continuidad de Apuzzo: "Se viene la trampa de Apuzzo", gritaban en relación a una estrategia defensiva y de presión elegida por el DT para vencer a los de Pizzi. Pero las derrotas ante Lanús (0-1), Racing (0-1), Union (0-1) y Arsenal (0-2) dejaron expuesto el nivel colectivo, como si ese envión inicial se hubiera esfumado rápido.

El Globo había marcado un solo gol en los últimos cinco partidos: el juvenil Nicolás Cordero ante Central Córdoba de Santiago del Estero (1-1). Y ante Arsenal, también en Parque Patricios, durante el primer tiempo contó con dos chances del mismo protagonista: Cordero, pero en ambas respondió bien el arquero Daniel Sappa. En la primera, con un buen remate desde afuera del área y con el balón buscando el ángulo superior izquierdo, el arquero mandó la pelota al córner; en la segunda, con un cabezazo tras un centro de Curruhinca, también Sappa desvió el balón al córner.

Arsenal, en ese primer tiempo, lo había puesto en apuros tres veces a Antony Silva. Bareiro había salvado en la línea un gol de Juan Manuel García y Kaprof, con sus gambetas, se había vuelto escurridizo para la defensa local. Incluso a los 40 minutos el árbitro Néstor Pitana no sancionó un penal de César Ibáñez por agarrón a Kaprof. La rebeldía del equipo de Rondina era acompañada por un buen juego a partir de su sistema táctico habitual (4-3-1-2), aunque le faltó acertar más en el último pase.

Y en el arranque del segundo tiempo Arsenal logró sorprender a Huracán con un golazo de contraataque en tres pases: Piovi cortó y jugó largo para la corrida de García y éste asistió a Kaprof, que definió ante Antony Silva con un derechazo cruzado.

Ese gol sacó del eje a Huracán, que perdió el orden. Así, en los próximos diez minutos, Arsenal logró generarle otras tres chances claras de gol, y Silva mantuvo en partido al Globo. El equipo del Viaducto careció de claridad para acertar mejor desde la eficacia de los pases porque tuvo espacios para contraatacar.

Apuzzo movió el banco: Coniglio ingresó ayer en el segundo tiempo en reemplazo del lateral derecho Romat y Norberto Briasco por Barrios. Más adelante sumó al juvenil Braian Maidana por Curruhincha. Pasó a defender con línea de 3 y pareció ganar en potencia y en búsqueda por los costados, pero no en claridad.

Sobre el final, a los 42 minutos, Juan Manuel García, tras otro contraataque y tras recibir un pase de Méndez, definió el 2-0 luego de gambetear a Bareiro y con un toque sobre el palo izquierdo de Silva. Y resolvió el encuentro.

No es casual que apenas cinco futbolistas se hayan anotado en la tabla de goleadores de la actual Superliga. El máximo artillero del Globo es Coniglio (con 3 festejos), seguido por Droopy Gómez (2), Briasco (1), Barrios (1) y el mencionado Cordero (1). Esta estadística refleja las dificultades de Huracán en la faceta ofensiva. Y, ante Arsenal, la ecuación no se modificó: Huracán sigue siendo el menos goleador del torneo.