Lollo y la frustración de un debut con un sabor amargo

En 24 horas, la vida de Luciano Lollo dio un giro rotundo. Anteayer, nació su hija Francesca. Y ayer debutó oficialmente con River luego de casi diez meses sin jugar. Pero los noventa minutos que tanto deseó, y por los que tanto peleó luego de dos operaciones por la fractura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo, por momentos se transformaron en una lucha cuesta arriba para el defensor.

Previo a la salida de los equipos, la voz del estadio clamó su nombre, mientras aparecía su fotografía en la pantalla. Bajaron unos tibios aplausos, que después se acoplaron al recibimiento del elenco de Marcelo Gallardo.

Pero con el transcurso de los minutos, y tras un mal pase frontal hacia atrás -que solucionó Batalla- y un salto a destiempo -cortó Casco antes de que Soldano recibiera la pelota- en el primer cuarto de hora, aparecieron los murmullos. A pesar de tener un discreto rendimiento en la pelea hombre a hombre con los delanteros de Unión, Lollo no pudo mostrar seguridad con el balón, decidió mal en sucesivas salidas y abusó de los pelotazos, algunos sin destino.

En el final, entregó mal un pase que dejó mal parado al equipo y luego bajó de un topetazo a De Iriondo y fue amonestado. Allí, los hinchas ya no ocultaron su fastidio ante un rendimiento dispar que evidenció la falta de rodaje de un jugador que atravesó momentos difíciles.

Porque desde aquella operación en marzo de 2016, cuando se fracturó en un Racing-Boca por la Copa Libertadores, Lollo sólo había podido jugar el 25 de mayo, ante Gimnasia y Tiro de Salta por la Copa Argentina, dejando el terreno a los 24 minutos debido a fuertes dolores.

Firmó su contrato con River el 29 de junio del año pasado y el club compró su pase por 3.500.000 dólares, tras una revisión médica que evidenció la mala recuperación. Sin haber debutado, fue operado nuevamente el 12 de octubre tras un golpe en una práctica semanas atrás. Ayer, recién pudo regresar.

"Fue importante la vuelta de Lollo, hacía un año que no jugaba. La única forma de que gane ritmo es jugando, por eso queríamos que disputara este partido. Fueron muchísimas emociones encontradas para él porque, además, anoche fue papá", explicó Gallardo. Lollo no viajará a Colombia, pero las palabras del DT evidencian que el zaguero que cumplirá 30 años en dos semanas no es un jugador más y cree importante su presencia. Porque aunque la noche del debut no haya sido la ideal, el camino de Lollo recién acaba de volver a empezar.