Sin el colombiano Díaz, River igual no agita el mercado

Ni el retiro de Rodrigo Mora, ni la imposibilidad de sumar a Emiliano Rigoni, ni la lesión de Ignacio Scocco, ni la negativa de Junior por el colombiano Luis Díaz modifican los planes de River. Lejos de apostar por un mercado de pases explosivo, la idea del cuerpo técnico y la dirigencia se mantiene: reforzar puestos puntuales para minimizar falencias y potenciar virtudes, haciendo foco en las necesidades más importantes de un plantel que considera bien armado y con la posibilidad de darle mayor lugar a las divisiones inferiores.

En caso de que no se produzca una venta inesperada, el principal hueco que el DT desea tapar es el que dejó la partida de Gonzalo "Pity" Martínez, una de las pocas cartas que ya no estarán. Si bien todos los cañones apuntaban a Colombia con el extremo Luis Díaz, ayer se cerró la novela sin final feliz: Junior no bajó su pretensión de ocho millones de dólares por el 70% del pase y no aceptó la oferta de River de 5,6 millones.

A pesar de que el tiempo no es un aliado, ya que el mercado de pases cerrará el 31 de enero, la mala noticia de Ignacio Scocco –lesión muscular en el gemelo derecho que lo dejaría afuera al menos de los dos primeros partidos del año ante Defensa y Justicia y Unión– no aceleró ni modificó los planes del Millonario: comprará lo necesario y continúa buscando como prioridad un jugador con características similares a las del número 10 que emigró a Estados Unidos.

Ya sin Mora, retirado del fútbol profesional por la lesión de su cadera, hoy el DT cuenta con Scocco, Lucas Pratto, Rafael Borré, Julián Álvarez –actualmente en el Sub-20– como alternativas para la delantera, más los juveniles Lucas Beltrán y Federico Girotti.

Mientras tanto, el defensor chileno Paulo Díaz es el jugador que más cerca se encuentra de desembarcar a Núñez para tapar otro de los huecos: un marcador central ante la probable salida de Jonatan Maidana a Toluca de México y la posible partida de Luciano Lollo, quien tenía decidido emigrar, pero aún no ha resuelto su situación mientras trabaja en la puesta a punto para tener el alta médica definitiva y poder hacer fútbol junto con sus compañeros en los próximos días. Ocurre que Lollo realizó la pretemporada completa y superó la lesión ósea en el segundo metatarsiano del pie derecho a fines de noviembre, pero todavía no está para jugar y por eso no viajó a Uruguay para el amistoso de hoy ante Nacional.

Mientras tanto, ¿por qué se demora la llegada de Díaz, quien puede jugar como lateral derecho o marcador central? Pese a que el préstamo por 18 meses ya estaba acordado con Al Ahli de Arabia Saudita, club dueño de su pase, aparecieron diferencias en las condiciones económicas de la negociación que dilataron el acuerdo final.

En un principio, el plan era pagar un millón de dólares el préstamo con una opción de compra de seis millones que, en caso de hacerla efectiva, descontaría el costo de la cesión. Más allá del inconveniente, y que en las últimas horas también comenzó a sonar el nombre de Juan Cruz Komar –lo reconoció Andrés Fassi, presidente de Talleres-, en Núñez son optimistas.

Así, para la zaga central, a la espera de lo que suceda con Maidana y Lollo, el Muñeco hoy cuenta con Javier Pinola y Lucas Martínez Quarta, más los juveniles Kevin Sibille y Héctor David Martínez. Y espera por el chileno Díaz, quien en las próximas horas podría ser el primer refuerzo de un 2019 que durante el primer semestre no promete demasiados cambios ni revuelos.